El Gobierno considera "justo" el reclamo

La doble demanda que la provincia de Buenos Aires presentó contra el Estado en reclamo de fondos de coparticipación federal retenidos por la Anses y la AFIP no sorprendió ayer a la Casa Rosada.

"Entendemos el reclamo, lo consideramos justo. La provincia de Buenos Aires ha sido discriminada históricamente, y de hecho le convendría que no existiera el Fondo del Conurbano, por el que recibe mucho menos de lo que le corresponde", indicó una alta fuente del Gobierno a modo de resumen.

La Casa Rosada acordó, hace ya meses, la embestida de la gobernadora María Eugenia Vidal contra el tope que la normativa vigente desde 1992 establece para la recepción de fondos por parte de la Nación, y que comenzó con un proyecto de ley para "abolir" el Fondo del Conurbano presentado en la Legislatura bonaerense.

"La gobernadora está defendiendo los intereses de su provincia, como no lo hizo ninguno de sus antecesores, que por desidia o sumisión dejaron las cosas como estaban", afirmó a LA NACION el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. La mención del ministro a los "antecesores" (y en especial con el dardo orientado hacia el ex gobernador y candidato presidencial Daniel Scioli) tiene una doble lectura: dejar al ex motonauta "pegado" al kirchnerismo y, de paso, fortalecer a Vidal, que gobierna la provincia más poblada del país tironeada por los avatares de una gestión complicada en lo económico y con la necesidad de un triunfo en las legislativas del año próximo.

"Menos de 2 por ciento de lo que recauda el Fondo del Conurbano llega a las arcas de la provincia. Es inviable desde lo financiero", comentó una fuente oficial, que como otras aplaudió la iniciativa judicial de la gobernadora bonaerense.

En Balcarce 50, ayer semivacía por la gira del presidente Mauricio Macri por Europa, aseguran que la eventual devolución de los $ 48.000 millones que reclama Vidal, a la manera de las provincias que ya cobran el 15 por ciento de la coparticipación, como Santa Fe, San Luis y Córdoba, no provocará nuevos planteos por parte del resto de los gobernadores. "Es obvio que las provincias no quieren perder recursos, pero los gobernadores saben que esta situación es insostenible", afirmó un alto funcionario con conocimiento de las negociaciones con los mandatarios.

Desde el Gobierno recordaron el pacto firmado el 18 de mayo en Córdoba con todas las provincias para cobrar los fondos retenidos a la Anses en cuotas y en un plazo total de cuatro años. El objetivo es claro: asegurar, a través del envío constante de fondos, la paz social y a la vez la "colaboración" de los legisladores que responden a sus gobernadores (sean oficialistas u opositores) en votaciones clave para la Casa Rosada.

Por si esas transferencias automáticas no alcanzaran, desde el ministerio que encabeza Frigerio siguen adelante con su plan de obra pública, extendida no sólo al norte del país, a través del Plan Belgrano, sino a otras provincias. Ayer, de hecho, los gobernadores de San Juan (Sergio Uñac), Chubut (Mario Das Neves), Santa Fe (Miguel Lifschitz) y Santiago del Estero (Claudia Abdala de Zamora) firmaron en Balcarce 50 convenios para obras por un total de $ 1500 millones. "Vamos a gastar en obra pública el cien por cien del presupuesto que nos asignen", confiaron anoche desde un importante despacho.

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