El ministro Luis Petri dijo que “las FF. AA. tienen que estar preparadas para actuar en casos de terrorismo”
Encabezó el envío de 237 militares a la misión de paz en Chipre y afirmó que los militares no solo deben alistarse “para combatir cualquier agresión externa de un Estado”; críticas al kirchnerismo
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Al despedir a un contingente de 237 efectivos del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, que se sumarán a la misión de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz en Chipre, el ministro de Defensa, Luis Petri, afirmó que las Fuerzas Armadas “tienen que estar preparadas para actuar en casos de terrorismo”.
Ratificó, así, el objetivo de su gestión de dejar atrás la reglamentación que desde hace 18 años impide a los militares intervenir frente a agresiones de organizaciones terroristas, como estableció el gobierno de Néstor Kirchner, al dictar el decreto 727/2006, reglamentario de la ley de defensa nacional. Criticó, en ese sentido, la decisión que adoptó en su momento la gestión ministerial de Nilda Garré.
“Las Fuerzas Armadas tienen que recuperar la plena capacidad de accionar. Porque en el mundo en que vivimos nuestras Fuerzas Armadas tienen que estar preparadas no solamente para combatir cualquier agresión externa de un Estado”, expresó el ministro radical en la Brigada Aérea de El Palomar, junto al jefe del Estado Mayor Conjunto, brigadier general, Xavier Julián Isaac.
Petri viene trabajando en la redacción de un nuevo decreto, que según fuentes castrenses se espera dar a conocer en breve. La idea es habilitar a las Fuerzas Armadas a actuar en casos de ataques de organizaciones terroristas como el perpetrado por el grupo Hamas, el 7 de octubre pasado, en la Franja de Gaza.
En su mensaje, el ministro expresó que “la misión de las Fuerzas Armadas va mucho más allá y tiene que ver con la defensa de los intereses vitales de la patria, la defensa de la vida, de la libertad y de la integridad territorial”.
Cerca del ministro de Defensa entienden que las restricciones del decreto reglamentario, fijadas durante la gestión ministerial de Garré, conforman “una limitación adicional, que no estaba contemplada en la ley de defensa nacional”. En esa norma, sancionada en abril de 1988, se dispuso el uso de las Fuerzas Armadas “para enfrentar las agresiones de origen externo”. Pero el decreto reglamentado por el primer gobierno kirchnerista en 2006 determinó que esas agresiones de origen externo debían ser perpetradas por “fuerzas armadas de otro Estado”, lo que inhabilita a los militares para intervenir ante eventuales atentados terroristas, como el que sufrió la Argentina en 1994 con el ataque a la AMIA.
“La idea es aprobar la nueva reglamentación en breve y bastará con modificar ese decreto”, anticipó una fuente gubernamental a LA NACION.
No se esperan, sin embargo, cambios inmediatos en la actuación de los militares en el combate contra el narcotráfico y el crimen organizado. En esta materia, las Fuerzas Armadas continuarán apoyando con tareas logísticas las operaciones de las fuerzas de seguridad, de acuerdo con los parámetros fijados en la ley de seguridad interior vigente.
La misión de paz
Los efectivos militares permanecerán seis meses en la misión de paz en Chipre y formarán parte de los Cascos Azules, el grupo formado por iniciativa de las Naciones Unidas y del que la Argentina forma parte desde hace más de 30 años. Unos 90.000 militares de distintos ejércitos nacionales del mundo participan de la misión de paz, que está orientada a dar protección a las poblaciones civiles de las zonas en conflicto.
El nuevo contingente enviado a Chipre se compone de 201 militares integrantes de la Fuerza de Tarea Argentina 63 (FTA 63) y 36 miembros de la Unidad de Helicópteros Unflight, con la misión de contribuir a la misión de paz.
“Es una tarea de enorme responsabilidad que desde hace más de 30 años la República Argentina viene desplegando como fuerza de paz en Chipre, en una misión de las Naciones Unidas”, dijo Petri, al despedir a los militares.
“Ustedes se prepararon toda la vida para este momento. Así que yo les pido que representen y dejen de la mejor manera a la República Argentina, que aquí los vamos a estar esperando junto a sus familias y la Patria”, concluyó Petri.
En tanto, el brigadier Isaac animó a las tropas a constituirse en “garantes de la paz, que en definitiva es para lo que estamos preparadas las Fuerzas Armadas”. También aseveró que serán “embajadores de la cultura argentina y tendrán la oportunidad de interactuar con otros países, lo que los enriquecerá profesionalmente”.
La Argentina participa ininterrumpidamente desde 1993 de esta misión internacional de paz, bajo la conducción de las Naciones Unidas. El país se sumó durante la presidencia de Carlos Menem y mantuvo su participación en los gobiernos que siguieron.
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