Alivio en Brasil porque Milei frenó antes de aludir directamente a Lula da Silva
En la cancillería brasileña descartaron una escalada en el conflicto, porque el Presidente no aludió en su discurso a “la relación bilateral”
- 4 minutos de lectura'
BRASILIA.– Después de una semana de tensión, el domingo trajo alivio para la relación entre Brasil y Argentina. Javier Milei esquivó una escalada en la crisis entre los gobiernos de ambos países al evitar ataques directos contra el presidente brasileño, Lula da Silva, durante su discurso en Santa Catarina, un escenario que hubiera agudizado el deterioro en la relación, según evaluaron fuentes del Gobierno de Brasil consultadas por LA NACION.
“El escenario podría haber sido peor, no hay dudas”, se sinceró una alta fuente del palacio de Itamaraty, sede de las relaciones exteriores brasileñas, ante la consulta por la participación del presidente argentino en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC).
En el sur de Brasil, adonde llegó el sábado invitado por la familia Bolsonaro, Milei lanzó críticas contra el socialismo y aseguró que su aliado, el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022), es un “perseguido” de la justicia brasileña.
“[Milei] No habló de la relación bilateral ni se refirió al Presidente [Lula da Silva]. No hay nada que responder”, dijo la misma fuente brasileña, descartando la necesidad de una reacción oficial a la participación en la CPAC.
La diplomacia brasileña había prometido reaccionar con firmeza a un eventual discurso agresivo del presidente argentino, inclusive con el llamado a consultas del embajador de Brasil en Buenos Aires, Julio Bitelli.
El mandatario argentino evitó el domingo lo que más se temía: referencias directas a Brasil y ataques a Lula.
La mención más nítida fue justamente para defender a su “amigo” y anfitrión en la cumbre conservadora, a quien presentó como una supuesta víctima del aparato judicial.
Milei, que entró al escenario de la CPAC como una estrella de rock y abrazó efusivamente a Bolsonaro, se contuvo en un momento clave.
La platea, preparada para escuchar su prédica contra el socialismo y los “males” de gobiernos de izquierda, comenzó a corear “Lula, ladrón tu lugar es la prisión”. El presidente argentino, invitado tácitamente a sumarse a la arenga, no despegó la vista de su atril mientras acomodaba las hojas con su discurso. Posiblemente, su alternativa para evitar mostrar su complicidad.
Mientras Milei se pega a Bolsonaro como su principal socio en una suerte de liga regional de la ultraderecha que se congregó en Santa Catarina, el presidente brasileño, inhabilitado políticamente hasta 2030 por haber proferido ataques al sistema electoral durante una reunión con embajadores en 2022, se encuentra cada vez más cercado por la justicia brasileña. Algunos de sus aliados de primera hora, inclusive, consideran la cárcel como su destino inevitable.
La policía pidió el jueves que Bolsonaro sea acusado en una investigación por apropiación ilegal de joyas millonarias recibidas de gobiernos de Medio Oriente durante su administración, regalos de Estado que en parte fueron vendidos en Estados Unidos como si se tratase de ítems personales.
El expresidente de Brasil enfrenta también una investigación policial por haber adulterado certificados de vacunación contra el coronavirus para ingresar a Estados Unidos en diciembre de 2022.
Y la investigación más sensible tiene que ver con el ataque a las sedes de los tres poderes en Brasilia el 8 de enero de 2023, episodio por el que el expresidente derechista está siendo investigado como autor intelectual, con pruebas que lo comprometen como parte de una trama para incentivar a militares a subvertir el orden luego de la derrota en las urnas ante Lula, en octubre de 2022.
En el último caso, la policía está cerca de concluir la investigación y se encamina a pedir ante la procuraduría general de la República la imputación de Bolsonaro como autor intelectual de un intento de golpe de estado, proceso a ser juzgado por el Supremo Tribunal Federal brasileño y capaz de llevarlo a la cárcel en un plazo no muy lejano.
“El discurso ni llegó a ser tibio, y preservó a Lula”, destacó otra fuente del Gobierno brasileño, ponderando la ausencia de un tono belicoso hacia el Palacio presidencial del Planalto.
Lo peor se evitó. Pero la visita de Milei al sur brasileño, la víspera de una nueva cumbre del Mercosur en Asunción, donde será representado por la canciller Diana Mondino, deja sin embargo heridas y suma malestar para la relación con Brasil, su principal socio regional.
“El hecho de haber ido a Santa Catarina y no a la cumbre del Mercosur es lamentable”, admitió con fastidio un diplomático brasileño.
Más leídas de Política
La reacción de la vice. Sorpresa y conmoción de Villarruel por las críticas de Milei
Negociación caliente. La kirchnerista Lucía Corpacci sumó su firma al pliego de Lijo y el juez está un paso más cerca de la Corte
"Así son los zurdos". Maduro volvió a insultar a Milei, lo acusó de desfinanciar a las universidades y el Presidente le respondió
"Boliche clandestino". Piden la devolución del edificio que se le había cedido a la Universidad de Madres de Plaza de Mayo