El bróker amigo de Alberto Fernández, un famoso automovilista y el flujo de miles de dólares oficiales al exterior
Héctor Martínez Sosa, el intermediario de seguros investigado por sus negocios en el Estado durante el gobierno de Alberto Fernández, fue sponsor de un corredor de Indycar
- 6 minutos de lectura'
Las decenas de millones en comisiones a partir de la intermediación de seguros en el Estado le aportaron la liquidez financiera necesaria al productor de seguros Héctor Martínez Sosa, amigo de Alberto Fernández y esposo de su secretaria de 30 años, para darse varios gustos. Uno de ellos, llegar a ser uno de los auspiciantes de un auto del IndyCar, la principal categoría de autos de Estados Unidos y una de las más televisadas del planeta. El logo de su aseguradora fue estampado en los laterales del auto negro y verde del corredor argentino que disputó 14 carreras de la temporada pasada, Agustín Canapino. De hecho, en el evento más importante de la categoría, las 500 millas de Indianápolis, el deportista participó con un auto con los colores de la bandera argentina y el logo de Martínez Sosa. Era uno de los más visibles del vehículo en la mítica carrera, donde los auspicios cotizan en miles de dólares.
Canapino dejó la Argentina el año pasado para dedicarse al automovilismo en Estados Unidos. Firmó un acuerdo con el equipo de otro compatriota y expiloto, Ricardo Juncos, que junto con un socio fundaron Juncos Hollinger Racing.
Según fuentes conocedoras del acuerdo entre ambas partes, el contrato era escaso para Canapino y, por ello, se le otorgaron además dos lugares para publicidad propia en su ropa y vehículo, a fin de que pueda utilizarlos para financiar su vida en Estados Unidos. Canapino le cedió uno de esos lugares a Martínez Sosa y el otro al Grupo Prieto. Es decir que, de acuerdo a lo que pudo saber LA NACION, el equipo Juncos Hollinger no era la que recibía el dinero de estos auspicios.
La relación entre el piloto y el productor de seguros no es reciente. En una conferencia de prensa realizada en 2021, Martínez Sosa dijo conocer a Canapino desde que tenía 19 años (ahora tiene 34) y acompañarlo con su empresa desde hace 13. “Foto con Héctor Martínez Sosa, a quien le estaré toda mi vida agradecido, confiando en mí desde el 2009 y la persona que me ayudó en todo desde que perdí a mi viejo”, publicó en sus redes sociales Canapino, hace dos años.
Martínez Sosa era sponsor, hace más de 10 años, de un equipo de categoría Top Race, llamado Sport Team, quienes contratan a Agustín Canapino cuando era muy joven. Fuentes conocedoras del vínculo explican que la buena relación que construyeron generó que se convierta prácticamente en su manager.
Cuando, en 2019, Canapino salió tercero en Termas de Río Hondo, se dio una anécdota particular. Debido a un problema durante la carrera, después de la entrega de premios, se decidió que una serie de puntos iban para otro corredor, Mariano Altuna, por lo que la copa que había recibido debía ser cedida. El problema surgió cuando Martínez Sosa, que tenía el trofeo en su mano, se negó a devolverlo.
La publicidad en el automovilismo pesa con la sospecha de sobrefacturación para reducir pago de impuestos o bien para blanquear dinero en el exterior, según reconocen conocedores del mercado. Canapino tiene una sociedad constituida en la Argentina que tiene como objeto principal la comercialización de tiempo y espacio publicitario. En enero del año pasado, cuando se mudó a Estados Unidos, tuvo un pico en movimientos crediticios que alcanzaron los $2,5 millones, pero en agosto de 2023 declinaron sustancialmente, por debajo de los $500.000. En octubre y noviembre prácticamente no hubo actividad.
Sanción para Canapino por la maniobra con Altuna. Lo ubican detrás del de Loberia.
