Dos renuncias en menos de un mes: el último capítulo de la estampida de los albertistas del Gobierno
Las renuncias de Matías Kulfas y Martín Guzmán, en 28 días, comparten el denominador común de las anteriores salidas del Gabinete, que siempre debilitaron las filas del Presidente
- 4 minutos de lectura'
Menos de un mes pasó entre la renuncia de Matías Kulfas a la cartera de Desarrollo Productivo y la de Martín Guzmán a la de Economía. Piezas fundamentales de las filas del presidente Alberto Fernández, Kulfas salió eyectado el sábado 4 de junio, tras la difusión de un supuesto off en el que apuntaba a La Cámpora, y Guzmán dio un paso al costado esta tarde, en medio de las críticas del kirchnerismo y massismo ante la falta de resultados de su gestión. Ambos, además, estaban desde el comienzo de su administración. “Él tiene la lapicera, ella tiene el poder”, resumió una importante fuente del Ejecutivo, de entrada habitual a la Casa Rosada para graficar la resolución de ambos tras la avanzada de Cristina Kirchner sobre ellos.
Junto a Guzmán dimitió el secretario Raúl Rigo. Sergio Chodos, director por el Cono Sur ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Guillermo Hang, de Comercio Interior, segurían esos mismos pasos. También confirmó su alejamiento Rodrigo Ruete, subsecretario de relaciones Institucionales en el Ministerio de Economía.
Guzmán y Kulfas, además, formaban parte del denominado “gabinete económico”, que durante buena parte de 2020 y 2021 se reunía semanalmente en Casa Rosada, pero que tras la crisis de septiembre del año pasado, en las horas posteriores a la derrota oficial en las PASO, dejó de hacerlo. Entonces quien salió eyectado de su cargo fue uno de los principales promotores de esos encuentros, el por entonces jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, otro de los blancos de críticas del ala dura del Gobierno y hombre de extrema confianza de Fernández. En esos días también debió presentar su renuncia Juan Pablo Biondi, vocero y amigo del mandatario, tras ser señalado por Kirchner en una carta, de las que la caracterizaron hasta comienzos de este año. Mientras que Cafiero recaló en Cancillería, Biondi quedó fuera del Gobierno.
“Ella (por Kirchner) le echó a Cafiero, Biondi, Kulfas, Bielsa, Losardo, Frederic, Guzmán”, enumeró una de las voces consultadas por LA NACION. En referencia también a las salidas de María Eugenia Bielsa, Sabina Frederic y Marcela Losardo, de los Ministerios de Hábitat, Seguridad y Justicia, respectivamente. “Hasta ahora todas las renuncias salieron de las filas de Alberto, del lado de Cristina solo se fue (el secretario de Comercio, Roberto) Feletti a los efectos de que la terminen de “chocar” toda ellos solos”, completó otro de los consultados.
Guzmán y Kulfas, además, formaban parte del denominado “gabinete económico”, que durante buena parte de 2020 y 2021 se reunía semanalmente en Casa Rosada, pero que tras la crisis de septiembre del año pasado, en las horas posteriores a la derrota oficial en las PASO, dejó de hacerlo
En esa línea enmarcan las “avanzadas” de la vicepresidenta: “pasó de “los funcionarios que no funcionan -en diciembre de 2020, cuando lanzó las primeras advertencias- a las cartas -durante la última parte de 2021 y comienzos de 2022- y de ahí a los discursos a cielo abierto”, graficó un peronista “paladar negro”. “En el momento que Alberto aceptó la renuncia de Kulfas firmó su propia entrega y la suerte de Guzmán estaba escrita”, alegó otro en referencia a que Kulfas era una de los pocos “albertistas” que aún defendía al presidente en público y privado. Y que incluso lo consideraba capaz de ser “competitivo” en las próximas presidenciales. “Matías defendía a Alberto hasta en asados con amigos, en entrevistas, en off, no tenía problema, fue un leal aún cuando Alberto ni loco soñaba con ser presidente y le soltó la mano. Se pensó que entregándolo se estaba salvando, pero ella le demostró que no, y que no iba a terminar ahí”. Es en esa línea que enmarcan la flamante salida de Guzmán.
“Cristina y La Cámpora venían diciendo que no era un tema de nombres, sino de política económica, Alberto miró para otro lado, se empecinó en no sentarse a hablar y le comieron dos jugadores, ahora no hay margen para más nada. Pateó para adelante y los resultados están a la vista”, agregó otra de las fuentes consultadas que mira con incertidumbre lo que puede pasar en las próximas horas.
“Ella pasó de las cartas a los discursos. Y las cartas ahora son las rápidas renuncias de los ministros, como Kulfas y Guzmán”, sintetizó uno de los consultados, que conoce bien los pasillos del poder y cómo se fue creando la trama que esta tarde comenzó a transitar su desenlace.