El Juicio a las Juntas: un hito que el paso del tiempo revaloriza
Las condenas de los comandantes, en 1985, dejaron un fuerte mensaje contra la impunidad pese a los indultos del menemismo; el testimonio de Ruiz Guiñazú y Gil Lavedra
La reseña histórica marca que, el 9 de diciembre de 1985, en un proceso judicial sin precedente y de un peso simbólico que iría aumentando con el paso del tiempo, los principales responsables de los crímenes del terrorismo de Estado de la dictadura que gobernó la Argentina entre 1976 y 1983 fueron condenados por las atrocidades cometidas. El gobierno del radical Raúl Alfonsín estaba a punto de cumplir su segundo año cuando la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal condenó a Jorge Rafael Videla, Emilio Massera, Roberto Viola, Armando Lambruschini y Orlando Agosti.
El juicio marcó un antes y un después. Se trata de un momento bisagra que suma relevancia en el análisis en perspectiva. Rodeado del aliento todavía fuerte de la dictadura y de sus jerarcas, el proceso se desarrolló con protagonistas que lo recuerdan y lo ponen en valor en el marco de los 40 años del estallido del golpe del 24 de marzo de 1976. Tiene una importancia superlativa para la memoria y la vida democrática del país, coinciden dos de ellos: Magdalena Ruiz Guiñazú, testigo en el proceso judicial, y Ricardo Gil Lavedra, uno de los integrantes del tribunal que dictó la sentencia.
"Hoy, más que nunca, le asigno un enorme valor al Juicio a la Junta de Comandantes. En primer término, se les había sugerido a las Fuerzas Armadas que se juzgaran a sí mismas. Como sabemos, esto no resultó posible. Al recurrir a la Justicia, llovieron las amenazas y se produjo un clima de tanta tensión que, por televisión, solamente se transmitieron imágenes del juicio sin el audio correspondiente", recuerda la periodista.
Ruiz Guiñazú fue integrante de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep), cuyo trabajo derivó en el "Nunca Más". Recuerda el momento de su participación como testigo en el Juicio a las Juntas como un instante de tensión. "En lo personal, como testigo en el juicio, lo viví con mucha angustia y el peso de una enorme responsabilidad", relata a LA NACION.
Gil Lavedra fue uno de los jueces que llevaron adelante el proceso judicial; el tribunal lo completaban León Arslanian, Guillermo Ledesma, Andrés D'Alessio, Jorge Valerga Aráoz y Jorge Torlasco. "El Juicio a las Juntas puede ser valorado en una doble dimensión", considera Gil Lavedra. Y profundiza: "Por un lado, constituye la piedra angular de la transición democrática argentina, pues permitió que ésta se edificara sobre las reglas del Estado de Derecho, a través de un proceso en el que se aplicó la ley a los más poderosos por la comisión de crímenes atroces, que usualmente quedaban en la impunidad. Por el otro, es un símbolo de la inacabada lucha por los derechos humanos, que hoy se traducen en el derecho a una vida digna".
El resultado del juicio fueron las condenas a reclusión perpetua para Videla, a prisión perpetua para Massera, a 17 años para Viola, a ocho años para Lambruschini y a cuatro años y medio para Agosti. Los delitos que los llevaron al banquillo y las sentencias fueron homicidio agravado por alevosía, privación ilegítima de la libertad agravada por amenazas y violencias, tormentos seguidos de muerte y robo.
Los indultos
Carlos Menem le asestó un golpe al mensaje del Juicio a las Juntas con los indultos que impulsó para sus condenados, en 1990. Si bien la Justicia terminó confirmando las penas años después, los indultos son un recuerdo amargo para Ruiz Guiñazú y Gil Lavedra. "Como miembros de la Conadep, expresamos nuestra oposición a los indultos por los hechos atroces que ocurrieron en nuestro país", reflexiona la periodista. El ex diputado radical, por su parte, señala: "Me provocaron mucho dolor porque entendí que no hacía falta tanto. Creo que excedieron la necesidad política y obturaron un reclamo de justicia al que debía darse cauce".
La responsabilidad que le tocó en suerte a Gil Lavedra en el juicio está marcada en su memoria. "Lo viví con una gran tensión. Había que asegurar un proceso inobjetable a la luz de los principios constitucionales, pero a la vez había que actuar con rapidez porque era evidente que los militares no iban a tolerar los juicios y se ignoraba si la democracia podía soportar eventuales alzamientos armados." Todo estaba fresco, los recuerdos del horror y también el poder de los militares.
La trascendencia del juicio, para Ruiz Guiñazú, excede a la Argentina. "El Juicio a las Juntas argentinas fue único, ya que Nuremberg contó con la organización de los países vencedores de la Segunda Guerra Mundial, y otros tribunales como el de La Haya o el de Kosovo fueron o son internacionales. En cambio, el Juicio a las Juntas argentino contó con jueces, fiscales, víctimas y testigos de nuestro país", destaca.
Los otros 24 de Marzo
1986
Décimo aniversario
En la Plaza de Mayo, las Madres organizaron un acto junto con otras entidades. Hebe de Bonafini dijo que se trataba de un día de lucha y no de duelo. La Policía Federal dispuso un enorme operativo de seguridad para controlar el acto, cuyo despliegue abarcó 50 manzanas y generó un caos de tránsito. En el Centro Cultural San Martín se hizo un homenaje a Rodolfo Walsh, desaparecido en 1977 tras su "Carta Abierta a la Junta Militar"
1996
Vigésimo aniversario
Una multitudinaria marcha salió de la plaza Congreso y se dirigió a la Plaza de Mayo. Fue organizada por la multisectorial Comisión por la Memoria, la Verdad y la Justicia. La encabezaron Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y reunió a unas 100.000 personas. La comisión hizo público un documento en el que cuestionó las leyes de punto final y obediencia debida, y los indultos. Menem dio un mensaje a la población en el que condenó el golpe
2006
Trigésimo aniversario
El acto central fue en el Colegio Militar, en El Palomar. Allí habló el presidente Néstor Kirchner, que dio un encendido discurso. En la Plaza de Mayo hubo incidentes en un acto que congregó a una multitud. Se enfrentaron militantes de izquierda y sectores de la Juventud Peronista. En este acto estuvo Estela de Carlotto. Se leyó un documento crítico del gobierno de Kirchner que las Madres y Abuelas no aprobaron