Ante la visita de diputados de la oposición, trasladan a un neuropsiquiátrico al exmilitar que cumple una huelga de hambre
El excabo Julio Flores lleva 45 días sin recibir alimentos y reclama que la Justicia le otorgue la prisión domiciliaria; por la noche, tras la presión de los legisladores, fue derivado al Hospital Militar de Salta
- 4 minutos de lectura'
Durante varias horas, la familia del exmilitar Julio Narciso Flores, que desde hace 45 días cumple una huelga de hambre en una unidad penitenciaria en la provincia de Salta, no tuvo noticias de su paradero. El excabo de la Fuerza Aérea reclama que la Justicia le conceda la prisión domiciliaria y, sin ninguna comunicación previa, fue trasladado sorpresivamente a un hospital neuropsiquiátrico de la capital salteña. La decisión fue cuestionada duramente por su familia.
El traslado intempestivo se produjo el mismo día en que Flores iba a recibir en su celda del Complejo Penitenciario Federal III de General Güemes, en Salta, a los diputados nacionales Alberto Assef (UNIR), Victoria Villarruel (La Libertad Avanza), Francisco Sánchez (Pro) y Carlos Zapata (Ahora Salta), que viajaron para conocer su situación.
La medida fue ordenada por la jueza María Claudia Morgese Martín, presidenta del Tribunal Oral Federal N° 5 de San Martín, quien en las últimas horas conversó en forma virtual con Débora Flores, una hija del exmilitar que se encuentra en Buenos Aires. “Me dijo que lo llevaron para hacerle unos estudios. Pero no es el lugar adecuado, porque mi papá no está loco”, reveló Débora a LA NACION.
Al no poder visitar a Flores en la unidad penitenciaria, los diputados se dirigieron al Hospital Neuropsiquiátrico Dr. Miguel Ragone y, tras reunirse con el director y el abogado del nosocomio, mantuvieron un encuentro con el detenido. Al llegar la noche, tras la presión de los legisladores, el exmilitar fue derivado al Hospital Militar de Salta.
Asseff dijo a LA NACION que en el establecimiento neuropsiquiátrico no se le practicó ningún estudio al detenido “porque no es un paciente psiquiátrico”. Explicó que las propias autoridades de la institución enviaron al tribunal una petición de pronto despacho “para que se ordene su traslado al Hospital Militar o al que corresponda por su estado clínico”. El tribunal judicial accedió, finalmente, al pedido.
Sigue en huelga
Flores, de 64 años, perdió 13 kilos desde que comenzó la huelga de hambre el 21 de junio y, según advirtió su familia, presenta dificultades para trasladarse.
“Lo vimos muy angustiado a Flores. Nos dijo que va a mantener la huelga de hambre hasta que ordenen la prisión domiciliaria, porque lleva más de siete años encarcelado por una condena que no está firme y no guarda relación con la responsabilidad que él tenía”, dijo el diputado de Juntos por el Cambio, que preside la Comisión de Defensa en la Cámara baja.
A Flores le imputaron 26 casos de privación ilegítima de la libertad por casos producidos cuando tenía 19 años, cuando era cabo, y la pena recibida es seis veces mayor que la aplicada en el Juicio a las Juntas al brigadier Orlando Ramón Agosti, el jefe de la Fuerza Aérea durante los años más duros de la dictadura militar, que fue condenado a cuatro años y seis meses de prisión.
“Hicimos una visita humanitaria a una persona que está siendo afectado en sus derechos humanos básicos. Son los derechos humanos de los que no se habla, en un país que se proclama campeón de los derechos humanos”, resumió Asseff.
Anticipó que los diputados concurrirán el lunes al Tribunal Oral Federal N° 5 de San Martín para plantear que en el caso de Flores hay una violación a los derechos humanos y también un incumplimiento de la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, ratificada por la Argentina.
La huelga de hambre fue una medida extrema adoptada por el excabo de la Fuerza Aérea, para reclamar que le autoricen poder cumplir la condena en su casa, con su familia.
Otras noticias de Fuerzas Armadas
Frente al símbolo de la Armada. La vicepresidenta Villarruel y el ministro Petri compartieron la llegada de la Fragata Libertad, pero sigue la frialdad
Una deuda de $90.000 millones. En medio de una grave crisis desplazan al presidente de la obra social de los militares
Diferencias en la política militar. “Victoria Villarruel tiene una agenda, pero el ministro de Defensa soy yo”, afirmó Luis Petri
Más leídas de Política
Por tiempo indeterminado. El Gobierno aplicó una severa restricción a Di Zeo en medio del enfrentamiento con Bullrich
Solo en Off. La elegante y “liberal” venganza del despedido embajador Lagorio
Interna sin fin. La estrategia del Gobierno para reducir a Villarruel a “tocar la campanita” en el Senado
Con acusaciones cruzadas. Elecciones en la DAIA: un empresario amigo de Milei enfrenta a un joven dirigente comunitario