Colectivos: la Ciudad reclama que el Gobierno sume a Axel Kicillof para un acuerdo sobre el traspaso del transporte
Funcionarios de ambas jurisdicciones mantuvieron un encuentro por los subsidios; diferencias por el esquema tarifario y el intento de Larreta de arrastrar a la provincia a la discusión
- 5 minutos de lectura'
Por Cecilia Devanna y Matías Moreno
En el primer round entre la Ciudad y la Casa Rosada por los subsidios, la administración de Horacio Rodríguez Larreta puso como condición para avalar un eventual traspaso de las líneas de colectivos que el presidente Alberto Fernández sume a la discusión al gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
Así lo indicó el ministro de Gobierno porteño, Jorge Macri, tras la primera reunión entre autoridades del Poder Ejecutivo nacional y la Ciudad por el eventual traspaso de 32 líneas de colectivos, que implicaría una quita de entre 9000 y 13.000 millones de pesos en subsidios a la administración porteña. Ese recorte, anticipan fuentes porteñas, impactaría en el valor del boleto mínimo, actualmente en $18.
“El grueso de los colectivos arranca y terminan en la provincia de Buenos Aires, así que es imprescindible entender cuál es la mirada de la provincia. No se puede administrar un sistema de transporte de colectivos sin un acuerdo de las tres partes”, remarcó Jorge Macri apenas finalizó la cumbre en la sede de la cartera nacional. El funcionario subrayó que la posibilidad de transferir las líneas de colectivos requiere de “un acuerdo y la aceptación de la Ciudad”. Es decir, para avanzar con el traspaso de las competencias en materia de transporte se necesitará una ley, que incluya la transferencia de partidas.
La Casa Rosada, por su parte, sostiene que busca lograr una mayor equidad en la distribución de los recursos en materia de transporte, para que el interior del país tenga un boleto similar al que se paga en la ciudad. Pretenden otorgarle el control tarifario a Rodríguez Larreta, pero sin los subsidios.
“Esperamos a partir de este diálogo que la Ciudad asuma sus compromisos con sus pasajeros y pueda encargarse de este servicio que es de la ciudad, en la misma relación que el resto de las provincias argentinas”, dijo el secretario de Transporte, Diego Giuliano. Para el funcionario, esa “asimetría federal debe ser superada”.
El diálogo entre la Ciudad y la Casa Rosada avanzará en el marco de cuatro ejes: jurídico y legal, económico, operativo e institucional. La próxima reunión será el próximo martes entre equipos técnicos de ambos gobiernos, sin figuras políticas.
En el Gabinete de Larreta repiten que buscan una solución “viable” al conflicto por el eventual traspaso de los colectivos. Y piden que la Casa Rosada tenga una mirada “integral” sobre el sistema de transporte urbano en el AMBA. “Es necesario abordar este proceso con un enfoque metropolitano. En la Ciudad circulan 135 líneas de colectivo, no solo 32. ¿Habrá tarifas distintas de un lado y del otro de la General Paz? No se puede tener un tratamiento distinto”, argumentan.
Jorge Macri pidió “trabajar en equipo” entre las tres jurisdicciones e insistió en que el valor de las tarifas depende de una decisión nacional. “No hay manera de darle solución si no se trabaja entre la provincia, la Nación y la Ciudad”, señaló. Y advirtió que si existe “asimetría” en el reparto de subsidios entre el interior y el AMBA “es una responsabilidad del gobierno nacional”.
Del encuentro participaron Giuliano y Álvaro Errea (Articulación interjurisdiccional) en representación del gobierno nacional, y Jorge Macri (Gobierno) y la secretaria de Transporte porteño, Manuela López Menéndez, emisarios de Larreta.
Diferencias
“Fue una reunión protocolar en la que unos vinieron a escuchar y otros a dar su postura”, resumió ante LA NACION una fuente de Transporte en referencia al encuentro de esta tarde. “Fue todo muy cordial, las diferencias y peleas vienen después”, deslizaron.
Ni bien finalizó la cumbre, Giuliano y Jorge Macri dijeron que la reunión fue muy buena. Pero tuvieron diferencias respecto de las tarifas. “El impacto en el boleto tendrá que ver con la decisión que tome la Ciudad asumiendo su competencia plena y autonómica en esta materia”, anticipó el secretario de Transporte de la Nación. En cambio, el ministro porteño dijo que un eventual aumento de tarifas supone que haya acuerdo entre las partes y una transferencia de competencias. “No se puede tener política de transporte distinta en Ciudad y Provincia. Aceptamos dialogar sobre un sistema del AMBA que sea lógico para la gente donde los esfuerzos sean compartidos. Hoy, la responsabilidad del sistema la tiene la Nación”, apuntó Jorge Macri.
En la cúpula del gobierno porteño especulan con la chance de que Fernández acepte sostener los subsidios “por un tiempo” al transferir las competencias.
En tanto, distintas fuentes del Ejecutivo nacional consultadas por este medio coincidieron en que la “distancia” entre lo que proponen unos y otros está dada porque la Ciudad “quiere incluir (en el traspaso) a la provincia de Buenos Aires buscando que sea menor el costo para ellos”, tras lo que descartaron de plano la posibilidad de que eso suceda.
Según pudo saber LA NACION, mientras se realizaba el encuentro en el segundo piso del Ministerio de Transporte, se conoció la decisión de la Corte Suprema de convocar a una audiencia por la discusión entre ambos Ejecutivos en el marco del reclamo de Ciudad por la quita de la copartipación por parte de Nación. Fuentes al tanto de lo sucedido aseguraron que ninguno de los presentes hizo alusión a ello así como afirmaron que Ciudad no mencionó la posibilidad de una judicialización de este nuevo foco de conflicto entre ambos. “No se trata de una cuestión forzada, sino de un acuerdo donde la ciudad se tiene que hacer cargo de sus servicios y sobre todo de sus competencias”, sostuvo Giuliano. Y resaltó que el Ejecutivo nacional pretende “poner a la Ciudad en el contexto del resto de las provincias”.
Si bien la jugada de la Casa Rosada cuenta con el aval de la mayoría de los gobernadores peronistas, Juan Schiaretti (Córdoba) y el radical Gerardo Morales (Jujuy) cuestionaron la decisión de Fernández de avanzar sobre el traspaso de colectivos a la Ciudad -otorgándole el control tarifario, pero sin los subsidios-, sin tocar los giros que destina a la provincia, donde manda Kicillof. En Uspallata celebraron el reposicionamiento de Schiaretti y Morales.
Por Cecilia Devanna y Matías Moreno
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