Turismo en el Caribe: recalculando después de Irma
Viajes cancelados, paquetes reprogramados y un panorama complejo para los próximos meses; los cruceros cambian de rumbo
El huracán Irma modificó el mapa turístico del Caribe. Por un buen tiempo, quizás varios meses, muchas de las islas paradisíacas, con playas de arenas blancas y aguas azules, que fueron devastadas por vientos sin precedentes, lluvia e inundaciones, estarán abocadas a la reconstrucción.
Todavía en proceso de evaluación de daños, de ayuda humanitaria a los que perdieron todo, de evacuaciones masivas, ya llegará el momento de pensar el nuevo golpe que sufrirán por la inevitable pérdida de turistas. En la mayoría de estos territorios el turismo representa el motor de la economía.
Casas y resorts completamente destruidos, palmeras tiradas y deshojadas, playas sucias, animales muertos, puentes rotos, falta de energía, comunicaciones cortadas y caminos bloqueados son las actuales postales de muchas islas del añorado Caribe.
Las sitios más afectadas por el huracán son el norte de Cuba, St. Martin, Puerto Rico (especialmente las islitas de Culebra y Vieques), Barbuda, St. Barths, Anguila, Turcos y Caicos y las islas Vírgenes Británicas y Norteamericanas.
El Observatorio Terrestre de la NASA mostró fotos áreas que comparan cómo se veían las Islas Vírgenes el 25 de agosto y luego del ciclón, el 10 de septiembre. De manchones de intenso verde por la exuberante vegetación pasaron a ser superficies marrones, sin rastros del antiguo color.
¿Qué pasa con las reservas?
Algunos pasajeros preferirán directamente cambiar de destino. La situación es mucho más sencilla para los que compraron un paquete o hicieron las reservas mediante una agencia argentina, que en una puntocom extranjera sin presencia local.
Las agencias de viaje trabajaron de manera frenética durante toda la semana reubicando pasajeros y reprogramando salidas.
"Estuvimos reprogramando viajes, pero es mucho más sencillo cuando se trata de paquetes completos porque les ofrecemos otros destinos. Cuando, por ejemplo, el pasajero compró el aéreo con millas y los servicios terrestres con nosotros es complicado, porque dependemos de lo que ofrezca la aerolínea", explica Andrea Caliva, gerente de ventas de Les Amis.
Las aerolíneas, en general, ofrecen cambio de fecha o de destino sin penalidad para las salidas programadas hasta alrededor del 20 de septiembre, según cada empresa hacia Santo Domingo, Punta Cana, San Juan, La Habana, Cuba, Miami, Fort Lauderdale y Orlando. Copa, por ejemplo, permite cambiar de destino si se tenía pasajes hasta el 15 de diciembre a St. Martin y Santa Clara, en Cuba, los destinos más afectados que no retomarán sus operaciones en el corto plazo.
Los pasajeros con vuelos cancelados, sí pudieron pedir la devolución del importe pagado.
En estos casos lo importante es cuanto antes tomar la decisión de reprogramar el viaje. Mientras más tiempo se demore, menos posibilidades de recibir reembolsos por reservas hoteleras perdidas. Puede suceder que el hotel esté operable, pero el pasajero no pueda llegar por complicaciones con los vuelos.
"En Almundo contactamos a los pasajeros que tenían previsto viajar durante la semana para ofrecerles las mejores opciones dentro de lo que se puede. Unos pasajeros que se casaban y se iban al Caribe, finalmente les reorganizamos el viaje a Bariloche", cuenta Francisco Chiari, director regional de ventas de Almundo.com.
En TTS Viajes también contactaron a los pasajeros que tenían previsto viajar a las zonas afectadas para cambiar el destino. "Muchos pasajeros cambiaron Miami por Nueva York, donde cada vez es más difícil conseguir alojamiento para las próximas semanas", explica Margarita Maldonado del departamento de Calidad de la agencia.
