Confirmado: el Gobierno, la CGT y los empresarios acordaron un bono de $5000
Después de varios días de febriles negociaciones, el Gobierno logró cerrar un acuerdo con la CGT y los empresarios para otorgar "una recomposición salarial obligatoria de $5000 para los trabajadores del sector privado".
Así lo confirmaron fuentes del Ministerio de Producción y Trabajo, a cargo de Dante Sica, que ayer mantuvo un encuentro con empresarios y representantes de la Confederación General del Trabajo. En esa reunión se acordaron el pago de un bono que será de "carácter no remunerativo y a cuenta de las próximas revisiones paritarias" para compensar la caída salarial.
Este último punto es clave y fue una de las cláusulas que exigieron los empresarios. Es que al poner que "es a cuenta", los 5000 pesos que cobrarán los trabajadores del sector privado quedarán incluidos en las futuras revisiones o negociaciones salariales. Es decir que el salario base continuará con el ajuste acordado en la paritaria, cada vez más retrasado por el aumento de la inflación.
Según declaró Daniel Funes de Rioja, vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), cada sector negociará la fecha y la modalidad de pago. "Ha habido una predisposición del Gobierno con el carácter no remunerativo", destacó el empresario, quien dijo que esto "hace a la esencia del acuerdo por el peso de las cargas sociales"
En ese sentido, desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) aclararon que no se trata de un bono, "sino un aporte obligatorio de 5000 pesos de recomposición salarial no remunerativo, en cuotas y a cuenta de paritaria".
Hoy se reunirán los equipos técnicos de ambas partes con el Gobierno para redactar el decreto que llevará la firma del presidente Mauricio Macri.
"Tenemos que generar un marco que pueda ser cumplido", agregó Funes de Rioja. El presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), que hace unos días había dicho que "obligar a las empresas a pagar un bono es un acto de irresponsabilidad", ahora se mostró conforme con el resultado final del nuevo acuerdo.
Cerca de Sica se mostraron satisfechos con la finalización de la negociación que también servirá para inyectar algo de dinero en la alicaída economía doméstica. "Quedó en claro que la intención no es asfixiar a nadie. Era una recomposición que había que dar", describieron fuentes oficiales.
En el encuentro estuvieron presentes Héctor Daer (Sanidad), Carlos Acuña (SOESGyPE), Antonio Caló (UOM), Andrés Rodríguez (UPCN), Armando Cavalieri (Comercio), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Jorge Sola (Sindicato de Seguro), Carlos West Ocampo (Sanidad), Robustiano Geneiro (UTHGRA) y Alberto Tomasone (Comercio).
En representación de los empresarios, además de Funes de Rioja, participaron Miguel Acevedo (UIA), Julio Crivelli (Camarco), Enrique Matilla (CAME), Pedro Etcheverry (CAC), Ricardo Diab (CAME), Florencia Merensztein, Julián Jajurin (CAME) y Claudio Rodriguez.
También estuvieron presentes el secretario de Comercio Interior, Ignacio Werner; el titular de la Unidad de Coordinación General, Ignacio Pérez Riba; y la directora nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, Gabriela Marcello.
En medio del proceso electoral, se trata del segundo gesto del gobierno nacional para los gremios en menos de una semana. Es que, en medio de la negociación por el bono, la Casa Rosada había liberado $3000 millones de pesos para las obras sociales sindicales. Tal como adelantó LA NACION, los fondos serán distribuidos en cuatro cuotas, entre el mes en curso y diciembre.
Macri cumplió así con un compromiso que asumió casi al inicio de su gestión para que las prestadoras médicas afronten los tratamientos de alta complejidad y como parte del plan de Cobertura Universal de Salud (CUS).