Delia Ferreira Rubio: "La emergencia no es un cheque en blanco"
El coronavirus sorprendió a Delia Ferreira Rubio en Alemania, donde trabaja como presidenta de Transparencia Internacional, la ONG con más influencia en la lucha global anticorrupción. "No está nada mal quedarse varada en Berlín", reconoce la abogada argentina, mientras responde las preguntas que le envió LA NACION y advierte: "La emergencia no es un cheque en blanco".
Ferreira Rubio es optimista con el legado que deja esta crisis sanitaria en materia de transparencia y recuerda que cuando el Ébola fue pandemia los casos de corrupción recién aparecieron muchos meses después de las compras de insumos médicos. "Tenemos una respuesta casi inmediata en casos por corrupción, conflictos de intereses y abuso de recursos públicos en más de 20 países", asegura.
Sobre las reacciones de los gobiernos cuando se conocieron los casos de la compra de alimentos con sobreprecios en Desarrollo Social y la contratación en la Ciudad de una empresa que integra la media hermana del jefe de gobierno, dijo: "Las cosas solo se corrigen cuando el escándalo crece. Y lo primero que escuchamos son excusas".
-¿Se puede pedir transparencia en una pandemia?
-La información y la transparencia siempre son esenciales. El Estado debe cumplir su misión de forma eficiente y sin corrupción. Eficiencia y transparencia no son opuestos. Tal vez sea esta, por fin, la ocasión para terminar con las redes de corrupción público-privada. Si el Estado nos pide a los ciudadanos que controlemos los precios y denunciemos abusos, con más razón debe ser el primero en comprar bien y sin abusos.
-El coronavirus cambió la rutina, pero los casos de corrupción cumplen los mismos patrones?
-Sí, los conflictos de intereses son la ventana de oportunidad para la corrupción: el Estado solo invitó a los amigos y familiares (muchas veces ocultos bajo nombres de fantasía) a ofertar cualquier cosa a cualquier precio y luego justificó porque "se plantaron" y les compró porque hay apuro. Esto está mal ahora y también en tiempos normales. Por suerte el periodismo alertó sobre estos problemas y los gobiernos tomaron medidas.
-¿Cómo evalúa las reacciones de las administraciones involucradas...
-Las cosas solo se corrigen cuando el escándalo crece. Lamentablemente, en la Argentina la transparencia no es una prioridad. Los gobiernos solo dan marcha atrás cuando la corrupción, los conflictos de intereses o el abuso de los recursos públicos son denunciados y descubiertos. Y aun en esos casos lo primero que escuchamos son excusas: "no sabía", "nadie me avisó", "se plantaron", "era urgente".
-¿Qué límites hay que ponerle al Estado en esta situación?
-La emergencia no es un cheque en blanco para decidir cualquier cosa sobre cualquier área de la vida. Las medidas de emergencia deben respetar el Estado de Derecho, las libertades y los derechos básicos. Las restricciones deben ser las necesarias, adecuadas y proporcionales al objetivo; deben ser limitadas en el tiempo, informadas a la ciudadanía y sujetas a control.
-Usted está en Alemania, uno de los países europeos más afectados por esta crisis, pero con un Parlamento que funciona,
-El Congreso debe funcionar. Esto es parte de una disputa política. Si hay permiso para que [Marcelo] Tinelli ande dando vueltas por el país, viajando cuando debía quedarse donde estaba y usando la excusa de que estaba varado para volver a pasear, no veo por qué no puede autorizarse a viajar a los diputados y senadores. Si los supermercados trabajan, debería quedar claro que los congresos son un servicio esencial para la democracia.
-¿Cómo imagina el día después del coronavirus?
-Existe una especie de espiral regulatoria por parte del Estado; hay un afán de regularlo todo y en ese afán se comenten abusos, pero las regulaciones quedan. Se observa también una creciente burocratización. Esto afecta a las actividades económicas, pero también la vida del ciudadano de a pie. Habrá que hacer un esfuerzo para volver las cosas a su cauce institucional normal.
-¿Transformará la pandemia la lucha contra la corrupción?
-Estamos viendo algunas tendencias interesantes: los organismos multilaterales han establecido claramente que los recursos liberados van acompañados de estrictas medidas de rendición de cuentas. "Guarden los recibos", fue la advertencia de la titular del FMI.
-¿Y en la Argentina?
-La nueva normalidad ofrece una oportunidad para mejorar los estándares en materia de transparencia. Pero esa oportunidad choca con un efecto de inercia que ya se vio en otras emergencias. En la Argentina, las medidas de emergencia tienden a ser permanentes.
Otras noticias de Corrupción en la Argentina
- 1
El Colegio de Abogados de la Ciudad repudió la fiesta del fiscal Ramiro González
- 2
Alarma en la Corte Suprema. La Justicia investiga una serie de llamados a comisarias de alguien que se hace pasar por Horacio Rosatti
- 3
La Justicia dispuso el desalojo de la ocupación ilegal en el Parque Nacional Los Alerces
- 4
Elisa Carrió pidió indagar a Sergio Berni acusado de contaminar la escena del crimen de Nisman