También comenta que trabajan en asegurase que los hoteles brinden a sus pasajeros todos los servicios preestablecidos y si no es así, conseguir reintegro de las reservas. "Muchos hoteles ofrecen dejar crédito abierto para más adelante, pero a muchos pasajeros no les sirve. Por ahora es todo muy confuso, pero esperamos más comunicados de las cadenas hoteleras".
Por las islas
Hay que recordar que la temporada de huracanes en el Caribe se extiende entre el 1° de junio y el 30 de noviembre. Si bien, podría haber más huracanes, Irma, que alcanzó la categoría 5, fue uno de los sistemas más poderosos que se desarrollaron en el Atlántico en la historia.
St. Martin, la isla mitad holandesa, mitad francesa fue una de las más perjudicadas por el huracán. Del lado francés, los datos oficiales hablan de un 95% de destrucción. Del lado holandés, Mark Rutte, primer ministro de los Países Bajos, habló de enormes daños materiales.
Es muy posible que la actividad turística no se restablezca hasta el año próximo.
Los proveedores turísticos en la isla francesa/holandesa contemplan como mínimo entre tres y cuatro meses de inactividad. La cadena Sonesta Resorts Sint Maarten anunció que sus tres propiedades en la isla estarán cerradas hasta nuevo aviso y las reservas serán devueltas. Se estima que no abrirán antes de diciembre.
En la vecina St. Barths la situación es similar, con destrucciones masivas y daños estimados en 1200millones de euros.
El gobierno de Anguila informó en un comunicado que la infraestructura vital, como el hospital, el aeropuerto, los edificios de gobierno y los servicios públicos recibieron daños de moderados a graves. En Barbuda, según dijo el primer ministro, el 90% de los edificios fue destruido y la isla, totalmente devastada.
En Cuba, La Habana quedó bajo el agua, Varadero sufrió destrozos, pero los cayos fueron los más dañados, con un futuro incierto por delante. La mayoría de los hoteles fue destruida y los más perjudicados fueron los numerosos resorts que las cadenas Meliá e Iberostar tienen en Cayo Coco, Cayo Guillermo, Cayo Santa María y Jardines del Rey, con importantes daños en los lobbies y mobiliario. También se destruyó el puente que une los cayos con el resto de Cuba y se interrumpieron las comunicaciones. Un destino que tardará en reponerse.
A los pasajeros que tenían paquetes para ir a los cayos, con agencias especializadas en Cuba, por ejemplo, les ofrecen cambiar por otras playas cubanas que no fueron tan afectadas. Los hoteles de Varadero y La Habana poco a poco están recobrando la normalidad.
Cruceros: proa a otros destinos
Los cruceros que navegan por el Caribe, que son muchos, no sufrieron daños por el paso de Irma porque previendo la ruta del huracán se movieron hacia tierras y aguas seguras, pero los itinerarios sí están afectados.
Incluso Royal Caribbean y NCL destinaron barcos para evacuar turistas de las islas devastadas y llevar insumos básicos en St. Martin y St. Thomas.
Después de algunos días con salidas canceladas y puertos cerrados se reanudaron gradualmente las actividades. Las escalas previstas en las islas afectadas se redireccionaron a otros destinos que se mantuvieron a salvo de Irma. La Riviera Maya, en México, es uno de los más elegidos para los cambios. Punta Cana, en República Dominicana, y Bahamas, a pesar de que recibieron al huracán, no sufrieron daños considerables en su infraestructura y continúan sus actividades. El mar que se había convertido en desierto en Bahamas volvió a sus niveles habituales.
Ante este panorama, ¿qué hace un viajero que tiene sus vacaciones programados a algunos de estos destinos afectados? Por más que los aviones retomen sus operaciones y los hoteles reabran, se viajaría hacia un paisaje de desconsuelo y destrucción. En muchos casos será la única alternativa para no perder lo que ya se pagó. Y también una buena manera de ayudar a que las economías locales que se recuperan del desastre.