El misterio del teléfono extraviado: Fabiola Yañez busca cómo despejar dudas sobre las pruebas contra Alberto Fernández
La declaración de la ex primera dama dijo que el aparato que contenía las conversaciones durante la gestión del expresidente quedó atrás en una mudanza; buscan recuperar esos chats y apuntan a que no son necesarios para probar los hechos imputados
- 4 minutos de lectura'
El teléfono perdido de Fabiola Yañez abrió especulaciones de todo tipo. Lo cierto es que, durante la primera declaración judicial, la ex primera dama dijo que ya no tiene el celular que usó durante la gestión de Alberto Fernández y durante su estadía en la Quinta de Olivos. Mariana Gallego, la abogada de Yañez, estuvo este lunes en Comodoro Py, y trascendió que su objetivo es recuperar los chats perdidos, aunque insisten en que no son necesarias las conversaciones de esos años para probar los nueve hechos que se le imputaron al expresidente.
Además, desde el entorno de Yañez aseguran que no hay otros intercambios entre la ex pareja similares a los que envió, a través de capturas de pantalla, a María Cantero, cuando confesó los golpes que supuestamente recibía.
LA NACION reveló ayer que Yañez declaró ante la Justicia que extravió el teléfono celular que contiene todas las conversaciones con Alberto Fernández durante su gestión. Según explicó, el celular donde estaban esos chats fue extraviado en una mudanza en España, cuando pasó del departamento que compartía con Fernández en Madrid a otro, también en la capital española, que ocupa actualmente. Lo declaró la semana pasada ante los fiscales.
De acuerdo a lo recopilado desde el teléfono de la exsecretaria de Alberto Fernández, la ex primera dama se quejaba de los golpes que había recibido durante tres días. Esto ocurrió entre el 11 y el 13 de agosto. Fuentes cercanas a Gallego aseguran que, por lo que han visto hasta el momento, no habría más chats entre ellos en los que se hable de violencia física o hayan reclamos al respecto.
¿Por qué Yañez se desprendió del celular? Las versiones son diferentes. Algunas fuentes indican que lo olvidó y otras que lo dejó intencionalmente, porque era el aparato que le habían entregado durante el gobierno de Alberto Fernández. Además, hay dos líneas que solía utilizar Yañez que figuran desconectadas.
Por otra parte, dos fuentes cercanas a Yañez dijeron a LA NACION que existirían copias certificadas por escribano de los WhatsApp. Una se habría hecho en la Argentina y otra en España. Los representantes de la ex primera dama evitaron confirmar la existencia de esas copias. En la Justicia tampoco tienen constancia de ello ya que todavía no hubo presentación de ninguna prueba.
La defensa de Fabiola Yañez plantea que no es necesario el contenido del celular para probar los hechos que se le imputaron al expresidente, que no habría nada en ese aparato imprescindible para probar los golpes y que el teléfono de María Cantero es suficiente para acreditar los hechos del 12 de agosto. Argumentan que, a lo sumo, habrían peleas sobre infidelidades.
Además, que para demostrar el hostigamiento y las amenazas, cuenta con su teléfono actual y que utilizarán el registro de llamadas que pidió la Justicia.
Las partes están en pleno armado de estrategias, por lo que estas sufren cambios. Por parte de la defensa, en los últimos días estuvo Silvina Carreira en Comodoro Py tomando vista de la declaración de cuatro horas de Fabiola y anotando puntos clave debido a que esta no ha sido desgrabada y la única manera de accederla es presencialmente. No se descarta que designe a otra abogada para asistirla.
Hoy hubo un movimiento importante en el foco de la querella, que se centrará en más testigos que se habrían acercado a contar sus versiones. Los abogados de Yañez están en análisis de a quiénes pedir citar y a quiénes no.
En la Justicia dejar entrever a que el teléfono no es imprescindible, aunque no ignoran el valor probatorio que tenían los chats originales de aquel 12 de agosto, que no fueron ofrecidos formalmente en ningún momento. Sin embargo, apuntarán a otras pruebas. En su primera declaración, Yañez dijo que si bien no tenía el celular, podía aportar capturas de pantalla sobre las conversaciones previas a 2024.
En términos de aparatos disponibles, por ahora, con certeza, la investigación cuenta con lo recabado del de María Cantero, con el secuestrado de Fernández, que a partir de una decisión del juez Ercolini de la semana pasada, podrá utilizarse para revisar chats de los últimos ocho años (desde 2016), el teléfono que actualmente usa Yañez, en el que hay conversaciones de los últimos meses, que iba a aportar esta semana, y el celular que el expresidente le entregó a su hijo en el que Fabiola halló los videos, fotos y chats con otras mujeres.