El acuerdo con el FMI aún no ingresó en Diputados por la resistencia opositora a un artículo clave

Tres artículos en el proyecto de ley acompañado de dos anexos. Ese es el texto del preacuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) con que el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, recibió a los diputados del oficialismo y de la oposición, con quienes acordó que la discusión de la iniciativa arranque en lo inmediato. Así será: el lunes el ministro de Economía Martín Guzmán y el jefe de Gabinete Juan Manzur, expondrán los detalles del acuerdo y el jueves, a más tardar el viernes próximo, se lo debatirá en el recinto.

Al revisar el texto que les acercó Massa, los representantes de Juntos por el Cambio encendieron sus luces de alarma. Observaron que en el primer artículo -el más importante- el Poder Ejecutivo solicita que se apruebe no sólo la refinanciación de la deuda con el FMI (por un total de 44.500 millones de dólares) sino también sus dos anexos, donde el Gobierno detalla las medidas económicas que se compromete a aplicar para cumplir con la senda de reducción fiscal pactada con el FMI.

Juntos por el Cambio anticipó públicamente su voluntad de autorizar al Gobierno a refinanciar la deuda con el FMI para evitar que el país caiga en default, pero no está dispuesto -menos aún el sector más duro de la coalición opositora- a avalar con su voto el plan económico que diseñó Guzmán para cumplir con las metas, sencillamente porque lo ven poco sostenible. Como argumento formal esgrimen que el papel del Congreso se limita a autorizar o no un nuevo refinanciamiento, no a aprobar o rechazar un plan económico.

Ante el planteo opositor, Massa aclaró que no se trataba del texto definitivo, solo de un preacuerdo, y se comprometió a llevar la inquietud a Guzmán para que se desdoblen los artículos. Aseguró que el texto ingresaría durante la tarde, pero esto no sucedió. Al filo de la medianoche del jueves, el proyecto no había ingresado en la Cámara de Diputados, lo que exacerbó el malestar, sobre todo en el macrismo. La negociación se dificultó a tal punto que el Presidente permanecía en su despacho junto a Guzmán y la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, en contacto con Massa.

Debate exprés

La intención de Massa es llevar la iniciativa al recinto el jueves o viernes próximos para que el Senado pueda cumplir con los tiempos parlamentarios y sancionar el acuerdo antes del 22 de este mes, cuando el país debe afrontar un vencimiento con el FMI por 2800 millones de dólares.

Si bien durante el encuentro con Massa algunas voces opositoras esbozaron sus reparos a que un proyecto tan trascendente sea abordado en un “debate exprés”, lo cierto es que en Juntos por el Cambio son varios los dirigentes que aconsejan ultimar cuanto antes la discusión antes de que sus diferencias internas sobre cómo votar la iniciativa escalen a un nivel sin retorno.

En efecto, a medida que transcurren los días las divergencias entre los socios de la coalición opositora se profundizan. El sector más duro de Pro milita el rechazo al proyecto; otros, en cambio, aconsejan la abstención. Por cuerda separada, la UCR y la Coalición Cívica podrían votar a favor en general y abstenerse en los artículos durante el debate en particular.

Hay un argumento formal con el que Massa justifica el apuro: según explicitó el FMI en su comunicado, el board del organismo recién considerará el acuerdo para su aprobación cuando el Congreso argentino se pronuncie al respecto.

Esta condición, sumado a que el 22 de este mes vence el plazo para afrontar un pago por 2800 millones de dólares al FMI -de lo contrario el país caería en default-, son los argumentos que esgrime el oficialismo para apurar el debate.

Según el cronograma acordado, el tratamiento del proyecto arrancará este lunes, a las 14, en la Comisión de Presupuesto con las presencias de Manzur, del ministro Guzmán y el representante argentino ante el FMI, Sergio Chodos. También asistirá el presidente del Banco Central, Miguel Pesce.

Al día siguiente, en tanto, estarán presentes representantes de la CGT, de la CTA y de los movimientos sociales, como así también representantes del empresariado y del sector bancario.

El día clave será el miércoles: ese día será convocada la Comisión de Presupuesto para emitir dictamen.

