Elecciones 2019. Lágrimas, euforia y ansiedad: Alberto Fernández recordó a Néstor Kirchner al votar

Alegría. Lágrimas. Euforia. Aunque el ritual electoral de Alberto Fernández fue un calco casi perfecto de su rutina en las PASO, esta vez quedó teñido de emociones. Antes de votar en la mesa 68 de la UCA, en Puerto Madero, el candidato a presidente del Frente de Todos, recordó emocionado al expresidente Néstor Kirchner, en el aniversario de su muerte.

"Significa mucho (este día). Yo creo en Dios. Mucho antes de ser candidato había arreglado con Alicia Kirchner el día 20 de mayo ir a Santa Cruz a visitar el mausoleo, y el día 18 de mayo Cristina anunció esto (su candidatura). Y mi primer salida fue verlo a Néstor, y ahí le prometí lo que le tenía que prometer. Bueno, llegó hoy", dijo con la voz entrecortada, mientras lagrimeaba, al pasear a su perro collie Dylan. Fue acompañado por el legislador porteño Leandro Santoro, que sostenía en sus manos un libro del propio Fernández sobre la vida del exmandatario, titulado "Políticamente incorrecto: razones y pasiones de Néstor Kirchner".

Más tarde, después de votar, diría: "Donde esté, sé que Néstor me está ayudando". Y se quebró otra vez.

"¡Se siente, se siente, Alberto presidente!", coreaban afuera del departamento donde reside Fernández, en Puerto Madero. Seguidores, militantes, fanáticos y curiosos, se acercaban para sacarse fotos con Fernández, saludarlo y hasta entregarle cartas.

Uno de ellos es Enzo, un chico de 20 años que vive a 7 cuadras del lugar. Vino por curiosidad. Contento, logró su foto con Fernández. Una mujer joven y rubia, con su hijo pequeño en brazos, sonreía al tomarse una imagen con Fernández. Otra de ellas era Carla, integrante de Hipotecados UVA, que se acercó para dejarle una carta al candidato. "Quiero que sepa lo urgente que es nuestro problema, que afecta a muchas familias", expresó.

Un tumulto de periodistas y seguidores rodeó constantemente al candidato, que por momentos se mostró molesto. "Déjenme pasear a Dylan, por favor! Déjenme ser un tipo común. Espero poder seguir paseándolo", lanzó fastidioso, aunque no tardó en disculparse y agradecer a los medios.

Entre el tumulto, resaltaba la presencia del "canillita de Alberto", Guido Miranda, una cábala para Fernández. En las primarias, pasó a saludarlo por su departamento.

Aunque estaba previsto que Fernández votara a las 9, recién a las 11.50 llegó a la UCA en su Toyota Corolla gris, acompañado por su pareja, la actriz y periodista Fabiola Yánez, por Santoro y por su vocero, Juan Pablo Biondi. Al igual que en las primarias, cambió el look deportivo con jean y zapatillas del paseo a Dylan, por un traje.

"Bravo! Bravo! Vamos Alberto, vamos!", exclamó un grupo de militantes allí presentes, que estallaron en un largo aplauso. Uno de ellos bañó a Fernández y Yáñez en pétalos de rosas, antes de ingresar a la UCA. Un hombre disfrazado del Papa Francisco fue el primero en saludar a Fernández.

"Ellos y nosotros"

Después de hacer una breve fila en su mesa, Fernández depositó el sobre en la urna. Pocos minutos le alcanzaron para votar. "Tenemos que tomar esto como una jornada histórica e iniciar el tiempo que se viene con tranquilidad. Se terminó el nosotros y el ellos", dijo, después de votar.

Las palabras del candidato se veían constantemente interrumpidas por los cantos de la militancia. "¡A volver, a volver, vamos a volver!", cantaban. "¡Presidente, Alberto presidente!", exclamaban, mientras formaban la tradicional "V" peronista con sus dedos. Algunos militantes se cruzaron con otras personas que iban a votar, que los acusaban de "ladrones" y "corruptos".

Detrás de un vallado montado en la puerta de la UCA, Fernández pidió "transitar con tranquilidad" lo que se viene después de las elecciones. Tenía un micrófono en la mano y había parlantes para difundir sus palabras. Una postal pocas veces vistas en un día electoral.

"Tenemos que tomar esto como una jornada histórica e iniciar el tiempo que se viene con tranquilidad. Se terminó el nosotros y el ellos", dijo el candidato del Frente de Todos y agregó: "Cuando pase la elección vamos a hablar más tranquilos".

Fernández aseguró: "Estamos en una enorme crisis y tenemos que tener responsabilidad por lo que viene" y le respondió al jefe de Gabinete, Marcos Peña, respecto de que tal vez haya que esperar al escrutinio definitivo para saber quién es el ganador: "No me parece afortunado lo que dijo".

Cuando lo consultaron sobre si confiaba en la empresa que realiza el escrutinio, Fernández sentenció: "Confiemos que las cosas las hagan bien, aunque sea al final las hagan bien".

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