El juicio contra Cristina Kirchner por el reparto de obra pública se reanudará en febrero con la declaración de Alberto Fernández
Es el caso conocido como Vialidad; en la primer semana estarán también citados a pedido de la vicepresidenta Zannini, Massa, Abal Medina y Capitanich
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LA NACIONHernán Cappiello
El juicio que se le sigue a la vicepresidenta Cristina Kirchner por corrupción se reanudará en febrero con las declaración del presidente Alberto Fernández, citado para el 8 y con las testimoniales del exsecretario Legal y Técnico Carlos Zaninni, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y los ex jefes de Gabinte Juan Manuel Abal Medina y Jorge Capitanich.
Así lo decidió el presidente del tribunal Jorge Gorini, que estableció la siguiente agenda: el 1° de febrero están citados Zannini y Abal Medina; el 7 de febrero Massa y Capitanich, y el 8 de febrero Alberto Fernández y el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández.
Todos los citados a prestar declaración pueden hacerlo por escrito, recibiendo de antemano un pliego de preguntas, en razón del cargo que ocupan, excepto Abal Medina, que comparecer ante el tribunal.
Los funcionarios y exfuncionarios citados tienen en común en que fueron jefes de Gabinete durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, que están bajo investigación por la manera en que otorgaron licitaciones de obras públicas en beneficio del empresario Lázaro Báez, condenado por lavado de dinero.
Las testimoniales fueron pedidas por el abogado de Cristina Kirchner, Alberto Beraldi, ya que una de las hipótesis de la acusación es que se redistribuyeron partidas presupuestarias para para poder asignarlas a las obras públicas que Vialidad Nacional financió en Santa Cruz. Y justamente la tarea de reasignación de las partidas presupuestarias en propia de los jefes de gabinete en ese momento.
El juicio oral contra la vicepresidenta -que se hace por Zoom dos veces a la semana- tuvo su última audiencia del año el martes pasado y ahora está suspendida por la feria judicial de verano, que transcurre durante el mes de enero.
La última jornada se desarrolló en un clima de máxima tensión con la declaración del arrepentido y también condenado Leonardo Fariña, financista de Báez. En este proceso se investiga a una asociación ilícita dirigida por Cristina Kirchner que benefició a Lázaro Báez con adjudicaciones de obra pública vial mediante su firma Austral Construcciones. Fariña reiteró en el juicio que las obras públicas otorgadas a Báez tenían sobreprecios y que su trabajo consistía en “hacer negro el dinero blanco”.
Fariña, que ya fue condenado a cinco años de cárcel en el juicio por lavado de dinero contra Lázaro Báez.
El fiscal en este juicio contra Cristina Krichner es Diego Luciani y el interrogatorio lo guió el juez Rodrigo Giménez Uriburu, a cargo del proceso junto con sus colegas Jorge Gorini y Andrés Basso.
La tensión se dio por las repreguntas y objeciones del abogado de Lázaro Báez, Juan Villanueva, que hasta fue cuestionado en el interrogatorio por sus propios colegas de las defensas.
El fiscal Luciani le preguntó porque en su trabajo “debía hacer negro el blanco”. Y Fariña respondió, “Porque se tenían que extraer los fondos que ingresaban de manera blanca, los pagos de obra pública se hacían vía transferencia o depósito y eso debía transformarse en billete, pasar a ser patrimonio negro u oculto del accionista. Como bien está probado en el debate anterior [el juicio donde fue condenado por lavado junto con Lázaro Báez], se utilizaban distintos tipos de mecanismos que no son que más ni menos que los usuales que se usan en un montón de empresas, extraían los fondos líquidos de la empresa”. Dijo que ese dinero debía ser retirado porque la obras tenían sobreprecios, según supo por Báez y otros empleados.
Por Hernán Cappiello
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