Desde afuera, Moreno continúa controlando el funcionamiento del Indec
Kicillof no pudo nombrar una conducción afín, por el rechazo de operadores del ex secretario de Comercio
LA NACIONMariano Obarrio
La presidenta Cristina Kirchner le pidió la renuncia a Guillermo Moreno hace 45 días. Pero el ex secretario de Comercio Interior sigue controlando el Indec, asesora a su sucesor, Augusto Costa, y tiene una sorda disputa con el ministro de Economía, Axel Kicillof, que no pudo nombrar gente propia en el Indec, donde sigue operando la antigua "patota" de Moreno.
No sólo continúa intacta la intervención del Indec, su directora Ana María Edwin y su director técnico Norberto Itzcovich. También permanecen otros adláteres de Moreno: Ruben Zampino, Damián Comas y José Luis Blanco, entre los más influyentes.
La mayoría responde al sindicato de Unión Personal Civil de la Nación (UPCN), de Andrés Rodríguez, y tienen una feroz pelea con ATE Indec, liderada por Raúl Llaneza.
La persistente injerencia del polémico ex funcionario podría entorpecer el acuerdo que el mismo Gobierno busca anudar con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un nuevo Índice de Precios al Consumidor (IPC). Es un requisito decisivo para gestionar financiamiento externo a tasas razonables para ingresar dólares y pagar la deuda.
La carta constitutiva del FMI exige a sus países socios demostrar estadísticas confiables. Por eso, la Argentina recibió en febrero último una moción de censura.
Así las cosas, el Gobierno deberá presentar en febrero próximo el nuevo IPC-NU (Nacional y Urbano) con los datos relevados en el mes actual. El FMI deberá evaluar entre marzo y junio si aprueba el nuevo índice . Las expectativas de la Casa Rosada son que el Fondo levante la moción de censura, que sigue vigente en sus informes.
Precisamente, la renuncia de Moreno y el último recambio de gabinete buscaban allanar el visto bueno del organismo internacional.
Sin embargo, según confiaron a LA NACION fuentes del Gobierno y del Indec, Cristina Kirchner mantiene su apoyo a las fuerzas de choque morenistas en el Indec. En rigor, Moreno fue designado agregado económico en la embajada argentina en Italia. Pero aún no viajó y no quiere asumir ese cargo.
De todos modos, si Cristina lo dispone, lo hará. De una u otra manera, controla el Indec por teléfono. También Beatriz Paglieri, morenista, ex secretaria de Comercio Exterior y actual subdirectora de la Aduana, gravita aún en el Indec.
En ese contexto, Kicillof no pudo siquiera hacer pie en el organismo pese a que está bajo su jurisdicción. Desde que asumió el 20 de noviembre último, el ministro de Economía se propuso colocar gente propia en reemplazo de Edwin e Itzcovich. Pero todavía no pudo hacerlo.
"Esta conducción tiene el aval todavía de la Presidenta", dijo un funcionario del Indec a LA NACION.
También es cierto que Kicillof resistió el nombramiento de aquellos funcionarios morenistas de segunda línea en la planta permanente, pese a las presiones del ex secretario de Comercio Interior.
Moreno también mantiene influencia sobre su sucesor, el secretario de Comercio, Augusto Costa. Entre ellos son muy amigos. La nueva lista de precios "cuidados" de 200 productos que Costa presentó el viernes último fue realizada en gran parte por Moreno.
El nuevo IPC NU no incluirá la Canasta Básica Total ni la Canasta Básica Alimentaria. Por eso existen dudas sobre su veracidad. "Puede tener la mejor metodología y recomendaciones del FMI, pero si hay manipulación y siguen la intervención y la patota, las estadísticas no son confiables", dijo a LA NACION Raúl Llaneza, delegado gremial de ATE Indec.
El dirigente aseguró que Kicillof se había comprometido a recibir a la junta interna de ATE-CTA antes de Navidad. Pero por presión de los hombres de Moreno eso no ocurrió. "Debe haber racionalidad en el trato empleado-empleador y no siempre discriminación en favor de UPCN", dijo Llaneza.
En el Indec existe la sospecha de que Moreno opera desde una oficina cercana y en la que siempre está presente Zampino, director suplente de Papel Prensa, nombrado por Moreno, pero que se deja ver en el Indec. Ese es el clima que se respira en el organismo antes de la negociación final con el FMI.
Ese acuerdo con el Fondo integra, en rigor, un conjunto más amplio de objetivos externos del Gobierno: los acuerdos por el pago de deudas a empresas que demandaron al país en el Ciadi, a Repsol, al Club de Paris y a los fondos buitre.
Todos esos enunciados apuntan a obtener financiamiento internacional en la nueva etapa. Pero la política resulta contradictoria con el objetivo: el grupo de Zampino, Comas, Blanco e Itzcovich, dicen en el Indec, continúa con la premisa de presionar e intimidar a empleados por criticar el modelo o por no afiliarse a UPCN. Hace semanas, Comas, secretario gremial de UPCN-Indec, increpó a Llaneza.
Otros operadores de Moreno en el Indec son Fernando Scigliano, Aníbal Neveleff, Hernán Brahim, Rafael Figueredo, Bárbara Arispe, Gladys Carolina Matías, María Julia Cartolano, entre otros.
Por Mariano Obarrio
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