Aunque su imagen sufre el impacto de las polémicas, Javier Milei afirma que no cambiará su estilo
El diputado asegura que opina desde sus “convicciones” y no en base a “encuestas”; sin embargo, está sumando asesores a su equipo en busca de “profesionalizarse” como político
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“No estamos pendientes de las encuestas para decir tal o cual cosa, nosotros contestamos con nuestras convicciones. Y sobre todas las cosas lo hacemos con nuestros valores morales”, lanzó Javier Milei en su acto en Gerli, dos semanas atrás. El líder de La Libertad Avanza venía atravesando una seguidilla de polémicas, que esta vez impactaron negativamente en su imagen. Le seguirían jornadas peores.
En unos pocos días el diputado se definió a favor de la libre portación de armas, de la venta de órganos como “un mercado más” y afirmó que se siente “muy identificado en términos históricos” con Margaret Thatcher. Además, se conoció que denunció a cinco periodistas “por afectación al honor” y “daño moral” y aseguró que querellará también a la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, que lo comparó con Adolf Hitler.
Por último, el diputado defendió a la plataforma de criptomonedas CoinX, que está investigada por presuntas estafas. “En realidad no estafaron a nadie”, afirmó el economista en LN+ y justificó: “¿Por qué cerraron? Porque no les da el negocio porque si se te cae el bitcoin, ¿qué hacés con la granja de bitcoin?”.
Pese a que desde su entorno relativizan el impacto y aseguran que no ven que la imagen del diputado se haya desplomado, por primera vez, varias encuestas coinciden en el crecimiento de la percepción negativa de Milei. “Después de haber tenido un año brillante empezó a hacer declaraciones incomprensibles que no hace ningún político”, resumió Carlos Maslatón, enfrentado con el economista en medio de la interna libertaria.
Un estudio de la consultora Zuban, Córdoba y Asociados muestra que la imagen negativa de Milei creció 10 puntos en el último mes y llega al 51,4%; mientras que la imagen positiva retrocedió de 47,7% a 41,2%. De esta manera, por primera vez prevalece el rechazo a su figura. En esa misma línea, el último estudio de la consultora Fixer muestra que la imagen negativa en junio se disparó al 54% y la positiva sintió el impacto. Tuvo un descenso de 10 puntos porcentuales cayendo al 25% después de haber alcanzado su pico en enero cuando registró 38%.
Ese mismo sondeo muestra una caída notoria en la intención de voto. Mientras que La Libertad Avanza se posicionó a principio de año en un 11% y logró crecer al 20% en abril, cayó al 18% en mayo y en junio tocó el 13%.
El economista relativizó esta caída y afirmó que “la intención de voto no se movió”. Uno de sus interlocutores planteó que así como Milei no se preocupaba cuando subía, tampoco lo hará ahora que está a la baja. Milei piensa que “es parte de la política” pero advierte que “no se va a callar”.
Quienes lo frecuentan coinciden en que es una persona con la que se puede dialogar y aseguran que “escucha”. Sin embargo, uno de ellos se resigna y reconoce: “Tiene una reacción muy buena pero pareciera que eso después no se traslada a la práctica”. En ese terreno, el diputado resulta “incontenible”.
Aunque enfatizan que “no es un candidato coacheado”, deslizan que Milei está sumando asesores como parte de su equipo y se irá “profesionalizando” como político. Sus críticos plantean que solo su hermana cuenta con el poder de influenciarlo verdaderamente.
Milei, en tanto, se muestra convencido en no parecerse a los demás políticos “que dicen lo que les conviene”. Pese a las advertencias y sugerencias de varios de sus colaboradores, que reconocen que sería preferible que evite algunos temas que ni siquiera son parte de la agenda argentina, para él la clave es mostrarse genuino, o presentarse como tal. “No contesto mirando encuestas como las otras basuras, yo te contesto lo que pienso”, remarcó esta semana en A24. “Piensa en ganar pero no a cualquier costo a diferencia del resto. Lo hará si coinciden con su pensamiento, si no, entonces esto no es para él”, resume uno de ellos.
“Prefiero una verdad incomoda que una mentira confortable”, repite el libertario, tanto en público como en privado.