Bariloche. El oficialismo provincial le ganó a las fuerzas nacionales

Con la crisis económica nacional como telón de fondo, pero con una coyuntura política que no replicó la pelea nacional entre el macrismo y el kirchnerismo, el intendente de Bariloche, Gustavo Gennuso (Juntos somos Bariloche), obtuvo anoche su reelección y comenzará un nuevo período de gestión en diciembre.

Al cierre de esta edición Gennuso obtenía el 40% de los votos, aventajando a sus rivales Daniel Natapof (Frente de Todos, 22%), Santiago Palmeyro (Bariloche por el Cambio, 9%), Pablo Chamatrópulos (Podemos, 6%) y Rodolfo Sánchez (Frente de Izquierda, 5,6%), en ese orden.

El intendente reelecto apareció en su búnker de campaña alrededor de las 20.30 y habló ante la militancia. Agradeció al gobernador Alberto Weretilneck, con quien habló por teléfono tras el resultado, y a la mandataria electa Arabela Carreras, barilochense, que por la mañana lo había acompañado a votar.

"Fue una gestión dura por muchos problemas nacionales, pero fuimos para adelante y cambiamos la ciudad. La gente nos dijo que le gustaba nuestra manera de trabajar, que es mucha", sostuvo. "Tengo un agradecimiento infinito hacia Alberto [Weretilneck], porque esto no hubiera sido posible sin su apoyo", reiteró el jefe comunal.

La electa presidenta del Concejo Deliberante, Natalia Almonacid, agradeció "a toda la gente que estuvo cuidando nuestros votos, al gobernador" y arengó: "Nuestra ola verde sigue y sigue".

Weretilneck no estuvo en Bariloche y sí festejó en Choele Choel, donde también triunfó la coalición oficialista provincial: Diego Ramello ganó la intendencia tras superar al candidato oficialista del Frente de Todos, Sebastián Altamiranda.

Resultado irreversible

"Estamos analizando las mesas testigo que tenemos y entiendo que la tendencia es irreversible", dijo el barilochense Natapof a una radio local, cuando Gennuso ya festejaba. "Esto significa que vamos a seguir trabajando y que estamos muy agradecidos a los que nos votaron, a la militancia y a los referentes", agregó el postulante kirchnerista.

Mientras la Casa Rosada se mostró prescindente en los comicios, Alberto Fernández sí se reunió con Natapof en sus oficinas de la calle México, cuatro días después de ser el dirigente más votado en las PASO. "Sé que ustedes me han acompañado en estas elecciones primarias y les quiero dar las gracias, a todos los que nos han votado y a los que no también, por haber participado", expresó el candidato a presidente del Frente de Todos, que el 11 de agosto ganó por una diferencia de más de treinta puntos por sobre la fórmula Macri-Pichetto en esta ciudad turística.

En la categoría de legisladores nacionales por Río Negro, los candidatos del kirchnerismo Martín Doñate (Senado) y Martín Soria (Diputados) también se impusieron por sobre los candidatos de la alianza gobernante y de Cambiemos.

El antiguo número dos de la conducción de la organización Montoneros Fernando Vaca Narvaja había presentado su candidatura a intendente por el denominado Unión por el Movimiento Popular, pero declinó su postulación a mediados de julio pasado. Anunció que lo hacía para apoyar a Natapof y con el declarado objetivo de derrotar el "acuerdo Weretilneck-Pichetto".

Gennuso votó temprano en la escuela 321, acompañado por la gobernadora electa, Carreras, quien fue candidata ante la imposibilidad constitucional de Weretilneck de presentarse a un nuevo mandato. El gobernador, que se presentó en las PASO como candidato a senador, terminó segundo, a más de quince puntos de diferencia de Doñate.

"Que la gobernadora electa sea de Bariloche y venga a votar a la mesa es algo a lo que no estábamos acostumbrados", valoró Gennuso, ingeniero nuclear y emprendedor.

En estos comicios municipales se implementó por primera vez el sistema de boleta única. A pesar de que incluso Gennuso arriesgó que los resultados estarían listos hacia las 19.30, el escrutinio se demoró más de lo previsto.

Votó alrededor del 65 por ciento del padrón, que tenía 100.579 electores habilitados.