Pablo Biró desafía a Alberto Fernández tras haber sido corrido del rearmado sindical
Es probable que Pablo Biró, el jefe del gremio de los pilotos de APLA, mantenga mañana firme su decisión de paralizar los vuelos de Aerolíneas Argentinas durante el fin de semana en reclamo de un aumento salarial. Asistirá a la audiencia conciliatoria en la Secretaría de Trabajo, aunque su mera presencia no significa un acatamiento de la tregua, una carta que el jefe del área, Lucas Fernández Aparicio, está dispuesto a jugar.
Al margen de su disputa con la aerolínea estatal y con la gestión aerocomercial macrista, Biró envió un mensaje duro hacia adentro del peronismo. Desoyó el pedido de Alberto Fernández de revisar la medida casi en simultáneo cuando el movimiento obrero, casi en pleno, explora una unidad que hasta podría reunir bajo un mismo techo a la CGT y a la CTA.
"No solo vamos a tomar medidas sino que se van a ir profundizando porque es un conflicto que el Gobierno utiliza electoralmente. Me parece muy bien que Alberto pida que no las haya, pero nosotros estamos hace once meses con los salarios congelados", desafió Biró. Un dato: los pilotos y Aerolíneas Argentinas sellaron el año pasado una paritaria casi inédita, con cláusula de ajuste automático por inflación, lo que les garantizó no perder contra la suba de precios durante el período agosto 2017 a septiembre de 2018. Junto con los bancarios, fueron el único gremio que salió indemne de la devaluación de aquel año.
Biró y las autoridades de la Secretaría de Trabajo explorarán mañana una salida al conflicto. Casi en simultáneo, Alberto Fernández estará en Lanús con la cúpula de la CTA que encabeza Hugo Yasky para avanzar en la unificación de la centrales sindicales. Biró tiene buen vínculo con los ceteístas y las diferencias históricas jamás fueron obstáculo para sentarse en la misma mesa.
Los elegidos de Alberto
Sin embargo, el piloto se siente relegado del rearmado sindical que se avecina, donde tallan con más influencia Héctor Daer, Hugo Moyano y Hugo Yasky, los elegidos por Alberto Fernández. Biró no forma parte de "los Gordos" ni del moyanismo. Menos de la CTA. Es una voz de peso en la Corriente Federal, que lidera el bancario Sergio Palazzo.
En el microclima aeronáutico no resulta ajeno a las tensiones la reciente fractura del gremio de pilotos y los procesos electorales en otros sindicatos del sector, como el de la Asociación del Personal Técnico (APTA), que es liderado por Ricardo Cirielli desde hace 27 años y cuyo reinado está en peligro por una alianza opositora fogoneada por el moyanismo.
Desafiado por los pilotos de Latam, Biró convocó hace dos semanas a una asamblea de APLA para determinar medidas de protestas. Pero el resultado no fue el esperado: fue rechazada una de las mociones puestas en debate para expulsar del gremio a los tres pilotos de Latam que habían participado del primer vuelo interchange a Miami, que habilita la utilización de aviones con matrícula extranjera pero que utilicen mantenimiento y tripulación argentina. Biró les apuntó a sus colegas por querer formar un "sindicato amarillo" (por empresa), algo que ya se dio en algunas low-cost bendecidas por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich.
El mayor tiempo que se dilate el expediente para la creación del sindicato exclusivo de Latam, que ya fue presentado en la Secretaría de Trabajo, será mejor para Biró. El gremialista aspira a que un eventual gobierno de Alberto Fernández frene el intento de los díscolos con el argumento de que su intención rompe con el modelo sindical vigente, en el que prima la afiliación de trabajadores por actividad y no por empresa.
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