Alberto Fernández se toma el día por el nacimiento de su hijo y delega la marcha del gobierno en un gabinete en crisis
Instalado en el Otamendi, el Presidente no se tomará licencia formal, cuando crecen la preocupación por la inflación y los rumores sobre cambios de ministros
- 4 minutos de lectura'
“Me voy para el sanatorio, Fabiola está con la panza endurecida”, le avisó Alberto Fernández al secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello. Eran las 23.30 del domingo y se iniciaba el proceso que decantó en el nacimiento, dos horas después, de Francisco, el hijo de la pareja presidencial.
Al igual que Vitobello, los funcionarios que rodean al Presidente esperaron a las 7 de la mañana para saludarlo. “No quise quedar como chupamedias”, reconoció entre risas un dirigente muy cercano que decidió esperar un par de horas para hacer llegar su mensaje, atento a que el Presidente decidió tomarse el día y delegar en el jefe de gabinete Juan Manzur las actividades de la jornada.
Entre los buenos deseos y saludos vía WhatsApp para los flamantes padres, los ministros del gabinete evitaron hacer comentarios sobre la coyuntura que acompaña el nacimiento: la inflación que no da tregua y los rumores de cambios en el elenco ministerial, con una fecha clave: el miércoles, cuando se conozca vía Indec el índice de la inflación. “Hoy tengo que pensar en cambiar pañales”, le dijo el Presidente a radio 10, desde la clínica y como modo de desmentir cambios inminentes.
También es un tema ineludible la interna con el cristinismo. Hoy, la vicepresidenta les hizo llegar a Fernández y Yañez un saludo -breve y sin demasiada calidez- que apareció después de las 11 junto con el envío de un ramo de flores al sanatorio. “No tenemos que permitir que nuestras diferencias le den paso a la derecha, estoy muy seguro de que vamos a hablar con Cristina”, dijo el Presidente en otro tramo de la entrevista radial luego de agradecer a su vice por los saludos.
“Si pasa el 6 por ciento estamos al horno”, contó uno de los ministros que sí saludó al Presidente ni bien se enteró de la noticia. Sin menciones a temas ríspidos, lo felicitaron vía Twitter el propio Manzur, el embajador en Brasil, Daniel Scioli, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa y el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, integrante de La Cámpora y uno de los nombres que se menciona cuando se habla de cambios (de nombres y cargos) en el gabinete.
Mientras decide desde el cuarto piso del sanatorio Otamendi quiénes serán los padrinos -cuentan que sus dos hermanos y los de Fabiola Yañez son los principales candidatos- el Presidente “monitorea” una gestión jaqueada por la espiral inflacionaria y los roces con la vicepresidenta. “Lo que desordena todo es el quilombo político. La inflación va a dar mal, ya lo sabemos, pero en estas dos semanas de abril dejó de subir y hay muchos índices que dan bien”, intentan consolarse muy cerca del despacho presidencial.
Mientras definen como “necesario” un cambio de nombres, tres miembros del Gobierno apuntan a Agustín Rossi, aunque nadie está seguro del lugar que podría ocupar el exministro de Defensa. “Todo el mundo lo quiere a Rossi adentro y no le podés dar cualquier cosa”, reflexionaba un albertista destacado, que aprovechaba para criticar la tarea de Martín Soria al frente del Ministerio de Justicia.
“¿Cómo hacés para cambiar el gabinete sin tocar la economía?”, reflexionaba otro ministro, que ve “complicada” la situación de Martín Guzmán, el ministro de Economía al que apuntan todos los cañones del cristinismo. “Alberto no tiene muchas opciones para ese lugar”, reconocía un incondicional, mientras el nombre de Rossi sigue sonando para llegar al gabinete “en breve”.
“Rossi puede ocupar un cargo, pero lo importante no es dónde”, destacaba otro funcionario, para quien no sería necesario desplazar a De Pedro y pretender ubicarlo en Justicia, como aseguraban desde otras usinas oficiales desde hace días.
Otras noticias de Alberto Fernández
Más leídas de Política
Análisis. Milei, entre Lula y el Gordo Dan
"Guardia pretoriana". Preocupación en los intelectuales por la idea de crear “un brazo armado libertario” para defender al Gobierno
"Son torturadores profesionales". Milei dio una entrevista en EE.UU. con fuertes críticas a periodistas argentinos
Está en la cárcel de Paraná. Detuvieron a Urribarri, exgobernador de Entre Ríos condenado por corrupción