Diego Santilli vs. Facundo Manes: el Pro y la UCR miden fuerzas para una interna que tensiona a Juntos por el Cambio

Resuelta la disputa en Pro por las candidaturas en la ciudad y la provincia de Buenos Aires, la eventual interna entre Diego Santilli, el postulante que impulsa Horacio Rodríguez Larreta y el médico Facundo Manes, la carta que puso la UCR en el terruño bonaerense tras la despediad de María Eugenia Vidal, se convirtió en el principal foco de tensión en JxC.

Mientras varios referentes de la coalición opositora intentan acercar posiciones para desactivar el eventual enfrentamiento entre el Pro y la UCR, Santilli y Manes se preparan para la batalla. Hiperactivos y entusiasmados con el desafío, el neurólogo se dedicó las últimas semanas a “ordenar” su vida personal y profesional para dar el salto a la política.

Quienes hablan con el médico lo notan envalentonado con su nuevo reto. Se terminó de convencer en que debía aceptar la propuesta cuando percibió que los popes del radicalismo estaban dispuestos a disputarle el liderazgo de Juntos por el Cambio a Pro. “Facundo es un tren. Cuando arranca, no para”, comentan cerca de Manes. El neurocientífico tiene profundas diferencias con el macrismo. Y piensa exteriorizarlas durante la campaña y la pelea con Santilli por la cabeza de la lista de la fuerza.

Es más, sus críticas a la gestión de Cambiemos fue uno de los motivos, cuentan en su entorno, que lo llevaron a declinar en 2017 la posibilidad de subirse a la boleta de Vidal. Manes no quería que Marcos Peña o Jaime Durán Barba lo coachearan con sus recetas de “marketing” electoral y que le impidieran, por ejemplo, cuestionar los recortes de fondos impulsados por el macrismo en el área de ciencia. Por esa razón, quienes lo ven prepararse para la contienda con Santilli, descartan la posibilidad de que Manes acepte descender al tercer casillero de la nómina para lograr una lista única. Tampoco, avisan, aceptaría ser el candidato del consenso.

“No la veo. ¿Cómo le decimos a Facundo ahora que no hay una PASO con el Pro?”, reconoce uno de interlocutores en la UCR. Tras su lanzamiento con un video casero, Manes se alista para sacudir el tablero de Juntos por el Cambio: “Su objetivo es reconfigurar a la coalición”. Un plan ambicioso para su debut como candidato.

En la cúpula del partido centenario se imaginan una interna “competitiva” entre el médico y Santilli, el vice de Larreta, quien camina dos horas por día los distritos más poblados del conurbano bonaerense.

En el radicalismo se entusiasman con los primeros números que recibieron de las encuestadoras más cercanas. “Facundo está en 17,3 y Santilli, 13,4,”, apunta uno de los armadores del partido. La UCR controla 33 municipios -alrededor de un millón de habitantes-, mientras que el Pro gobierna en 19 intendencias-unas 3 millones de personas-. En el vidalismo se aferran a ese número para argumentar que el Pro tiene más votos que la UCR en la porción del electorado que respalda a Juntos por el Cambio. Santilli no se confía, pese a que los números lo acompañan: según las encuestas que miran en Uspallata, el “colo” le saca más de diez puntos a Manes en el conurbano. En el interior la diferencia se reduce a un punto.

Manes, quien ya contrató a una consultora, confía en su carisma para sortear, a priori, su principal déficit como candidato en el terruño bonaerense: su bajo nivel de conocimiento en el conurbano. Sus laderos creen que Manes logrará instalarse con facilidad cuando tome temperatura la campaña. Además, en la UCR se jactan de haber sumado a su pelotón a Joaquín de la Torre, Emilio Monzó y Margarita Stolbizer. Y siguen conversando con el senador nacional Esteban Bullrich (Pro), otro herido por la jugada de Larreta. “Estamos hablando con Manes”, repiten cerca del exministro de Eduación. En Uspallata dan por descontado que lograrán convencer a Bullrich de que apoye a

“Es un partido chivo y con final abierto. Ellos tienen una boleta competitiva y nosotros más músculo territorial, sobre todo en el conurbano”

Con el respaldo del aparato de Pro, Elisa Carrió (CC), Miguel Ángel Pichetto y Graciela Ocaña (Confianza Pública), quien lo secundaría en la lista, Santilli ultima los detalles para su lanzamiento. Pese a la presión interna, Larreta no está dispuesto a ceder el primer lugar para lograr una lista de unidad. Su actitud le genera reproches internos en Pro: “Está demasiado apurado y destruyó todo. Esta interna desordena todo el país”, se lamenta una espada del macrismo. El Pro pondrá en juego ocho diputados nacionales y la UCR, tres. “Pierden aún ganando”, dice un radical.

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