Hoy, miércoles 16, es el primer día en el que se puede visitar
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Buenos Aires es una ciudad repleta de arte. Desde su enorme talento graffitero hasta circuitos compuestos por una gran diversidad de museos en donde encontramos propuestas súper tradicionales así como las invitaciones más innovadoras que un amante de la cultura puede experimentar. Por eso es que el boom que generó la llegada de Imagine Van Gogh (¡agotó más de 200 funciones y se vendieron más de 50.000 entradas!) no sorprende, sino que hasta era lo esperable.
Si ya tenés tu entrada pero querés conocer un poquito más o si estás evaluando ir, acá te dejamos toda la información que necesitas sobre la muestra que recorrió el mundo y ahora llegó a la city porteña.
1. Una forma diferente de vivir el arte
La principal propuesta de Imagine Van Gogh es una experiencia inmersiva de la obra del artista neerlandés. Con enormes paneles alrededor del ambiente y un tótem gigante en el centro, al recorrerla uno se ve envuelto en los trazos, los colores y las texturas creadas por el exponentes del postimpresionismo.
En oscuridad total y ambientado con las composiciones musicales de Saint-Saëns, Mozart, Bach, Delibes y Satie, la muestra utiliza la tecnología Imagen Total©, creada en 1977 por el fotógrafo y cineasta Francés, Albert Plécy, y desarrollada por Annabelle.
2. ¿Hay limitación de tiempo?
Debido a la situación alrededor del COVID y en la búsqueda de permitir a los visitantes disfrutar de las imágenes, las entradas se venden en bloques de media hora. Sin embargo, una vez que ingresas podés quedarte el tiempo que desees.
Realmente la intención es que camines, observes, te sientes en el piso y las proyecciones también iluminen tu propio cuerpo. Y -desde nuestra experiencia durante el día de preapertura- entre una hora y una hora y media a a ser el tiempo que le dediques a la muestra.
3. Las entradas
Comprándolas directamente desde la página oficial, la muestra está abierta todos los días desde las 10.00 h hasta las 23.30 h. Hay solo dos tipo de entradas: general ($3.450) y pack familiar, dos adultos y dos niños ($9.200). Todavía quedan algunas entradas disponibles para febrero y varios días en marzo.
4. Algo más que sus obras
La muestra sucede en un único ambiente de La Rural (Pabellón Frers) y se proyectan las obras de sus dos últimos años de vida, entre 1888 cuando se traslada a Arles en el sur de Francia hasta su muerte en Auvers-sur-Oise en 1890. A estas imágenes además se suman cartas y fotografías, logrando así un portfolio de casi 200 obras y documentos del celebrado pintor.
5. Dónde la viste
Si sos fanático de las series de televisión y el cine, debido a su riqueza visual las muestras inmersivas de Van Gogh tienen su lugar dentro de la ficción. Imagine Van Gogh -la que se presenta acá en Buenos Aires- estuvo en Estados Unidos y Europa, pero también existen otras dos propuestas: Immersive Van Gogh y Van Gogh Alive. Desde Emily In Paris hasta el exitoso k-drama Melancholia, se trata de esa misma experiencia (pero con algunas diferencias entre sí).
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