Coronavirus en la Argentina: alentado por los datos de contagios, Axel Kicillof evalúa una mayor apertura
El gobernador se mostró optimista por la evolución de la pandemia y cree que en ciertas zonas se pudo haber superado el pico
LA PLATA.- El gobierno de Axel Kicillof analiza pasar del modelo de cuarentena a un modelo de aperturas quirúrgicas y finalmente a un distanciamiento con protocolos estrictos en el AMBA, cuando se confirme un descenso sostenido de contagios de Covid-19 por al menos tres semanas consecutivas más.
El gobernador Axel Kicillof se mostró optimista por la evolución de la pandemia en territorio del Gran Buenos Aires. "Pese a todos los pronósticos sombríos que teníamos, la provincia no saturó el sistema de salud", expresó. "En algunos lugares probablemente ya hayamos superado la etapa peor. Pero no podemos bajar los brazos", pidió.
"En el AMBA hay una tendencia a la caída en las últimas tres semanas, hay que ver si se consolida", dijo el jefe de Gabinete, Carlos Bianco.
En caso de consolidarse esta baja, la idea es salir muy paulatinamente del aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) en el Gran Buenos Aires para comenzar a transitar hacia mayores aperturas, con protocolos intensos en cada actividad. No será inmediato. "No será que un día suene la corneta y se acabó", graficó el gobernador.
El ASPO está prorrogado hasta el 10 de octubre. No es de esperar que el 11 esté todo librado a protocolos en el Gran Buenos Aires, pero se evaluará comenzar a flexibilizar de manera "quirúrgica", si se mantiene la baja de contagios en el primero y segundo cordón. "Para tomar definiciones trascendentes en el cambio de etapa, debe darse una evidencia fuerte, sostenida y significativa de la cantidad de casos", dijo el ministro de Salud, Daniel Gollán.
"Tenemos buenos indicadores. Pero debemos esperar más tiempo a que se consoliden esos indicadores", expresó durante el último informe epidemiológico brindado a la prensa.
"Nosotros decimos: si en dos o tres semanas se consolidara esto, uno podría eventualmente empezar a salir del criterio de cuarentena para ir hacia un criterio de protocolos intensos con una inmovilización de base", dijo Gollán. Recordó así que las clases seguirán suspendidas, y también estarán limitados los movimientos de personas en aglomeraciones. "No se puede lanzar como si ya todo estuviera bien", advirtió Gollán. "La idea es ir haciendo equilibrio entre ir abriendo actividades en forma quirúrgica y, si vemos que descienden los casos, ampliar esas actividades y pasar a una etapa de protocolos. Lo iremos evaluando los próximos meses", expresó el ministro de Salud.
"No vamos a tomar medidas por una semana o diez días que las cosas aparentemente vienen bien. No vamos a generar una situación de incertidumbre", advirtió.
La semana que pasó pareció consolidarse una tendencia en baja aún más acentuada en todo el territorio, con dos días en torno a los 5300 nuevos casos diarios. Hubo incluso días de 3600 casos, hacia el inicio de la semana que pasó. Ese número permitió esperanzarse a las autoridades: entienden que podrán registrarse mayores aperturas por microrregiones cuando la provincia promedie los tres mil casos diarios.
Pero aún no son números sostenidos ni consolidados, ya que hacia el fin de semana hubo dos días en los que el registro volvió a subir en torno de los 6000 casos diarios.
También se considera que hay una rotación en la velocidad de contagios desde el AMBA hacia el interior. Por eso esperan a que se consolide una baja en el primero y segundo cordón en los próximos quince días antes de hacer nuevos anuncios. Mientras, se espera un descenso más marcado en la ocupación de unidades de terapia intensiva en el AMBA.
¿Pico superado?
"En la provincia de Buenos Aires seguimos batallando -expresó Kicillof-. Todavía la pandemia está: ahora hay más riesgo en el interior. Ya vemos el horizonte, donde podemos encontrar respuesta y salida".
Pero alertó: "La pospandemia no va a ser que un día suene la corneta y se acabó. Va a ser una transición. Una construcción que tenemos que hacer entre todos".
Mientras, el viceministro de Salud, Nicolás Kreplak, pidió ser cautos: "Esperamos que baje mucho y vemos", es su posición. "Si nosotros seguimos abriendo un poquito más cada vez que mejoran los números, nunca vamos a reducir los contagios", advirtió.
Kreplak se muestra más optimista a largo plazo. Habló de las fiestas de fin de año. "Los casos vienen bajando. Si hacemos el trabajo bien, llegaremos en mejores condiciones a las Fiestas", expresó. Pero ya anunció que se recomendará hacer reuniones al aire libre, en burbujas sociales entre los que se consideran contactos estrechos. Pese a que se espera poder celebrar a fin de año, nadie quiere cantar victoria en este territorio: ya suman 12.500 las personas fallecidas. La letalidad va en aumento y ahora está en torno al 3,20.
Los números de muertos apenas se empezaron a actualizar el fin de semana que pasó. "Cuando se produzca el último fallecimiento por Covid-19 vamos a seguir recibiendo informes de muertos por dos meses más", reconoció el ministro de Salud.