Augusto Costa: “La inflación acumulada de enero-octubre estaba en el orden del 10%”
El ex secretario de Comercio sostiene que el índice de precios estaba cayendo cuando asumió Macri; dice que Prat-Gay falseó el déficit
La entrevista con el ex secretario de Comercio fue en su departamento, en Palermo.
-Siempre se elogiaron los "superávit gemelos" de Kirchner. ¿Por qué durante los gobiernos de Cristina no se pudieron mantener?
-Cuando uno analiza una variable por separado, la inflación o el déficit, el superávit comercial, y solo se concentra en eso, está errando el análisis. Hay que ver un conjunto de políticas que hacen a los resultados. Para algunos es un fin en sí mismo tener superávit fiscal, sin tener en cuenta las circunstancias. Es el típico programa que el FMI recomienda y lo que está implementando el macrismo.
-¿Qué sería tener en cuenta las circunstancias?
-La crisis de 2008 no pasó. Los países de Europa siguen algunos con tasas de desempleo del 20%, con economías estancadas. Cuando uno aplica una política de ajuste en un contexto recesivo de la economía mundial, lo que tiene que hacer es compensar el contexto internacional desfavorable. Muchos dicen que Argentina tuvo viento de cola. ¡Argentina en los últimos ocho años tuvo un viento de frente tremendo! Si no fuese por las políticas activas que tuvo el Estado, no se hubiese podido permitir continuar con el ciclo de crecimiento que tuvo la Argentina y que no tuvo Brasil ni los países europeos.
-¿A qué políticas se refiere?
-A apalancar el proceso de crecimiento de la industria para poder generar mayor empleo, mayores ingresos y retroalimentar ese círculo. Dentro de ese esquema, la política fiscal cumplió su objetivo. No es que hay un déficit que sea descontrolado…
–El 9 de diciembre, cuando entregaron las llaves del inmueble, ¿de cuánto era el déficit fiscal?
–2,3%. Es el déficit fiscal primario que se alcanza con la normativa que el FMI establece como estándar internacional. Cuando Prat-Gay habla del 7% inventa una metodología que viola los manuales de estadísticas.
–¿Y la inflación?
–Para ese momento la inflación acumulada enero-octubre estaba en el orden del 10%, con una tendencia a la desaceleración.
–¿El 10%!
–Enero-octubre. La interanual estaba por abajo del 15%. No sólo el Indec mostraba tendencia a la desaceleración, también lo decían los índices truchos de la oposición. El IPC Congreso, el IPC del gobierno de la Ciudad, decían que la inflación hasta octubre había bajado 13 puntos.
–Pero es raro. Si fuera así, ¿por qué ustedes aprobaron paritarias del 28, 30%?
–33% decía el índice de Patricia Bullrich en 2014. En 2015 decía 20%. Hubo una desaceleración muy importante de los precios hasta el mes de octubre. Ahí cambia la tendencia y se produce una aceleración inflacionaria que, por el apagón estadístico del gobierno de Macri, no sabemos en cuánto cierra el año.
–Algunos empresarios decían que ustedes eran muy intervencionistas, que soñaban con pautar el margen de ganancia de cada actividad y que "eran stalinistas" que aspiraban a controlar todo desde el Estado.
–¿Existió la pretensión, la utopía, de fijar todos los precios de la economía? No. En una economía de mercado no existe que alguien fije todos los precios y los márgenes. Eso fue parte de lo que se intentó instalar. Es falso que con Axel [Kicillof) teníamos un plan soviético que pretendía decir lo que se tenía que hacer, cuánto se tenía que cobrar y cuánto tenían que ganar. Veníamos a profundizar la reindustrialización. Lo que se intentaba era evitar abusos que perjudicaban a los consumidores. Una forma de hacerlo fue Precios Cuidados, que fue muy exitoso para las empresas y los comercializadores, porque en el marco de una desconfianza del consumidor, sobre si lo estaban robando o no, los supermercados pudieron darles señales de que esos productos estaban validados.
-Otra frase escuchada fue: "Íbamos camino al chavismo". ¿Qué piensa?
-Si tengo que responder cada cosa que se dijo… Cada uno entenderá lo que es el chavismo, lo que es ir hacia Venezuela, un país que se estigmatizó. Nosotros lo que queríamos es que Argentina tenga crecimiento sustentable y la mayor parte de estén incluidos. Eso en Argentina se llama peronismo.
–¿Cuál es para usted la causa de la inflación?
–Nosotros tuvimos una política decidida y explícita de reindustrialización, utilizando todas las herramientas disponibles para estimular el mercado interno y para redistribuir los ingresos para fomentar la demanda. Cuando el Estado tiene esas políticas convive –esto lo demuestra la historia– con tasas de inflación más altas.
–¿Cómo sería eso?
–Es una cuestión económica. Si vos tenés una política de redistribución para que haya estímulo a la demanda, al consumo, puede haber inflación. El gobierno que quiere desarrollar una industria, necesariamente asume una inflación mayor. Eso pasó en China, en EE.UU. cuando se industrializó, en Alemania, en Inglaterra.
–¿Tuvieron 25, 30% de inflación?
–No importa, porque los niveles de inflación tienen que ver con el contexto, con los precios internacionales. Cuando vos querés industrializar generás incentivos para que se produzca internamente. Industrias que habían desaparecido después del neoliberalismo en la Argentina, como textil, calzado, juguetes, indumentaria, resurgieron a partir del esquema de políticas que hubo de 2003 en adelante.
–Pero si hay más negocios de zapatos y más oferta de zapatos, ¿no deberían bajar los zapatos?
