Coronavirus en la Argentina: el golf, otro punto de discordia entre Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta
El gobierno de Axel Kicillof volvió a señalar a la administración porteña por la gestión de la crisis sanitaria y la cuarentena del coronavirus. Esta vez el motivo de discordia fue la intención del jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, de autorizar la práctica de deportes individuales, como el tenis y el golf a partir de la nueva etapa de la cuarentena.
"En este momento de crecimiento del virus parece inadmisible que se puedan habilitar actividades como el golf", dijo la ministra de Gobierno de Buenos Aires, Teresa García, una dirigente de máxima confianza de Cristina Kirchner.
El dardo de García sigue al que ayer le dedicó al gobierno porteño el ministro de Salud, Daniel Gollán. "En la ciudad hay cada vez más casos y eso hace que el virus se distribuya por otros lugares", señaló, como explicación del alza de contagios de COVID-19 en el conurbano .
La ministra de Gobierno ahondó en la mirada de Kicillof sobre la próxima fase de la cuarentena, que el gobernador, el jefe porteño y el presidente Alberto Fernández prevén anunciar el viernes. "El golf no está en la agenda del gobernador Kicillof. Nuestra agenda son las industrias, los trabajadores y los comercios de proximidad", señaló. Consideró que las actividades "que generan circulación" presionan al conurbano y son perjudiciales para la estrategia sanitaria compartida.
La referencia al golf alude a la intención que tiene Larreta de continuar con una parte de su cronograma de reaperturas de la cuarentena por coronavirus. Ayer se reunió con Fernández para repasar las cifras epidemiológicas y comentarle cuáles son sus intenciones para la próxima fase. Si bien analizaba habilitar las mesas de restaurantes en la vía pública, lo tiene casi descartado. Los deportes individuales, con protocolos estrictos, sí se mantienen en carpeta. También podría permitir que reabran los comercios en la zona de la estación de Once.
Kicillof, en cambio, piensa que lo mejor sería en esta etapa de fuerte cantidad de casos en la provincia (5000 al día, aproximadamente) mantener todo como está. Es más, al igual que Fernández, no descartan la posibilidad de pasar a un período de mayores restricciones, aunque saben que correrían el riesgo de la desobediencia ciudadana.
"Tuvimos más de 5000 casos en la provincia, es un número alarmante. También es alarmante la ocupación de camas de terapia intensiva y si esto sigue así es más de un alerta lo que vamos a tener", advirtió García, en línea con el discurso que encarna Gollán.
La ministra de Kicillof reivindicó "el éxito" de la cuarentena estricta convocada de manera anticipada, en marzo. Se la atribuyó a una decisión de "Alberto Fernández y Axel Kicillof" sobre el manejo de la cuarentena por coronavirus. Y aprovechó para acusar al periodismo de obstaculizar la estrategia sanitaria. "Algunos medios hablaron de infectadura y la cuarentena más larga del mundo y hoy vemos la importancia de quedarse en casa", dijo.
Y confirmó que "si los números lo indican habrá que volver a una cuarentena estricta". Aclaró que para eso hay que ver los números de contagios, muertes y ocupación de camas: "En todos los lugares del mundo donde se flexibilizó se tuvo que volver para atrás. Jujuy habilitó todas las actividades y el turismo y hoy está menos que en fase 1 y con el gobernador Gerardo Morales pidiendo ayuda porque se volvió incontrolable el contagio".
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