Reclamos al Gobierno y duras críticas a la Justicia en el homenaje a las víctimas de la AMIA
LA NACIONInés Beato Vassolo
A las 09.53 comenzaron a sonar las sirenas en todas las computadoras de quienes asistieron al acto virtual en conmemoración del 26 aniversario del atentado contra la AMIA, bajo la consigna "Que la Justicia no se lave las manos".
En un emotivo video, transmitido en vivo, la Asociación Mutual Israelita y la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) recordaron a las 85 víctimas del atentado y reforzaron el pedido de justicia, una vez más. La transmisión incluyó un discurso del presidente de la AMIA, Ariel Eichbaum, del expresidente de España, Felipe González, y mensajes de familiares de las víctimas.
"No sabemos si el mundo volverá a ser igual tras la pandemia. Sin embargo, hay algo que hace 26 años sigue exactamente igual. Desde el 18 de julio de 1994 a las 09.53, el tiempo de la Justicia está detenido", fueron las primeras palabras de Eichbaum.
Además de insistir en el pedido de justicia y el avance en la resolución de la causa, el presidente de la asociación israelita hizo referencia a la reciente designación del fiscal Julio Miranda –como nuevo integrante de la unidad de investigación del atentado–, a la renuncia del juez Rodolfo Canicoba Corral –a cargo de la causa– y a la no resolución del caso Nisman.
"El ritmo lento y cansino del Tribunal Oral Federal Número 3 atenta contra las aspiraciones de justicia de toda sociedad", dijo Eichbaum, quien calificó a los 26 años de impunidad como una "enfermedad que debilita cualquier democracia". Allí también pidió "acciones concretas contra Hezbollah" y agregó: "Pedimos a las autoridades nacionales que extremen sus esfuerzos políticos y diplomáticos para que las capturas internacionales sigan vigentes en Interpol y para que la comunidad internacional colabore con el reclamo argentino de justicia, para que esto no ocurra más. Y si uno de los acusados del crimen de 85 personas viaja afuera de Irán que sea inmediatamente detenidos y puestos a disposición del juez y fiscales de la causa".
En esta línea, el presidente de la AMIA hizo un llamado especial a las "repúblicas hermanas de Brasil y Uruguay", para que tomen acciones contra Hezbollah en la zona de la Triple Frontera, donde, según dijo, la organización "sigue operando fuertemente, en particular en la frontera con la provincia de Misiones".
Eichbaum celebró la continuidad, al día de hoy, del Registro Público de Personas y Entidades Vinculadas a Actos de Terrorismo (Repet), en el que el gobierno de Mauricio Macri incluyó a Hezbollah.
En lo que respeta a la asignación de un nuevo fiscal, Julio Miranda –elegido por el Procurador General Interino Eduardo Casal–, a la unidad que lleva la causa el atentado, Eichbaum cuestionó que haya sido nombrado con dedicación de tiempo parcial. "Va en sentido contrario a la dedicación que realmente se requiere, que es absoluta", dijo el miembro de la comunidad judía.
Seguido, el presidente de la AMIA manifestó la preocupación acerca de la renuncia del juez Canicoba Corral, y que ello pueda implicar que la causa quede vacante, sin un juez a cargo: "La causa de la AMIA no puede quedar sometida a los vaivenes de jueces subrogantes, eso sería motivo más para que continúe estancada. Pedimos a los tres poderes que extremen sus esfuerzos y los mecanismos correspondientes para que la causa tenga un juez a cargo de forma definitiva".
El juez Canicoba Corral declaró, dijo ayer, en diálogo con Radio con Vos que "salvo que invadamos Irán" no habrá forma de juzgar a los exfuncionarios iraníes acusados de haber participado en el atentado a la AMIA.
Como era de esperar, Eichbaum recordó al fiscal Alberto Nisman y dijo que, desde la comunidad israelí, esperan "mucho" del fiscal Eduardo Taiano y el juez Julían Ercolini –a cargo del seguimiento de la causa–. "El país exige que estén a la altura y esclarezcan el caso", afirmó el titular de la AMIA y señaló, además, que es "inconcebible que en este caso no se pueda saber la verdad".
Participación del expresidente de España
El acto contó con las palabras del expresidente de España y "ferviente defensor de la paz" –como lo calificó la voz en off que condujo la ceremonia–, Felipe González, quien estaba en su cargo cuando ocurrió el atentado, en 1994.
"Al no saber, al cabo de tantos años, qué fue lo que pasó, el dolor aumenta y no puede ser alimentado con el olvido. Hay que mantener la memoria y la solidad, el apoyo a la comunidad golpeada por el terror", expresó González.
El expresidente español se respaldó a la comunidad judía y les aseguró: "Cuentan con mi solidaridad y mi afecto".
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