De la reunión participaron, además de Massa, el presidente de la Comisión de Presupuesto Carlos Heller, su vicepresidente Luciano Laspina (Pro), y los jefes de los bloques del oficialismo, Germán Martínez, y de Juntos por el Cambio, Cristian Ritondo (PRO), Mario Negri (UCR), Rodrigo De Loredo (Evolución Radical) y Juan Manuel López (Coalición Cívica). También estuvieron presentes los jefes de los interbloques Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez; de Provincias Unidas, Luis Di Giacomo, como así también la vicejefa del bloque oficialista, Cecilia Moreau, la secretaria parlamentaria

Hay un argumento formal con el que Massa justifica el apuro: según explicitó el FMI en su comunicado, el board del organismo recién considerará el acuerdo para su aprobación cuando el Congreso argentino se pronuncie al respecto.

“Se espera que el Directorio Ejecutivo analice la solicitud del programa respaldado por el FMI después de que el Congreso de la Nación Argentina apruebe el programa económico y financiero incorporado en el Memorándum de Políticas Económicas y Financieras y los documentos relacionados que las autoridades compartirán con los legisladores. Esta consideración legislativa es requerida por el derecho interno argentino”, expresó el FMI en su comunicado.

Esta condición, sumado a que el 22 de este mes vence el plazo para afrontar un pago por 2800 millones de dólares al FMI -de lo contrario el país caería en default-, son los argumentos que esgrime el oficialismo para apurar el debate. Desde la oposición, algunas voces de Pro los relativizan.

“El Poder Ejecutivo tiene todas las herramientas para evitar caer en default. Desde dictar un DNU hasta negociar un préstamo puente con el Banco de Basilea para cubrir el próximo vencimiento hasta que el acuerdo esté formalmente aprobado”, indican.

El cronograma

El debate, según el cronograma acordado, arrancará este lunes, a las 14, en la Comisión de Presupuesto con las presencias del jefe de Gabinete, Juan Manzur; el ministro de Economía, Martín Guzmán y el representante argentino ante el FMI, Sergio Chodos. También asistirá el presidente del Banco Central, Miguel Pesce.

Al día siguiente, en tanto, estarán presentes representantes de la CGT, de la CTA y de los movimientos sociales, como así también representantes del empresariado y del sector bancario. El oficialismo también tiene previsto invitar a gobernadores para que brinden su exposición.

El día clave será el miércoles: ese día será convocada la Comisión de Presupuesto para emitir dictamen, indicaron fuentes parlamentarias.

De la reunión participaron, además de Massa, el presidente de la Comisión de Presupuesto Carlos Heller, su vicepresidente Luciano Laspina (Pro), y los jefes de los bloques del oficialismo, Germán Martínez, y de Juntos por el Cambio, Cristian Ritondo (PRO), Mario Negri (UCR), Rodrigo De Loredo (Evolución Radical) y Juan Manuel López (Coalición Cívica). También estuvieron presentes los jefes de los interbloques Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez; de Provincias Unidas, Luis Di Giacomo, como así también la vicejefa del bloque oficialista, Cecilia Moreau, la secretaria parlamentaria de dicho bloque, Paula Penacca, y el radical Ricardo Buryaile.

Durante la reunión, Massa planteó su interés de que el acuerdo se debata en el recinto el jueves o viernes próximos, atento a que el 22 de este mes la Argentina debe efectuar un pago ante el FMI para no caer en default. Desde la oposición plantearon reparos. “El Gobierno se tomó más de dos años para cerrar las negociaciones. Que no nos corran con los tiempos ahora”, advirtió el diputado Rodríguez. En el mismo sentido se expresó el diputado De Loredo, quien formuló el planteo durante el encuentro.

“Acordamos que el proyecto recién se tratará en el recinto cuando se agote el debate en la comisión. Sin tiempos”, explicó Ritondo.

A la Comisión de Presupuesto no serán convocados los exfuncionarios del gobierno de Mauricio Macri que firmaron el acuerdo con el FMI en 2018, por el cual se contrajo la deuda de 44.500 millones de dólares que ahora se procura refinanciar. Había sido una propuesta de Martínez, el jefe de bloque oficialista, pero finalmente se dio marcha atrás ante la renuencia de la oposición.

“Es un tema de competencia de la Comisión Bicameral de Deuda Externa”, indicó el diputado Heller, al finalizar la reunión.

Laspina coincidió. “No está planteada, en esta instancia, una auditoría del acuerdo de 2018. No tiene demasiado sentido discutir hacia atrás cuando ahora debemos abocarnos a discutir un nuevo acuerdo”, sostuvo el diputado de Pro.

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