¿Cómo sé que mi hijo está listo para dejar los pañales?
¡Buen día! ¿Cómo las tratan las vacaciones? Yo de a poquito voy retomando algunas actividades, entre ellas el blog de OHLALÁ! Sí, desde hoy me van a poder leer cada viernes en la web de la revista. Tenía muchas ganas de volver y tenemos tantos tópicos para hablar que no quise seguir dilatando la vuelta.
Antes de arrancar con el tema de hoy –control de esfínteres– les cuento un poco de los chicos. Camilo está enorme. A punto de cumplir dos meses ya supera los 5 kilos, pasa varias horas del día despierto, tiene unos ojos inmensos y una sonrisa irresistible. Cuando Julieta llega de la colonia corre a saludarlo, le dice “Camilito” y ya no está tan celosa como al principio. Igual él sigue siendo un sobreviviente diario a su hermana y presiento que va a seguir así algún tiempo.
El tema pañales viene verde aunque está encaminado. Les cuento un poco: hasta marzo Julieta hacía pis en el inodoro unas 3 veces por día pero desde que se enteró que estaba embarazada no quiso ir nunca más. Apenas se hace caca pide que la cambien y después de hacer pis se toca el pañal y avisa que “está inflado”. Desde hace unas semanas se arranca el pañal y pasea desnuda por toda la casa. Cuando le ofrezco ponerle bombacha acepta entusiasmada y al rato se hace pis encima y se ríe. Sus juegos preferidos son acumular cosas, hacer montañas de juguetes y trasvasar.
Como ya saben, soy una convencida de que “antes no es mejor” y que el control de esfínteres es un proceso evolutivo que se da de manera independiente en cada chico. Sin embargo, aunque creo que jamás hay que forzar el tema, podemos acompañarlos y darles herramientas e incentivos para que logren dejar los pañales.
Algunas claves:
*Los pañales no se sacan, se dejan.
*Los jardines no deberían tener el control de esfínteres como requisito para pasar de sala. No debería existir una “fecha límite”. Esa medida atenta contra la individualidad de cada chico y su proceso evolutivo. Muchas de ustedes me preguntan qué hacer con este tema y realmente no sé qué decirles. Yo particularmente iría a hablar al jardín explicando por qué no comparto la medida y en caso de que la negativa siga buscaría otra escuela. Siento que si son poco amorosos para acompañar a mi hijo en este proceso también lo serán cuando surjan otros temas.
*Algunas señales de que están empezando a controlar esfínteres: juegan con agua y con masa, les gusta trasvasar, avisan cuando se hicieron para que los cambien, no quieren que nadie toque sus cosas, rompen papeles.
*Forzar el proceso es contraproducente. Cuando el chico está preparado para dar el paso y se manifiesta en ese sentido es raro que tenga retrasos a futuro.
*Dejar los pañales en verano resulta más fácil para los adultos porque están con menos ropa y no les fastidia tanto mojarse. Sin embargo, los pañales no tienen por qué dejarse en verano. Da lo mismo si es invierno, primavera u otoño. No los forcemos a cumplir un calendario.
*Entre pelela o adaptador de inodoro yo siempre recomiendo adaptador ya que me parece que acortamos los pasos. Si no, se tiene que acostumbrar primero a la pelela y después al inodoro, no le encuentro sentido a sumar un paso. Hay adaptadores plegables súper económicos que son muy útiles para llevar en el bolso a todos lados.
*Dos libros para acompañar el proceso: Federico se hizo pis (Sudamericana), Qué tienes en tu pañal (Urano).
*Un incentivo: Juli ama los stickers y en su momento le propusimos pegar un sticker en el inodoro después de hacer pis y estaba chocha con esa idea.
