El gobernador que renunció peleado con los Kirchner y 17 años después busca la revancha como opositor

EL CALAFATE.- La novedad política del cierre de listas llegó pasada la medianoche: el exgobernador peronista Sergio Acevedo -quien renunció en 2006 enemistado con el entonces presidente Néstor Kirchner- inscribió anoche su candidatura a la gobernación dentro de “Por Santa Cruz”, el frente electoral encabezado por el sindicalista Claudio Vidal que ahora se enfrenta al oficialismo encarnado en los candidatos kirchneristas de Unión por la Patria.

La de Acevedo es una de las once fórmulas que se anotaron para competir por la gobernación que hoy ejerce Alicia Kirchner en su último mandato. Anoche, ella confirmó su postulación para acceder a una banca en el senado nacional como cabeza de lista secundada por Pablo González, actual presidente de YPF. En diciembre de 2023, la cuñada de Cristina Kirchner habrá cumplido ocho años en el cargo que su hermano supo ostentar durante casi 12. Una vez más, su apellido en la lista será clave para aportarles votos a los candidatos locales y nacionales de su espacio.

Santa Cruz es una de las pocas provincias que tiene en vigencia la controvertida “ley de lemas”, un sistema electoral que permite a los partidos presentar varios candidatos para un mismo cargo y que hace que el candidato más votado no siempre sea el que gana. En este contexto, el frente dentro del cual competirá Acevedo llevará cinco fórmulas para la gobernación en un intento por disputarle al kirchnerismo su hegeminía de 32 años, de la cual él mismo formó parte.

Acevedo fue intendente de Pico Truncado desde la renovación peronista, diputado provincial, vicegobernador, diputado nacional, jefe de la exSIDE y gobernador. En los años fuera de la política retomó el ejercicio de la abogacía en la actividad privada. Vuelve a ser candidato, diecisiete años después de que renunció a la gobernación tras negarse a estampar su firma para pagar adelantos con fondos provinciales por obra pública nacional a las empresas de Lázaro Báez. Se fue sin dar demasiados detalles de los hechos que empujaron su salida y se autoexilió de la política durante más de una década.

En el 2018 volvió al ruedo en las filas del partido SER, Somos Energía para Renovar Santa Cruz, fundado por Vidal en 2021. Fue tercero en la lista de candidatos a diputados nacionales que catapultó a Vidal a una banca en la cámara baja nacional. Hasta ayer, su nombre sonaba como candidato a senador, sin embargo, tras el cierre frenético de listas, fuentes del su sector político confirmaron a LA NACION que Acevedo y Sandra Gotti conforman la quinta fórmula para la gobernación que aquí se disputará en simultáneo con las PASO, el próximo 13 de agosto.

Dentro del espacio en el que Acevedo se inscribió sobre el cierre, Vidal, el sindicalista que lo convenció a volver al escenario político, es el candidato más expectante. Fue socio del kirchnerismo en el 2019, pero sentó las bases de su partido en el poderoso sindicato petrolero que aún dirige. En el mismo espacio está la dupla de Pro, que está integrada por el periodista Mario Markic y la médica Miriam Luna; el partido Encuentro Ciudadano, que llevará la fórmula del intendente radical de San Julián, Daniel Gardonio, y la docente Gabriela Mestelán, y el partido vecinal Movere, que promueve al intendente de Las Heras, José María Carambia.

La multiplicidad de fórmulas demuestra que la clave diferencial de esta elección con respecto al 2019 es que tanto el oficialismo como la oposición sufrieron rupturas: mientras Vidal rompió con el kirchnerismo que integró en esa elección, el frente Cambia por Santa Cruz –el capítulo local de Juntos por el Cambio- también sufrió una diáspora: ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo para conformar un frente único con Vidal, el frente se fracturó y el Pro y Encuentro Ciudadano se sumaron a las huestes de Vidal.

De este modo, Cambia Santa Cruz presentó ayer dos fórmulas para la gobernación: la integrada por la diputada nacional Roxana Reyes y el dirigente Luis Vera, y la conformada por Mirey Zeidán y el exintendente de Pico Truncado, el socialista Omar Fernández. Reyes es discípula política del senador Eduardo Costa, referente de JxC en la provincia, quien intentará renovar su banca en el Senado y volverá a enfrentar a Alicia Kirchner: el empresario ahora buscará su revancha tras haber perdido con ella dos veces en su carrera a la gobernación.

Por el lado de Unión por la Patria, las postulaciones no trajeron sorpresa. En su última visita a Río Gallegos, la vicepresidenta ungió a los candidatos expectantes: se alistaron tres fórmulas para intentar retener la gobernación en una disputa que será seguida con atención desde el Instituto Patria. Por primera vez en décadas, el kirchnerismo se enfrenta a la posibilidad de perder su hegemonía en la provincia.

¿Cuál será la estrategia para retener el poder? Presentaron tres fórmulas. Una está encabezada por el intendente de Río Gallegos, Pablo Grasso, junto al sindicalista minero Javier Castro, con fuerte predicamento en ese sector productivo; otra está liderada por Javier Belloni, intendente de El Calafate, junto a Fernando Cotillo, su par de Caleta Olivia, y cuenta con dos refuerzos bien dispares en la lista a diputados: la actual diputada provincial Rocío García, fuerte figura de La Cámpora local, y el exgobernador Daniel Peralta, referente del peronismo ortodoxo y flamante interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT); en tanto que la tercera fórmula está integrada por los comerciantes Guillermo Polke y Miriam Giorgia.

Por su parte, los partidos de izquierda confluyeron en un mismo frente y acordaron que la fórmula para gobernador y vice la integrarán Juan Valentín y Luis Díaz. El histórico dirigente local del PO, Miguel Del Plá, cuyo nombre se habría promovido para la candidatura a gobernador, finalmente será candidato a senador nacional.

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