Caviahue reestrena la temporada fría
El pueblo de nieve potencia su oferta con la apertura de un nuevo hotel justo al pie de las pistas
CAVIAHUE.- El doctor Aníbal Sarotto le pregunta al doctor Alejandro Tau cómo ve la cuestión. Analizan el panorama. "Está soplando fuerte", dice el doctor Luis Sarotto, hermano del primero, que se suma al conclave. Son las 8.44 y no podrían tener mejor punto de vista: un ventanal directo a los medios de elevación. Ellos son los primeros huéspedes del Grand Hotel. Los primeros en la historia ya que el lugar acaba de ser inaugurado, unas semanas después de lo previsto, en plena temporada invernal. El viento amaina y los médicos miran los últimos preparativos en las pistas. Salen del establecimiento a las 8.53. Siete minutos más tarde se sientan en una aerosilla y despegan.
Tau es oftalmólogo y cuñado de los Sarotto: está casado con la doctora Lydia Sarotto, también oftalmóloga. Todos integran un grupo de amigos, familiares y padres de amigos de sus hijos que viajaron juntos a pasar la semana. Les tomaron el gustito a los ski weeks. En 2014, eran 40 en el grupo; este año apenas superan los 20. "Nos divertimos igual", aclaran. Suelen elegir un centro de esquí cada temporada y este año repitieron Caviahue. Llegaron en caravana a esta villa de 800 habitantes que, en el noroeste neuquino, es considerada el único pueblo de nieve de América del Sur. De junio a septiembre, tal vez octubre, sus calles están cubiertas de nieve, al igual que los techos de las casas, los autos y, por supuesto, las pistas de esquí.
Los doctores usaron walkie talkies en la ruta y ahora los llevan a la montaña para coordinar puntos de encuentro y el horario del almuerzo. Viajan muy preparados. Aníbal, por ejemplo, cargó con las herramientas desde Buenos Aires por si tenían algún problema mecánico. "Es algo común entre los traumatólogos: reparamos también los fierros", asegura el doctor.
Todos esquían hace años, pero igual toman clases con los instructores del cerro. "Para quitarnos las mañas -dice Luis, cirujano general en la ciudad y motivador del grupo en vacaciones-. En el esquí siempre podés mejorar. Tenemos distintos niveles. El secreto está en que podés bajar con tus hijos, compartir un deporte, subir todos juntos a la montaña. Con el fútbol no se puede, con el tenis tampoco, porque hay mucha diferencia física según las edades."
"Los adolescentes de la familia quieren seguir viajando con nosotros; eso no es poco", agrega la doctora Carolina Llopis, dermatóloga. Aníbal es el responsable de filmar toda la aventura con su GoPro y Sergio Zibaitis, que no es médico sino diseñador, editará a la vuelta los videos para compartirlos durante el año y motivarse entre todos para la temporada siguiente. La rutina incluye ir al gimnasio dos meses antes de viajar, para ponerse en forma.
Esquiar desde el lobby
El Grand Hotel es la flamante apuesta de Compañía de los Andes, concesionaria del centro de esquí, y una señal del tipo de estándar que busca instalar la empresa: de alta gama. Ubicado en la base del cerro, el lugar propone salir esquiando casi desde el lobby. Ofrece servicio de guardaesquíes y está a metros de las dos primeras aerosillas. "Al huésped de montaña le interesa esquiar, comer y dormir. Son esos tres pilares. Después viene la recreación. Pero una mala ducha o mala gastronomía no te las perdonan", opina Gonzalo Carrea, convocado en mayo para el control de gestión y la puesta en marcha del hotel.
