Coronavirus: la Ciudad de Buenos Aires evalúa un confinamiento “total” durante los fines de semana y mantiene las clases presenciales en inicial y primaria
En el gobierno porteño estudian nuevas medidas restrictivas por la suba de casos; podría reducirse el horario de los comercios y se restringirán actividades al aire libre
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El gobierno de Horacio Rodríguez Larreta avanza con la idea de implementar un confinamiento “total” durante los fines de semana para contener la suba de casos de coronavirus registrada durante los últimos días, según confirmaron fuentes porteñas a LA NACION. La presencialidad escolar seguiría garantizada para los niveles inicial y primario, aunque podría ser virtual, en su totalidad, en la secundaria, que hoy tiene un sistema “bimodal”.
Durante las últimas horas creció la preocupación en la cúpula del Ejecutivo porteño por el aumento de contagios de Covid-19 en el distrito. “Vemos que se adelantó la ‘tercera o cuarta’ ola y los próximos quince días van a ser muy tensos”, reconocen en la Ciudad.
Por ese motivo, el gobierno de Larreta tiene bajo estudio una serie de medidas restrictivas adicionales para intentar achatar la curva de casos a partir de pasado mañana, cuando caduque el decreto de necesidad y urgencia (DNU) que firmó Alberto Fernández el 30 de abril pasado. Una de las opciones que está sobre la mesa es aplicar un “cierre total” de comercios durante los fines de semana, con el objetivo de reducir la circulación y limitar los encuentros sociales.
En el esquema que imaginan, solo quedarían abiertos los negocios esenciales (alimentación y farmacias, principalmente). Por lo tanto, los locales de gastronomía funcionarían únicamente bajo la modalidad de delivery o take away. Y solo podrían circular los trabajadores esenciales.
Como parte de la batería de medidas, el gobierno porteño analiza la posibilidad de que los comercios no esenciales solo puedan atender al aire libre de lunes a viernes, a partir de las 11 y hasta las 19 (hoy es hasta las 20). De esa forma apuntan a reducir la circulación en el horario de ingreso de los alumnos a las escuelas. También estudian el eventual cierre de los patios de juegos infantiles y la prohibición de deportes de conjunto.
En la sede de Parque Patricios consideran que las reuniones sociales son el principal foco de contagio. “Estamos viendo cómo podemos generar un cambio de conducta y desalentar esos encuentros”, comenta una fuente porteña.
En ese sentido, fuentes oficiales anticiparon a este medio que Larreta planea realizar operativos de control, con personal de la Ciudad, durante los fines de semana para evitar las aglomeraciones y persuadir a los ciudadanos para que respeten el distanciamiento social y las medidas preventivas, como el uso del barbijo, en los lugares públicos.
Clases presenciales
Respecto de las clases, el gobierno de Larreta podría “fortalecer” el sistema bimodal (un esquema mixto entre clases presenciales y virtuales) que se implementa en el secundario. No se descarta que ese nivel pase a virtual. “Por ahora no queremos tocar el inicial y primaria. El nivel de contagio sigue siendo bajo en los colegios”, argumentan.
Durante la tarde, tomó fuerza la idea de que se mantendrá la presencialidad en los niveles maternal, inicial, primaria y especial. La educación para “adultos, institutos terciarios y centros de formación profesional” seguirá a distancia.
Los encuentros sociales en casas particulares seguirán prohibidos, pero en la Ciudad planean pedir asistencia a los encargados de edificios para que colaboren con el cumplimiento de esa restricción.
Reforzar restricciones, con la mira en las vacunas
En el gabinete porteño creen que las próximas dos semanas serán muy “tensas” y que el sistema de salud seguirá “muy exigido”. “Siempre dijimos que tomamos las decisiones basados en datos. Si es necesario reforzar las restricciones, lo vamos a hacer”, argumentan. Ayer se registraron 3060 casos en la Ciudad y 34 muertos.
En la administración de Larreta consideran que es el momento para reforzar las medidas restrictivas, ya que observan que la media de contagios es alta y, además, esperan avanzar durante los próximos quince días con el plan de vacunación. Ayer, la Nación les envió un nuevo lote de la Sputnik V y se prevé que llegarán a la administración porteña 300 mil dosis de Astrazeneca entre pasado mañana y el lunes próximo. “Vamos a poner a tope nuestro sistema de vacunación, aplicando entre 30 y 35 mil dosis por día. Podríamos llegar a la segunda o tercera semana de junio con el 40% de la población de la Ciudad vacunada”, aventuran en el gabinete de Larreta.
Con ese número, entienden en la Ciudad, empezaría a “aflojar” el aumento de casos. “Por fin, vemos una luz al final del túnel para tener algún nivel de certidumbre”, reconoció un funcionario porteño.
En la Ciudad insisten en que coordinarán las medidas restrictivas con el gobierno nacional y la administración de Axel Kicillof. “Si siegue este aumento, se van a tomar medidas adicionales de manera coordinada con la Nación y provincia”, indicaron los voceros del Ejecutivo porteño.
El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, y Quirós se reunieron con sus pares de la Nación, Santiago Cafiero y Carla Vizzotti, y la provincia, Carlos Bianco y Daniel Gollan, y coincidieron en la necesidad de bajar la circulación en el AMBA ante el incremento de los contagios.
Si bien el presidente Alberto Fernández descartó volver a la Fase 1, la Casa Rosada le pidió a la Ciudad y a la provincia reforzar las medidas de control y bajar al máximo la circulación. “Esto no da para más”, lanzó Cafiero durante el encuentro con Miguel y Quirós.
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