Bonadio exculpó a Arribas y pidió detener al brasileño que lo había acusado
El juez federal Claudio Bonadio requirió ayer la captura internacional y extradición del doleiro brasileño Leonardo Meirelles, tras considerar que mintió para perjudicar al actual jefe de la inteligencia argentina, Gustavo Arribas , al quien desvinculó por completo de Odebrecht .
Bonadio acusó además al fiscal Federico Delgado y al titular de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas, Sergio Rodríguez, por considerar que violaron sus deberes como funcionarios públicos cuando le tomaron la declaración testimonial a Meirelles en la que complicó a Arribas.
Bonadio consideró probado "sin lugar a dudas" que Meirelles solo completó una transferencia a favor de Arribas, pero no las restantes que declaró ante la prensa, ante los fiscales Delgado y Rodríguez, ni ante los investigadores brasileños como parte de la llamada operación Descarte.
Según la policía y el organismo tributario brasileños, Arribas resultó el beneficiario final de múltiples transferencias por un total de US$850.000 que recibió a través de una estructura montada para lavar dinero y evadir a través de sociedades "pantalla" y cuentas offshore.
"Ese dinero salió de Brasil, pasó por una cuenta en Hong Kong y fue a parar a la Argentina, en una cuenta ligada al director de inteligencia de aquel país", precisó el delegado de la Policía Federal, Víctor Hugo Rodrigues Alves Ferreira, el 1° de marzo pasado, al detallar la investigación por presunto lavado de activos, fuga de divisas y evasión tributaria, bajo la supervisión de la Segunda Vara Federal Criminal de San Pablo.
Según la Policía Federal brasileña, esos US$850.000 fluyeron hacia Arribas mediante 14 transferencias que completó Meirelles desde Hong Kong en septiembre de 2013, con destino final en un banco argentino, cuyo nombre no trascendió.
"Arribas está investigado como destinatario de una parte de los valores de una red de lavado", confirmó entonces a LA NACION el comisario a cargo del operativo, Milton Fornazari. "Recibió 850.000 dólares, que fueron enviados de manera ilegal de Brasil a la Argentina. Lo que queremos saber es por qué recibió esos valores de manera ilegal y cómo se benefició", explicó.
Tras consultar a todos los bancos argentinos, sin embargo, Bonadio no detectó ningún rastro de esas transferencias. "Solo está acreditada la recepción en la cuenta N° CH8304835037364552000 de Gustavo Arribas en el banco Credit Suisse de la ciudad de Lugano, de una única transferencia de 70.475 dólares. Las restantes ("cuatro", "más de diez" o "catorce") NO lo están", concluyó el juez, que escribió esa palabra, "no", en mayúsculas.
"Problema personal"
Consultado por LA NACION, el abogado de Meirelles en Brasil, Haroldo Nater, mantuvo su decisión de no responder a las novedades argentinas, un silencio que se impuso desde que su cliente fue acusado de presunto falso testimonio, en vez de ser convocado como un arrepentido que podía aportar información comprometedora. "Nada tenemos para declarar", sostuvo.
Por el contrario, Arribas consideró que Bonadio "confirmó su inocencia", según la gacetilla que envió su vocero en la AFI. "El juez probó que lo declarado por el director de la AFI era cierto y denunció en un fallo inédito a los fiscales", indicó en ese comunicado.
Por su parte, Delgado consideró "injusto" que Bonadio lo denunciara y sostuvo que el magistrado "tiene un problema personal" con él, fruto de roces producidos en otros expedientes. "Si cada vez que un fiscal toma una declaración que al juez no le gusta, lo denuncia, estamos en el horno", afirmó en declaraciones radiales, minutos después de conocer el fallo.
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