Armar el nido: un departamento para más de dos
Se enamoraron trabajando en una empresa de té y soñaron juntos este depto en Recoleta para formar su familia y reunirse con amigos.
Nani Baleani (34) y Pablo Lorenzo (38) se conocieron en una prueba de platos que organizaba Tea Connection, la marca de té en hebras creada por Pablo y dos socios en 2006. Ella, licenciada en Marketing, se infiltró buscando ideas, sin saber que en realidad ahí iba a encontrar al futuro padre de sus hijos y que, más tarde, también trabajaría en su empresa. Hoy, hace cuatro años que Nani y Pablo están en pareja y son papás de Calita, de un año, y de Simón, de dos meses. La familia vive desde 2013 en un noveno piso en Recoleta, un departamento lleno de luz donde los hábitos, el ritmo y hasta la decoración están influenciados por la constante y silenciosa presencia del té.
Fue con el embarazo de Calita que decidieron buscar una casa que, por sobre todo, tuviera lugar para recibir amigos y mucho verde. Así dieron con la de Recoleta, que, además del balcón, los atrajo por la solidez y las dimensiones de sus ambientes: una cocina comedor con dependencia, dos cuartos, un estudio con paredes de madera y un living inmenso. Lo primero que hicieron al mudarse fue aprovisionarse de plantas para el balcón. Al resto lo fueron equipando de a poco y bajo su absoluta creatividad y gusto. "Prefiero que las cosas lleguen de a una que ir a buscarlas", dice Nani. Eso se ve, sobre todo, en los objetos que fueron trayendo de sus viajes de trabajo o de placer a países como Suecia, Japón, Tailandia, Vietnam, China o Camboya.
COCINA COMEDOR
Aquí, cajón que se abre, cajón que alberga latas y bolsas con hebras de té de varias marcas y procedencias. "Nos gusta probar y explorar todo el tiempo sabores distintos según el mood del día", dice Pablo. Las estanterías están repletas de filtros, tazas y relojes de arena para tomar el tiempo de las infusiones. En el resto del ambiente, hay libros de cocina, sillas amarillas y un cuadro del brasileño Romero Britto.
LIVING
Es el espacio de encuentro de la familia: los sábados a la mañana desayunan ahí con vista al balcón y durante la semana lo eligen para cenar o compartir el té de última hora. Toda la atención se la lleva un súper espejo que Nani tenía en su casa de soltera al que le hizo un restyling reemplazando el dorado a la hoja del marco por un amarillo fluorescente.
CUARTOS
Sin respaldo, una pátina verde en la pared de la cabecera coronada con un cuadro que mandó a hacer Nani con otro retazo de tela que compró en Marimekko dan marco a la cama del cuarto principal. Las dos mesas de luz, sobre las que lucen los veladores blancos de A3 Estudio de Diseño, siempre están al tope de libros. El dormitorio de Calita y de Simón no puede ser más lindo.
BALCÓN
Un olivo, un limonero, una Eugenia, cañas de bambú, enredaderas. Las plantas que compraron inmediatamente después de mudarse crecieron y hoy, desde el living, la vista es de una pared verde y fresca que, además, les da intimidad. Allí, si es verano, prenden la parrilla y llegan amigos de ambos lados. "Nos encanta presentar gente y que se conozcan. Hacemos reuniones todos los fines de semana", cuentan. El balcón, con una de las mejores orientaciones (hacia el Noroeste), tiene todo para recibir visitas: dos sillas Acapulco (MercadoLibre, desde $800), un sillón hecho con elementos de demolición y una mesa de madera y hierro ($4500 el juego, en el Mercado de las Pulgas). Al asiento le dieron vida con dos almohadones modelo Bolivia (Salmón Tienda, $770) y otro amarillo de Chirola Cool Things.
Fotos de: Magalí Saberian.
Producción de: Florencia Vicente Lago.
¿Qué te pareció el departamento de esta familia? Podés conocer más historias como la de Pablo y Nani enDepartamento para tres.
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