Axel Kicillof se reunió con empresarios en San Pablo y buscó mostrar previsibilidad tras las elecciones
“Nuestra fuerza perdió tres elecciones intermedias”, dijo ante más de 70 firmas brasileñas e internacionales; aseguró que la “reindustrialización” es una política compartida con el Presidente
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RIO DE JANEIRO.- Con el objetivo de profundizar la integración comercial con Brasil, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, viajó este miércoles a San Pablo y se reunió con más de 70 empresarios en la sede de la Federación de Industrias de dicha ciudad (FIESP).
Kicillof llegó a Brasil en una misión comercial coordinada por el embajador de Argentina en Brasilia, Daniel Scioli. El interés de que el gobernador bonaerense llegara a la capital económica de la región resulta evidente en los números: el 60% de las exportaciones a Brasil proviene de Buenos Aires.
En el almuerzo en un salón de la FIESP al límite de capacidad, hubo 75 empresas brasileñas e internacionales de diferentes sectores -agroalimentario, aerolíneas, autopartes, turismo, servicios y constructoras-, representados por CEOS de firmas como Latam, Embraer, 3M, Andreani y General Motors. Por la entidad industrial, la mayor de Brasil, participó su vicepresidente, Rafael Cervone.
Kicillof, que calificó la reunión como “muy importante”, emprendió la vuelta a Argentina con un puñado de declaraciones de buenas intenciones.
Por caso, la cadena de electrodomésticos Whirpool manifestó que quiere ampliar su línea de producción en Argentina. Empresarios del sector naval mostraron también voluntad de invertir en el Astillero Río Santiago y en el dragado del Río Magdalena. El gobernador aseguró que ocho empresarios presentes en la reunión pidieron un nuevo encuentro en Buenos Aires la semana que viene, pero no aclaró de qué sectores.
“Se expuso cuál es la política que tenemos en Brasil. Estamos en una rápida recuperación y estamos poniéndonos de acuerdo sobre las oportunidades que se abren y las necesidades de las empresas brasileñas que operan en la provincia de Buenos Aires”, dijo Kicillof, en una conferencia de prensa luego del almuerzo con los hombres de negocios.
El viaje relámpago de Kicillof junto con su ministro de producción, Augusto Costa, había despertado un gran interés en el empresariado local. La embajada en Brasilia coordinó el encuentro como una oportunidad para apalancar las exportaciones argentinas a este país y, al mismo tiempo, conseguir compromisos de inversión en Buenos Aires.
“Dejamos en claro que el gobierno nacional y el provincial están embarcados en una batería de medidas para facilitar y acelerar la reindustrialización”, agregó el gobernador bonaerense.
El trabajo del gobernador no fue apenas “vender” oportunidades en Argentina. En su primera gira internacional como mandatario provincial, Kicillof debió también responder inquietudes de los hombres de negocios y de la prensa local por la delicada situación política y económica en Argentina. No solo por la negociación en curso con el Fondo Monetario Internacional (FMI) sino por lo que pueda pasar en el país después de las elecciones legislativas del 14 de noviembre.
“Nuestra fuerza política, en los tres períodos que fuimos gobierno, perdió las elecciones intermedias. Hay que poner esto en su lugar”, dijo Kicillof en la conferencia de prensa, consultado sobre la solidez de la coalición de gobierno para conducir una agenda económica. “La política económica de reindustrialización está decidida por el Poder Ejecutivo. Y la alianza, el frente electoral, está convencido de eso, son las ideas que nos unen. La pandemia ha sido difícil, pero estamos convencidos de que vamos a salir con más producción y trabajo”.
La comitiva argentina también estuvo compuesta por el cónsul argentino en San Pablo, Luis Kreckler; el jefe de asesores de Kicillof, Carlos Bianco; y el empresario Marcelo Fernández, presidente de la CGERA.
El intercambio comercial entre Brasil y Argentina viene mostrando signos de recuperación luego del golpe que significó la pandemia. Apenas entre enero y septiembre, las exportaciones a Brasil crecieron casi 50% respecto al mismo período de 2020, mientras que las importaciones subieron 60%.
Scioli celebró que por segundo mes consecutivo la balanza comercial con Brasil fue superavitaria, con un crecimiento de las exportaciones en octubre de 50% en relación con el mismo mes de 2020. “En este contexto (de pospandemia) tenemos que fortalecer más que nunca lo local. Las cifras son contundentes”, se animó el embajador en Brasilia, con los números del ministerio de Economía de Brasil sobre la mesa.
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