El Frente de Izquierda cerró su campaña con críticas al Gobierno y también a la oposición
Rechazó un eventual acuerdo “de ajuste” con el Fondo Monetario Internacional; de repetir su performance de septiembre conservaría las bancas que pone en juego y sumaría otras dos
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Con críticas al Gobierno y también a la oposición “de derecha”, el Frente de Izquierda-Unidad (FIT) cerró esta noche su campaña de cara a las elecciones legislativas del domingo con un acto frente a las escalinatas del Congreso. Sobre el escenario, al que subieron representantes de los cuatro partidos aliados, los principales dirigentes del espacio hicieron hincapié en la necesidad de consolidar el caudal de votos logrado en las PASO y en el rechazo a un eventual acuerdo “de ajuste” con el Fondo Monetario Internacional.
El primero en tomar la palabra fue el candidato a legislador porteño Gabriel Solano. El referente del Partido Obrero (PO) comenzó su discurso refiriéndose al fallo judicial que condenó a los militantes de izquierda César Arakaki y Daniel Ruiz por intimación pública y atentado contra la autoridad agravada por los incidentes de 2017 frente al Congreso, durante el debate de la reforma previsional. “No hay ningún funcionario del Gobierno que haya dicho algo para repudiar este fallo nefasto”, señaló.
“Se habla de devaluaciones, de un crecimiento mayor de la inflación. Ellos saben lo que pasó en diciembre del 2017, saben que vamos a estar en la calle para enfrentar los atropellos que cualquier gobierno de derecha prepare para nuestro pueblo”, agregó Solano, mientras la militancia vitoreaba, al ritmo de Matador de Los Fabulosos Cadillacs: “Que la crisis no la pague el pueblo trabajador, ¡que la pague el patrón, que la pague el patrón!”.
Es que el resultado de las PASO envalentonó a los dirigentes del FIT-U. Con más de un millón de votos y guarismos que, en algunas provincias, duplicaron los de las primarias de 2017, el principal espacio de izquierda del país aspira a ampliar su representación en el Congreso a partir de diciembre: de repetir su performance, no solo conservaría las bancas que pone en juego, sino que sumaría dos: una por la ciudad de Buenos Aires, donde obtuvo el 6,2%, y otra por Jujuy, provincia en la que alcanzó un histórico 23,3%.
A su turno, la candidata a diputada nacional Myriam Bregman arengó a los presentes con palabras que hicieron referencia a las contradicciones discursivas del kirchnerismo. “Algunos dicen que no da la correlación de fuerzas y que tenemos que resignarnos al destino que nos imponen los poderosos y el FMI. Así estamos, con casi la mitad de la población en situación de pobreza”, indicó la dirigente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) que compite en territorio porteño.
“Se necesita un Frente de Izquierda fuerte para lo que se viene, para dar la batalla al interior de las cámara, pero fundamentalmente para dar la pelea con nuestro pueblo en las calles”, sostuvo, por su parte, el candidato a diputado nacional bonaerense, Alejandro Bodart, del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST). En esa línea, el dirigente que secunda a Nicolás Del Caño en la provincia de Buenos Aires criticó el que consideró un doble discurso por parte de Cristina Kirchner, a quien “últimamente se ha escuchado hablar en contra del FMI”. “Son versos de campaña”, lanzó. “Tanto el oficialismo como la oposición van a levantar las dos manos para votar el acuerdo con el Fondo”.
Durante el acto, no faltaron tampoco las críticas al “supuesto anti-casta” Javier Milei. “De nuevo y rebelde, Milei no tiene nada”, lanzó Celeste Fierro (MST) en directa alusión al líder de La Libertad Avanza, a quien vinculó con el exministro Domingo Felipe Cavallo. “Que quede claro: la rebeldía fue, es y será siempre de izquierda”, remarcó la dirigente que acompaña a Bregman en la boleta de diputados nacionales del FIT-U por la ciudad de Buenos Aires.
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