Blindado: así vallaron el Congreso para la votación del acuerdo con el FMI en el Senado
Tras los incidentes de la semana pasada y la crítica de Cristina Kirchner, la Ciudad puso en marcha un operativo para evitar desmanes
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Tras los incidentes de la semana pasada, el gobierno porteño valló este miércoles por la noche el edificio del Congreso de cara a la sesión del Senado en la que se votará el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. La medida busca evitar los desmanes y los cruces entre funcionarios kirchneristas y de la Ciudad.
LA NACION registró este miércoles cómo distintos operarios de la Ciudad comenzaron a colocar vallas en torno al edificio del Cogreso. La medida ocurrió luego de la conferencia de prensa que dieron el ministro de Gobierno porteño, Jorge Macri, y su par de Seguridad, Marcelo D’Alessandro.
Según el anuncio, las barreras estarán en las inmediaciones del Congreso y se comenzarán a colocar esta noche. Comprenden un perímetro delimitado por las avenidas Entre Ríos, Callao, Rivadavia, la calle Combate de los Pozos y el frente que da a la Plaza del Congreso.
Además, habrá una importante presencia de efectivos y el acompañamiento del equipo de Agentes de Tránsito de Seguridad, para ordenar el tránsito en los alrededores de la manifestación.
A eso se sumará el respaldado de las cámaras de videovigilancia dispuestas en la zona, las que serán supervisadas desde los Centros de Monitoreo Urbano de la Policía de la Ciudad para evitar episodios de violencia e intervenir rápidamente en caso de ser necesario.
Si bien desde la Ciudad aclararon que no se busca impedir la libre manifestación de quienes rechazan el refinanciamento de la deuda con el FMI, remarcaron que es necesario “desplegar un operativo especial preventivo que permita evitar nuevos disturbios”.
Los disturbios de la semana pasada quedaron envueltos en controversia, luego que Cristina Kirchner distribuyera un video en el que su despacho fue atacado. Desde la Ciudad indicaron que la vicepresidenta había solicitado que no se colocaran vallas, pero desde el kirchnerismo contradijeron esa versión.
El ministro de Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro, cargó la responsabilidad en el oficialismo, al decir que el Gobierno “les exige” que no pongan vallas durante las manifestaciones. “La propia Cristina ha llamado por teléfono”, acotó recientemente.
Sin embargo, un comunicado del Senado desmintió “categóricamente” que alguna de las autoridades del cuerpo “se haya comunicado con funcionarios del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para solicitar que no se colocaran vallas de seguridad el pasado jueves 10 de marzo.”
Convencida de que el ataque contra su oficina fue planeado, Cristina Kirchner publicó grabaciones de los disturbios ayer y señaló que la Policía de la Ciudad había llegado 20 minutos después de que comenzaron.
El hecho dio, además, lugar a un cortocircuito interno dentro de la coalición oficialista. Desde La Cámpora criticaron la falta de un repudio a la agresión contra la vicepresidenta. “Aturde el silencio”, escribió el ministro bonaerense y uno de los dirigentes máximos de La Cámpora, Andrés Larroque.
Por los disturbios de la semana pasada, ya son varios los detenidos por los ataques a piedrazos contra el edificio del Congreso y efectivos policiales. Roberto Martino, líder de la rama “histórica” del Movimiento Teresa Rodríguez (MTR) y Jaru Alexander Rodríguez Carrero del mismo espacio, fueron los primeros. En las últimas se conoció el arresto de Julián Claudio Lazarte, de 31 años y nacionalidad argentina.
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