–Bueno… Todo proceso de desarrollo te va generando nuevos desafíos a medida que se desarrollan. No es lo mismo la Argentina de 2003, viniendo de la crisis de 2001, con capacidad ociosa, con desempleo, con salarios reales bajos, que una vez que empieza la reactivación. Cuando se avanza en la industrialización, cada paso cuesta más porque aparecen fricciones que son lógicas de un proceso de desarrollo.
–Verdadero o falso: ¿La emisión genera inflación?
–Está demostrado empíricamente que eso no es así por definición. La inflación no tiene una única causa. El que trata de convencer de que la inflación es por el déficit, por la emisión, porque los trabajadores piden demasiado salario, está engañando a la gente porque quiere aplicar políticas de ajuste.
–Prat-Gay dijo que el "pass through" –el traslado a precios– no fue tan malo, porque si después de la devaluación la inflación mensual fue del 4%, "no está tan mal".
–Durante la campaña se intentó estafar a la gente proponiéndole una devaluación milagrosa que no existió nunca. Estuve con empresarios a los que Prat-Gay les decía este argumento y los empresarios les decían que no, que el único tipo de cambio relevante es el tipo de cambio oficial, y que si se devaluaba iban a tener que subir los precios porque les iban a subir los costos. Prat-Gay viene diciendo cosas que no son.
-¿Qué le parece esta frase? "Con Moreno se perdieron 12 millones de cabezas de ganado".
-Falso. Se instaló que por culpa de la política agropecuaria del gobierno kirchnerista hay menos cabezas. Si uno mira la serie histórica, la cantidad de ganado fluctúa y venía cayendo hace varios años. Después se recompuso, después volvió a caer y después empezó a recomponer.
-¿Pero el cierre de las exportaciones no hizo que cayeran los precios, que fuera menos negocio la cría y que los productores se deshagan de las madres, perdiéndose así los vientres?
-La expansión de la soja durante la última década desplaza la ganadería de los sectores tradicionales ganaderos a sectores más alejados que hacen que se incrementen los costos. En segundo lugar, al empezar a pactarse los alquileres en función de la soja, sube mucho el alquiler de los campos para ganadería, para trigo, para maíz, para leche. La soja genera un crecimiento de los costos, del alimento balanceado para las vacas. El hecho de que haya aparecido una producción con súper rentabilidad generó que actividades que son rentables, pero no tan rentables como la soja, fueran desplazadas. Hubo productores que se pasaron de la vaca a la soja.
-El precio de la soja desincentivó la rotación de los campos. ¿No hubera sido conveniente bajar retenciones al trigo y maiz para estimular esos cultivos y además tener una mirada estratégica a futuro?
-Cuando uno habla de actividades que son rentables… ¿Cuál es la respuesta? ¿Hacer más rentables actividades que ya lo son porque hay una que es más rentable? Si uno tiene que subsidiar actividades que son rentables porque tiene otra que es más rentable, no alcanzan los recursos para lograr sus objetivos. Obviamente esto cambia en 2014 con el derrumbe del precio de los commodities. Por eso implementamos planes para los pequeños productores.
–Hablemos de las declaraciones juradas anticipadas de importación. Se dijo que, para obtenerlas, gestores en la secretaría cobraban peajes del 10 o 15%.
–Yo tuve la suerte de hacer una maestría en Londres en una universidad prestigiosa en 2008, donde entré a una clase supuestamente de Desarrollo Económico. Ahí se les explicaba a alumnos provenientes de diferentes países en qué consistió el proceso de industrialización en América latina. Y la profesora lo que dijo fue: "Cada vez que el Estado quiere tener una política de desarrollo industrial con ciertos instrumentos de comercio exterior, genera corrupción". ¡Como si fuese una ley! Eso se enseñaba en la universidad a un montón de gente, para ir formándoles un rechazo a cualquier política que tenga un Estado en defensa de su industria.
-Pero más allá de los principios, que pueden ser correctos, ¿no pudo haber ocurrido que alguien de la Secretaría pidiera lo indebido?
-Cada vez que a mí me tocó escuchar algo de esto–que fueron pocas veces- nadie me trajo un dato concreto. Es parte del intento de deslegitimar a un gobierno para evitar que se tomen políticas que favorecen determinados objetivos y van en contra de otros.
-¿Qué le parece Miguel Braun como secretario de Comerio?
-Lo que yo estoy viendo es una desarticulación absoluta de las funciones que tenían como objetivo evitar los abusos de los formadores de precios. Se discontinuó el requisito de que las empresas presenten información sobre sus precios mensualmente, con el argumento de que eso era muy intervencionista. Se redujo la cantidad de artículos de Precios Cuidados. Se echaron a los inspectores que relevaban los precios en los supermercados. Se redujo la planta de empleados del programa Consumo Protegido de más de 100 a 20. Se está eliminando el rol de la Secretaría de Comercio. Esto obviamente es consistente con la lógica de la política del gobierno de Macri y el rol que le pretende dar al Estado en la economía.
-La última: circula el mito de que usted fue tenista profesional. Y que hasta llegó a jugar Roland Garros.
-Sí, es un mito que creó un diario que publicó un perfil mío. Ahí hubo un problema de interpretación: yo amo el tenis, pero nunca tomé una clase en mi vida. En un momento me anoté en unos torneos que tenían tanta onda que los organizadores les ponían nombres de ATP. Entonces, efectivamente jugué Roland Garros, Dubai, el US Open. Pero debajo de la autopista.
–Dejamos acá.
Historia clínica
Augusto Costa
Edad: 41
Ocupación
Ex secretario de Comercio
Observaciones
Muy bien dispuesto a hablar de todos los temas
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