"Que los huéspedes no tengan que movilizarse cada día para esquiar, eso lo hace único. Y pertenecer a la misma empresa del centro invernal le agrega valor: retirás los pases en el lobby, tenés el guardaesquí, llegás primero a la montaña... Todo ayuda a aprovechar más la semana de vacaciones." Con 22 años de experiencia en hotelería, Carrea pensaba dejar atrás la "etapa nieve" de su carrera profesional después de comandar los principales hoteles de Las Leñas. Pero lo sedujo el proyecto en Caviahue. "Este es un público exigente en cuanto a servicio, pero más relajado que el de Las Leñas, especialmente a la hora de esquiar", comenta.
El hotel es de cuatro estrellas para unos 80 pasajeros, con un deck de 375m2 para los días soleados, muy buena gastronomía -su restaurante abre a la noche y está a cargo de la chef Candela Niz Wagner, también ex Las Leñas- y un spa en construcción.
La mayoría viene en plan semanal por la distancia del aeropuerto de Neuquén (a cuatro horas); no se ha desarrollado aún el concepto mini weeks, que es uno de los objetivos próximos. A 1650 msnm y rodeado de araucarias, el pueblo es uno de los de mayor crecimiento turístico en el país. El cerro tiene una veintena de pistas y la nieve siempre acompaña. El público esquiador empieza a requerir de medios de elevación más modernos, sobre todo cuando el viento inhabilita las sillas y todos se concentran en el primer sector de la montaña. Ubicado en una ladera del volcán Copahue, el centro se caracteriza también por asegurar la temporada hasta fines de septiembre, o más, debido a su nieve privilegiada. La superficie esquiable es de unas 1000 hectáreas.
Clima muy diferente
Para Mariano Padua la jornada fuerte empieza los miércoles. La gente llega en su gran mayoría los sábados, esquía fuerte de domingo a martes y después mira qué otras actividades hay. Él está a cargo de los paseos desde el mismo centro invernal. La propuesta por excelencia es ir hasta la Villa Termal de Copahue –desierta en invierno– con vehículos "oruga" en un trayecto que alcanza aéreas protegidas y puede ser extremo. No por nada se realizan históricamente en la zona entrenamientos pre-antárticos; el clima puede ser igual de duro. En pleno temporal suele ser una aventura extrema. Por eso, en general, se habilita el paseo sólo algunos días; los conductores son expertos en manejar esos camiones Hägglund de pasajeros también conocidos como Snowcat.
La caminata con raquetas de nieve, en cambio, se puede realizar en cualquier momento. En diez minutos desde la base uno queda inmerso en un bosque silencioso. En paseo es hasta la cascada del Valle del Jara, generalmente congelada: se forman puentes naturales sobre el arroyo y la actividad parece más simple de lo que es, pero los aductores quedan algo doloridas (fortalecidos según los optimistas) después de una hora de subir y bajar por nieve virgen.
Hay muchas excursiones que se contratan en agencias del pueblo como la de Cristian Agostini: Eneqene Turismo. Él recibe a los viajeros en un tráiler que era de su abuelo. Se especializa en motos de nieve. "¿Te animás a manejar?" Su propuesta, aclara, no es como manejar en la nieve llana de Ushuaia sino por laderas y nieve virgen. Hay que animarse: el paseo propone adrenalina y alcanza uno de los puntos de mejor vista panorámica, más allá de la Laguna Escondida.
Datos útiles
Cómo llegar
En avión, desde Buenos Aires lo habitual es volar a Neuquén capital y de allí seguir en auto 363 km, casi cuatro horas, hasta Caviahue.www.caviahue.com
Dónde dormir
Grand Hotel: ski in out. 41 habitaciones dobles y suites premium con TV 42 Full HD. Desde $2187 la habitación doble en temporada media (tarifa promo ya que solo está habilitada la primera etapa del proyecto).
Motos de nieve
Cristian Agostini, 02942 15466969; www.eneqeneturismo.com.ar
Qué comprar:
Las Bruscas Cerveza: hay cerveza de piñón y una rubia ahumada imperdible. Es un local de venta, pero también lugar de encuentro en pleno centro. Tel. 02942-15554179.
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