En primera persona
Agustina Ramos Mejía está detrás de Look Connected. Hace un año ella compartió en las redes cómo fue el proceso por el que su hija Fini dejó los pañales. Hoy, después de haber pasado por todo el proceso afirma que “no hay que apurarlos. Si te toca en verano genial y sino te toca no pasa nada. El proceso depende de la madurez de cada chico y antes o después en algún momento todos hacen el click”.
Les comparto algunos de los tips que fue dando en sus posteos y les copio todos los links para que conozcan en detalles toda su experiencia. Soy una convencida de que conociendo otras historias podemos adquirir muchas herramientas para hacer nuestro propio camino.
Chau Pañales: primera parte (¿Está preparado?)
¡Chau pañales! O Eso estamos intentando con Fini. ¿Cuándo deberían dejarlos? Es muy importante seguir su madurez, no apurarlos y tener mucha paciencia.
A partir de los 2 años los chicos empiezan a tener percepción de sus deseos. Fini tiene 2 años y 3 meses. Hay tres etapas clave para estar atentas:
1) Dice Pipí/Popo cuando quiere hacer 2) Lo dice cuando se está haciendo. 3) Lo dice una vez que ya hizo
Fini a veces dice todas y veces ninguna pero últimamente se saca el pañal, le incomoda.
Chau Pañales: segunda parte (¿Cómo empezar? )
Hablarle con paciencia, sonrisas y emoción. Que ya va a poder hacer en el baño como los grandes, que cada vez que quiera nos avise.
Llevarlo cada una hora aprox al baño e intentar que haga sin forzarlo. Abrazarlo y si se asusta, tratar de no tirar la cadena frente a él.
Paciencia. Posiblemente el primer día se haga encima siempre. Traten de no retarlo/a, pero si explicarle. Por más que creamos que no cazan una, la cazan. Y entienden. Si los retamos mal, podemos inhibirlos!
Darles incentivos. Pueden ser figuritas para que pegue en la tapa del inodoro por cada vez que haga. Una pizarra con logros, y así todo lo que crean que pueda motivarlos.
Compras. Solo compré las bombachas (con buen algodón de Baby Cottons en un 2x1 en su outlet de Belgrano) y los pañales Pampers Pants. No compré ni pelela ni adaptador para el baño ni nada más. Por ahora. Les contaré si me hacen falta pero no para esta instancia.
Chau Pañales: tercera parte (incentivos) 4 incentivos para ayudarlos a dejar los pañales:
Juegos con plastilina y agua: los ayudan a desarrollar la idea de continencia y curiosidad por su Pipí/Pipo , según explican psicopedagogas. Y en @crianza_y_familia explican que es bueno hacerles pasar agua de un recipiente a otro. Si hacen sin volcar, están preparados.
Bombachas y calzoncillos divertidos, lindos, con dibujos. Dejarlos que ellos elijan cuál quieren ponerse.
Canciones y cuentos que hablen del tema.
Premios y mimos que los motiven para hacer en el baño.
Con Fini estamos usando: Figuritas para que pegue en la tapa del baño cada vez que hace. Y una pizarra con logros de @lo_logre.
Chau Pañales: cuarta parte (la noche)
El sacar los pañales NO se maneja con límites sino a través del juego y cuentos! A la noche es mucho más difícil. Como dice Claudia de @crianza_y_familia es mejor que estén bien preparados. Puede pasar tranquilamente 6 meses o más antes de sacárselos de noche.
Díganles que los despierten para ir y déjenles una luz en el baño prendida.
Darles un premio si se despiertan séquitos funciona. A mí me funcionaron bárbaro los premios incentivos con Fini. Cuando vean que se despierta al menos durante una semana con el pañal seco estaría listo para dejarlo.
No conviene volverse loca presionándolos y frustrándolos. ¡Solitos ellos van haciendo el click!
¿Alguna más acompañando a sus hijos en el proceso de control de esfínteres? ¡Nos encontramos la semana que viene! Las espero en Instagram y en Facebook para seguir hablando de crianza y compartiendo tips.
Debbie
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