— Carburando (@CarburandoTV) June 2, 2019
Así reaccionó Héctor Martínez Sosa al enterarse👇👇 pic.twitter.com/jADBJ3eiNA
Aquella incursión criolla en la categoría de autos de carrera más importante de Estados Unidos fue financiada, enteramente, con dólares argentinos, que se pagaban al cambio oficial. Los auspicios que lubricaron el equipo que, hay que decirlo, tuvo resultados deportivos por encima de lo esperado, fueron todos cercanos al poder kirchnerista.
En mayo del año pasado, mientras la Argentina negociaba dólar por dólar con el Fondo Monetario Internacional, se conoció otro de los aportes que llegaban al equipo del piloto. “Visit Argentina”, una marca desarrollada por la entonces Secretaría de Turismo, aparecía siempre estampada en el buzo del piloto así como también en el auto negro y verde. LA NACION pudo confirmar que no solamente invirtió en la publicidad de Canapino, sino también a otros pilotos de Juncos Hollinger, como Callum Illot, de origen inglés.
El pago se hizo público mediante la decisión administrativa 356, del 2 de mayo del año pasado y que lleva la firma del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, y del ministro de Economía, Sergio Massa.
“Es menester modificar el presupuesto del Instituto Nacional de Promoción Turística (Improtur), ente del Sector Público Nacional actuante en el ámbito del Ministerio de Turismo y Deportes, incrementando los gastos corrientes en compensación con las aplicaciones financieras para la atención de acciones promocionales correspondientes al Campeonato de Indy Car 2023, el que se desarrolla en Estados Unidos de América , y al Convenio de Cooperación Técnico Financiero para la realización del Gran Premio de la República Argentina de MOTO GP [que se desarrolló en Santiago del Estero]”, se leía en uno de los considerandos de la norma que se conoció a través del Boletín Oficial.
“El monto de las acciones de promoción es de US$ 93.750 dólares por carrera. Por el momento se ejecutaron cuatro carreras. La televisación del IndyCar alcanza a 142 países, a través de 32 cadenas televisivas internacionales de África, Medio Oriente, Asia, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Europa, América del Sur, América Central, Caribe y Estados Unidos”, informaron entonces en el ministerio.
La presencia de la marca Visit Argentina “contribuye con el objetivo de reactivar y potenciar el crecimiento del mercado norteamericano, uno de los principales mercados emisores de turistas hacia la Argentina”, justificaron en ese entonces en las oficinas del ministro de Turismo, Matías Lammens.
Cuando salió aquella decisión administrativa con la autorización del pago, el equipo Juncos Hollinger, cuyo titular es el argentino Ricardo Juncos, aún no había recibido ninguno de los pagos. Posteriormente, llegaron varios pero al día de hoy, no se terminaron de cancelar y aún existe una deuda del Estado con los dueños del auto del Indy Car.
Eran épocas de cepo cambiario y enormes restricciones para todo el comercio y la industria para acceder a los dólares. Pero las oficinas de Lammens, ahora dueño de una de las principales fiambrerías gourmet de Buenos Aires, se podía acceder al dólar oficial para auspicios en Estados Unidos.
Nadie conoce si Martínez Sosa usaba ese sistema de compra de dólares a precio oficial, muy por debajo del paralelo o de los que se obtienen en el mercado para sacar dinero al exterior, como el CCL. No son pocos los que especulan que bajo el concepto “publicidad en el exterior”, usaba ese canal de privilegiados para hacerse de la moneda a precio de oferta.
Otras noticias de Actualidad política
- 1
El Colegio de Abogados de la Ciudad repudió la fiesta del fiscal Ramiro González
- 2
La Justicia dispuso el desalojo de la ocupación ilegal en el Parque Nacional Los Alerces
- 3
Escala la pelea en la Corte Suprema: Lorenzetti estalló contra sus colegas, que le respondieron con dureza
- 4
El “desastre” que ve venir parte del peronismo si Cristina Kirchner y Axel Kicillof llevan su enfrentamiento al límite