La Argentina y Rusia fortalecieron su relación militar: entrenamiento para oficiales en Moscú y venta de aviones
El gobierno de Vladimir Putin ofreció aeronaves para el equipamiento de las Fuerzas Armadas; también, instalar un centro de mantenimiento y capacitar a pilotos y buzos tácticos
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Con las tensiones entre Rusia y Ucrania en su máxima escala, el gobierno argentino fortaleció el acercamiento con Moscú en materia militar en los últimos dos años. Ello se traduce en negociaciones frecuentes por la compra de unidades para el equipamiento de las Fuerzas Armadas y en un acuerdo para que los oficiales y suboficiales argentinos puedan capacitarse en centros de formación de excelencia en la Federación Rusa.
Este convenio sienta las bases para que los militares argentinos puedan realizar entrenamiento de vuelos para pilotos, cursos de buzos tácticos y adiestramiento de tiro, entre otras opciones de formación, incluido el aprendizaje del idioma ruso. Fue firmado en diciembre pasado por el ministro de Defensa, Jorge Taiana, luego de la visita que el secretario de Asuntos Internacionales para la Defensa, Francisco Cafiero (primo del canciller Santiago Cafiero) realizó a Moscú. Allí fue recibido por el viceministro para la Cooperación Militar Internacional de Rusia, Alezander Fomin, de fuerte protagonismo hoy en el conflicto con Ucrania.
En la misma semana en que se firmó el acuerdo de formación militar, que incluye una “capacitación doctrinaria y operativa”, el presidente Alberto Fernández recibió en la Casa Rosada una delegación de 32 empresarios rusos.
Intercambios similares se realizan con escuelas de guerra e instituciones militares de otros países, como Estados Unidos –mediante el programa IMET-, China, Italia, Alemania, España, Francia y Brasil, entre otros. La delantera la lleva el país del norte: 174 militares eligieron capacitarse en Estados Unidos durante 2021.
En el caso de China existe intercambios de alumnos en la Universidad de la Defensa, en Beijing, y en la Escuela de Guerra, en Nanjing, hay participación de oficiales superiores y de funcionarios del área de defensa en seminarios, además de visitas a centros especializados y ferias internacionales.
“Incluir a Rusia en el actual contexto internacional constituye una señal de posicionamiento”, interpretó, no obstante, una fuente militar. En esa línea se lee la decisión de reabrir la Agregaduría de Defensa en Cuba, que había sido cerrada durante el gobierno de Mauricio Macri.
Compra de aviones
El mes pasado, Taiana recibió el segundo de los doce aviones Beechcraft TC-12B Huron, comprados a Estados Unidos, en momentos en que el gobierno de Alberto Fernández aspira a cerrar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Existe, por otro lado, un ofrecimiento del gobierno de Vladimir Putin para la compra de 12 aviones caza MIG-35 que serían destinados a la Fuerza Aérea, en una propuesta que también incluye la instalación en la Argentina de un centro para garantizar el mantenimiento de la aeronave y el entrenamiento de los pilotos.
El equipamiento de las aeronaves no es un tema desdeñable. Rusia ofrece añadir un armamento antiaéreo similar al que usan las Fuerzas Armadas de Venezuela, considerados de alta calidad por fuentes militares. La oferta de los MIG-35, de todos modos, compite con propuestas de otros países, como los JF-17 que China fabrica en Paquistán y los F-16 de Dinamarca, que recibió el ministro Taiana.
La relación entre ambos países en materia militar también se refleja en el acuerdo para el mantenimiento de los dos helicópteros MI 171 de la Fuerza Aérea. Adquiridos a Rusia en 2010, son multipropósitos y de largo alcance y se utilizan en las campañas de abastecimiento a las bases antárticas y en operaciones de búsqueda y rescate. El gobierno de Putin transmitió una propuesta para vender otras dos unidades a la Argentina.
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