"Camau" Espínola pide sumar a Massa al PJ para el desafío de 2019
En Corrientes, el peronismo ya cerró filas con el tigrense para ir por la gobernación
LA NACIONMarcelo Veneranda
El senador nacional Carlos "Camau" Espínola , del Frente para la Victoria de Corrientes, pidió "apertura" y "madurez" al Partido Justicialista para sumar a sus filas al líder del Frente Renovador, Sergio Massa . En la misma entrevista con la agencia DyN, el ex intendente de la capital provincial señaló que Cristina Kirchner debe "colaborar desde afuera" en la "reestructuración y renovación" del peronismo.
A diferencia de las declaraciones del bonaerense Julián Domínguez, que hace una semana también había invitado a la ex presidenta a permanecer jubilada y recibió una pila de insultos y reproches, los dichos de Espínola no agitaron demasiado el escenario de su provincia.
No se trataría de una cuestión geográfica, sino temporal: mientras el resto del país elegirá este año a sus representantes para el Congreso nacional, en Corrientes la pelea es por todo: los correntinos decidirán quién se queda con la gobernación que hoy ocupa el radical Ricardo Colombi, integrante de Cambiemos. Ante la urgencia y el premio en disputa, el peronismo maduró rápidamente sus internas.
El proceso, de hecho, lleva meses en marcha. Massa y Espínola acercaron filas el año pasado. En mayo de 2016, el tigrense viajó a Corrientes para fotografiarse con "Camau". Lo acompañó el ex senador correntino Eugenio "Nito" Artaza, uno de los radicales que mantuvieron su alianza con el Frente Renovador cuando la UCR decidió acordar con Pro para formar Cambiemos.
Artaza y Espínola volvieron a mostrarse juntos en diciembre, lo que alentó versiones de una fórmula para la gobernación. Pero el humorista estaría más cerca de pelear por la boleta de diputados.
Sin publicar fotos, el massista que fue y volvió a Corrientes varias veces fue el diputado Raúl Pérez, dedicado al armado nacional de las alianzas de Massa.
Por eso, la "apertura" que Espínola pidió al PJ nacional no fue más que un anticipo de lo que ya sucede en Corrientes, donde el acuerdo con Massa habría superado el veto incluso del ala más dura del kirchnerismo, que se referencia en el intendente correntino, Fabían Ríos.
La situación correntina dista años luz de la bonaerense: no porque no haya conversaciones entre peronistas y massistas del conurbano y el interior, sino porque el kirchnerismo parece recuperar fuerza a medida que se acercan las elecciones legislativas y la mejor candidata del espacio sigue siendo Cristina Kirchner. La ecuación no cambiaría demasiado si Daniel Scioli o Florencio Randazzo tomarán las riendas del espacio: quizá lo único que comparten son sus rencores hacia Massa.
De hecho, no son pocos los que imaginan que serán los comicios legislativos los que resuelvan la disputa bonaerense. "Una vez que derrotemos al kirchnerismo en 2017 vamos a poder liderar un peronismo depurado, legitimado y unido, en 2019", se envalentonan los massistas. Del otro lado esperan que Massa vuelva a quedar tercero en estos comicios, para que se diluya definitivamente dentro del peronismo. Como soldado.
Espínola los necesita a todos juntos dentro de los límites provinciales. Colombi lo derrotó por sólo 5 puntos en 2013, pero no puede buscar la reelección. El empeño en reformar la Constitución le robó tiempo para formar un heredero. Artaza, que en 2013 sacó 3 puntos, acompaña ahora al senador peronista. Los 25 intendentes del PJ gobiernan sobre el 65% del padrón electoral.
El massismo mira el experimento correntino como un avance de las conversaciones que mantiene en otras provincias: hoy busca colaborar para que mañana, o más bien en 2019, el peronismo le devuelva el favor.
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