Cuándo se trata la ley ómnibus en el Senado
Tras la aprobación general en Diputados, continúa el debate particular por cada artículo; se estima que en los próximos días pase a la Cámara alta
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LA NACION
La ley ómnibus, aprobada por la Cámara de Diputados en sus principios generales, por 144 votos a favor y 109 en contra, sigue siendo debatida en el Congreso y es posible que recién pase a las sesiones en el Senado luego de varios días de análisis.
Desde fines de enero, y dentro del período de sesiones extraordinarias, los legisladores debaten la iniciativa presentada por Javier Milei, que tuvo varias modificaciones respecto de su redacción original, pedida en su mayoría por las fuerzas políticas opositoras que mantienen diálogo con el oficialismo y solicitaron cambios.
Hasta el momento, los puntos clave a destrabar por el oficialismo tienen que ver con los artículos referidos a las facultades delegadas, la deuda externa, el Fondo de Garantía de Sustentabilidad y la privatización de empresas públicas. Estas cuestiones generaron rechazo, incluso en los bloques que prestaron su apoyo de manera general al megaproyecto.
En el caso de que el oficialismo pueda negociar y alcanzar acuerdos en estos tópicos con las diferentes fuerzas políticas de la oposición, la propuesta pasará a ser debatida en la Cámara de Senadores. Por la naturaleza y conflictividad de los artículos en pugna, se espera que el debate sea extenso e intrincado, por los que recién después de destrabarse esta instancia, el texto desembocará en la Cámara alta.
Algunos legisladores consideraron que el trámite artículo por artículo “va a ser largo” y “puede extenderse tranquilamente al miércoles y al jueves también”, ya que se tratará de un extenso debate que demandaría otras tres jornadas de discusión, como las que se necesitaron para sancionar el dictamen en general. En este sentido, se cree que en caso de aprobarse, el proyecto se trataría en el Senado a partir de la semana que viene, luego del feriado extralargo por Carnaval. Por otro lado, una de las claves es que el proyecto salga de Diputados con el suficiente consenso en su articulado para que el texto se discuta en el Senado a libro cerrado.
Qué pasará en el Senado con la ley ómnibus
La vicepresidenta Victoria Villarruel será la encargada de comandar las sesiones en la Cámara alta, una vez que el proyecto de ley obtenga la media sanción en Diputados y que eventualmente la propuesta llegue al recinto para ser tratada por los senadores nacionales.
Entre fines de enero y los primeros días de febrero, Villarruel se reunió con los referentes radicales y de otros bloques opositores para delinear y recepcionar los pedidos de los senadores, de cara a un futuro tratamiento de la propuesta en los próximos días, dado el apremio del Poder Ejecutivo por conseguir a la brevedad la aprobación de la iniciativa.
En Diputados el texto inicial sufrió modificaciones solicitadas por los bloques dialoguistas, por lo que el dictamen de mayoría que se discute tiene como ejes centrales la declaración de emergencia pública en seis materias, una amplia reforma del Estado y la privatización total de 36 empresas públicas y otras tres en forma parcial.
Cualquier modificación en el Senado obligaría al regreso del texto en segunda revisión a Diputados, lo que dilataría más los tiempos para la administración de Javier Milei.
Las principales modificaciones de la ley ómnibus
Una de las mayores modificaciones que se hicieron a la ley ómnibus es la eliminación de todo el capítulo fiscal. Así lo informó el ministro de Economía, Luis Caputo, en una conferencia de prensa desde la sede de Hacienda. “Lo que no queremos es que por este capítulo fiscal se demore algo que consideramos necesario y urgente”, dijo. De esta forma, no están en el nuevo escrito los ítems referidos a los artículos sobre la actualización jubilatoria, las retenciones agropecuarias e industriales, el blanqueo, la moratoria y el adelanto de Bienes Personales. También se retiró el proyecto que contenía las nuevas escalas del impuesto a las Ganancias, que era requerido por los gobernadores.
Otro de los aspectos en los que se dio marcha atrás fue con el cambio de la fórmula de movilidad jubilatoria y pensiones, la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Asignación por Embarazo. Proponía suspender la fórmula vigente (ajustada por la evolución de la inflación y la recaudación), para habilitar ajustes discrecionales a cargo del Ejecutivo.
También se eliminó la emergencia social y de defensa de los 11 artículos iniciales. El plazo de la delegación legislativa sería de un año, con la posibilidad de que el Congreso pueda extenderlo otro año más. Pero se mantiene la emergencia en materia económica, financiera, fiscal, previsional, de seguridad, de salud, energética, administrativa y tarifaria.
Además, se cambió el alcance de la privatización de las empresas estatales que plantea la iniciativa. Si bien todavía figuran decenas de sociedades estatales, entre las que están los ferrocarriles, Aerolíneas Argentinas, Fabricaciones Militares y la Agencia Télam, entre muchas otras, se eliminó a YPF del listado y se contempla una privatización parcial para Nucleoeléctrica, Banco Nación y ARSAT.
El Gobierno también planteó debatir las reformas electorales del proyecto en sesiones ordinarias. Este apartado, que planteaba la eliminación de las PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias), la actualización del aporte de legisladores de cada provincia a la Cámara de Diputados y el pase a un sistema de representación uninominal.
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