Confirman la condena de Ricardo Jaime por coimas para desarrollar el tren bala a Rosario, que nunca se hizo
Lo hicieron con una pena de 2 años y 6 meses por aceptar 1 millón dólares en sobornos de la empresa que iba a construir el tendido ferroviario, que nunca se realizó; hoy está en libertad
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La Cámara Federal de CAsación penal confirmó la condena a dos años y seis meses de prisión, de ejecución condicional, inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra el ex secretario de Transporte de Cristina y Néstor Kirchner, Ricardo Jaime, por aceptar la promesa del pago de un millón de dólares de una empresa para construir un tren bala entre Buenos Aires, Rosario y Córdoba.
La condena por cohecho pasivo fue confirmada por los jueces de la Sala II de la Cámara de Casación Penal, Gustavo Hornos, Guillermo Yacobucci y Angela Ledesma, que rechazaron los planteos de Jaime.
El exfuncionario, que acompañó a los dos Kirchner en sus mandatos, ya fue condenado por enriquecimiento ilícito, por cobro de otros sobornos, por la tragedia de Once, por aceptar dádivas e intentar ocultar pruebas. Cumplió casi 9 años en la cárcel y ahora está en libertad condicional con una tobillera en su casa de Córdoba.
En este caso del tren bala se acreditó que Jaime como Secretario de Transporte, aceptó la promesa de pago de un millón de dólares por parte de la empresa ALSTOM, para favorecer a esa compañía en el proceso de licitación del Tren de Alta Velocidad Argentina (TAVE), que nunca existió.
La empresa ALSTOM lideraba el consorcio empresario Veloxia, que participaba como oferente en el proceso de Licitación Pública Nacional e Internacional con Financiamiento para la contratación de la obra Electrificación integral, obra civil, infraestructura de vías señalamiento y comunicaciones y provisión de material rodante para el servicio ferroviario de en el corredor ferroviario Buenos Aires–Rosario–Córdoba.
El ofrecimiento del soborno de ALSTOM tenía como finalidad que Jaime, en el marco de su función pública favoreciera, direccionara el proceso administrativo en favor del consorcio Veloxia.
La aceptación de la promesa de pago se materializó mediante la suscripción de un contrato de consultoría (“contrato-soborno”), firmado entre la empresa Controles y Auditorías Especiales de Argentina S.A. (CAESA) y dos filiales de ALSTOM con fecha 16/07/08 para el supuesto asesoramiento de la primera a la segunda sobre el TAVE.
La empresa CAESA era manejada por Manuel Vázquez, quien a su vez, era asesor “ad honorem” de Jaime y una persona que mantenía una relación estrecha con el exfuncionario nacional que incluía intereses patrimoniales comunes. Vázquez utilizó la empresa CAESA para la firma del “contrato-soborno” actuando como interpósita persona de Jaime.
Esa misma empresa fue usada para recibir los sobornos por los que Jaime fue condenado cuando se realizó una compra millonaria de trenes a España y Portugal, que hoy son chatarra ya que no sirvieron para su uso en Argentina.
Los jueces de Casación entendieron que todas las pruebas autónomas e independientes reunidas en la causa permiten acreditar debidamente las circunstancias de tiempo, modo y lugar en la que se cometió del delito juzgado.
En el voto del juez Hornos, se resaltó que “la maniobra juzgada, donde estuvieron involucrados altos funcionarios públicos en connivencia con particulares quienes ocasionaron un extraordinario perjuicio económico al erario público, es indudablemente grave y tiene un alto impacto en el sistema democrático y en el orden institucional”. Por eso destacó que su eficaz juzgamiento evita que la corrupción quede impune, y detiene el espiral inflacionario de consecuencias perniciosas para la vida de la República.
Los jueces del Tribunal Oral Federal N° 8 Sabrina Namer, Gabriela López Iñíguez y José Toselli -por unanimidad- condenaron a Jaime el 15 de septiembre de 2022. El fiscal del juicio Marcelo Colombo había pedido una condena de cuatro años y seis meses de prisión efectiva porque pudo comprobar que Jaime-a través de su principal testaferro- había acordado cobrar un millón de dólares de coimas que pagaría la empresa Alstom.
El Tren Bala que iba a unir Buenos Aires con Rosario y Córdoba fue prometido y anunciado por Néstor Kirchner en 2006. La licitación se definió en 2008 cuando estaba a cargo de la presidencia Cristina Kirchner. Nunca se concretó.