El doble reto de Juntos por el Cambio: volver a ser competitivos y mantener la unidad pese a las disputas internas
En pleno proceso de reconfiguración de liderazgos, la coalición opositora deberá sortear 17 internas en todo el país; la batalla crucial entre Pro y la UCR se librará en Buenos Aires
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Juntos por el Cambio, la principal coalición opositora, se someterá hoy a un test electoral decisivo en las PASO. En plena etapa de redefinición de liderazgos, el Pro, la UCR y la CC enfrentan un doble desafío. Por un lado, precisan que su oferta vuelva a ser competitiva en las urnas después de la derrota de 2019. Y, a su vez, requieren sortear 17 internas en todo el país sin sufrir fisuras que compliquen las chances de la fuerza de cara a la batalla crucial de noviembre con el kirchnerismo por el control del Congreso.
La conducción de JxC llega a las PASO con la expectativa de exhibir una buena performance del espacio en todo el país, con el fin de mantener “el equilibrio de poder” con el Frente de Todos (FDT) y consolidarse como alternativa de gobierno para 2023. Su foco de atención estará, sobre todo, en Buenos Aires y las ocho provincias donde se eligen senadores.
En la fuerza aspiran a imponerse en sus baluartes -la Capital, Mendoza, Corrientes y Jujuy- y lograr buenos resultados en Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, terruños del PJ. En la provincia, epicentro de la pelea electoral, ansían achicar a un dígito la brecha de quince puntos que sacó el kirchnerismo en 2019. Algunos, incluso, se ilusionan con un “final abierto”. Pasadas las 23, una vez que se conozcan los primeros resultados, la mesa de nacional de JxC se mostrará en un búnker en Palermo para hacer una lectura de los comicios y enviar una señal de unidad.
Sin un conductor definido, la fuerza competirá como alianza en 21 de los 24 distritos del país para estas legislativas. Solo hubo rupturas en La Rioja, Neuquén y San Luis, donde el Pro, la CC y la UCR no irán a las urnas bajo el mismo paraguas.
La coalición utilizará las PASO en la mayoría de los distritos del país -habrá lista de unidad en Corrientes, Jujuy, San Juan y Formosa- para definir sus candidatos a diputados y senadores nacionales para las generales de noviembre, y dirimir sus diferencias internas. En 11 de esas 17 internas, los macristas, radicales o lilitos van mezclados en las boletas.
Las PASO serán un mojón clave para el proyecto presidencial de Horacio Rodríguez Larreta, quien jugó a fondo para imponer su estrategia electoral en la provincia de Buenos Aires y la Capital. Sus retadores de Pro y la UCR, Patricia Bullrich y Gerardo Morales, en la disputa por el liderazgo opositor, o Martín Lousteau, aliado del alcalde, también medirán fuerzas sin figurar en las boletas. En una posición expectante también aparece Macri, quien optó por correrse de las internas por el armado electoral, pero puso fichas por sus alfiles en Córdoba y en Santa Fe.
Internas
Buenos Aires será un escenario crucial para JxC. Allí, se enfrentan Diego Santilli (Es Juntos), el candidato de Larreta, y Facundo Manes (Dar el Paso), la gran apuesta de la UCR en su pelea con el Pro por la conducción de JxC.
Tras la decisión de María Eugenia Vidal de volver a la Capital, Larreta logró aglutinar a los intendentes del macrismo, a Elisa Carrió (CC), a Graciela Ocaña (Confianza Pública) y Miguel Ángel Pichetto detrás de la postulación del exvicejefe porteño. Para su primera aventura política, Manes sumó el respaldo de las distintas vertientes del radicalismo –desde Morales hasta Lousteau- e incorporó a referentes del peronismo, como Emilio Monzó, Joaquín de la Torre, y del progresismo, como Margarita Stolbizer. La batalla entre Santilli y Manes es la interna más atrayente de JxC. Después de una campaña cargada de tensión, el Pro y la UCR buscaron aquietar las aguas y acordaron exhibir cohesión interna. Por eso, ambos candidatos se mostrarán juntos en un búnker en La Plata una vez que se conozcan los resultados.
Después de una campaña cargada de tensión, Pro y la UCR buscaron aquietar las aguas. Por eso, ambos candidatos se mostrarán juntos en un búnker en La Plata una vez que se conozcan los resultados.
Tanto para Larreta como para la UCR será clave la diferencia porcentual entre Santilli y Manes. No solo por el eventual ensamblaje de las listas -hay tres escenarios posibles- sino por la señal de liderazgo que arrojará el resultado de cara a 2023. En Pro son cautos, pero confían en que Santilli se impondrá con comodidad. En la cúpula de la UCR aspiran a que el médico supere los dos dígitos en su debut.
Otro distrito clave será la Capital. Tras su vuelta al bastión de Pro y el pacto de Larreta con Bullrich, Vidal enfrenta el reto de conservar al núcleo duro del macrismo y evitar una fuga de votos al liberal Javier Milei. La exgobernadora se medirá en la interna porteña de JxC con Ricardo López Murphy (Republicanos Unidos), flamante incorporación de Larreta para contener a los más extremistas de Pro, y Adolfo Rubinstein (Adelante Ciudad). En el larretismo aspiran a que la alianza saque 40 puntos y Vidal supere el 30%. Otras internas atrayentes del espacio se librarán en Córdoba y en Santa Fe.
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