Alemania y Argentina, una propuesta para el futuro
“El fin del mundo”, de vez en cuando me dicen mis interlocutores que allí se encuentra la Argentina. Entonces se piensa en la infinita extensión de la Patagonia, en “soledad”, lejanía y sosiego. Lo que puede significar la búsqueda del paraíso para un turista, para alguien que busca un remanso, no puede ser el deseo de un país, de una economía que busca reinsertarse y recuperar su antigua e impresionante fortaleza.
Europa y América Latina, Alemania y la Argentina, deberían ser aliadas naturales y no pueden permanecer pasivas en el contexto de un mundo azotado por la pandemia y por el estrés de un panorama económico que se transforma en forma vertiginosa a nivel mundial; a ello se suma un fuerte desplazamiento de pesos geopolíticos, y algunos actores que sin ningún reparo ejercen el poder económico para crear dependencias políticas, o hacen uso del poder militar frente a sus vecinos. Si nuestro objetivo es que el derecho prevalezca por sobre el poder, si nos interesa más el bienestar del individuo que la acumulación de poder estatal o la prevalencia de una ideología, entonces debemos unirnos. El mismo criterio se aplica a la gestión de la pandemia, al cambio climático o a la transición hacia la era digital, todos temas que nos atañen y que requieren de nuestra unión.
Alemania y la Argentina son vecinas en esta aldea global, socias con potencial estratégico, ya que compartimos estrechos y cordiales lazos. Desde hace más de 160 años nos vinculan las relaciones oficiales mediante el “Tratado de amistad, comercio y navegación”; numerosos inmigrantes alemanes encontraron en la Argentina un nuevo hogar. Hoy en día, somos parte del G-20 y de la Alianza para el Multilateralismo, y la defensa del multilateralismo y un orden mundial abierto y basado en normas, donde el Estado sirve a los intereses de sus ciudadanos, constituyen un buen punto de partida para nuestra cooperación. Si defendemos estos principios en forma clara e indudable se fortalecerán nuestra credibilidad y eficiencia.
Para definir un futuro en común se requieren perspectiva a largo plazo y confiabilidad. Se necesitan un marco sólido y estructuras, que son un respaldo independientemente de la gestión política cotidiana y que facilitan nuevas inversiones. Nuestro “Foro Futuro”, que el canciller Felipe Solá y el ministro Federal de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, inauguran hoy, es un instrumento con el cual Alemania junto con la Argentina, en el marco de un nuevo programa de cooperación, se podrán preparar mejor para el mundo de mañana. Esta nueva plataforma abarcará dos temáticas: por un lado, la digitalización y la transformación digital que conlleva para nuestras economías nacionales y, por otra parte, el cambio en generación y utilización de energía, que ofrece un gran potencial para un intenso intercambio entre nuestros países. Digitalización y transición energética son dos temas decisivos para el éxito de aquellos países que quieren participar en el diseño del futuro.
En el área de la digitalización estamos trabajando para traer a Buenos Aires una feria alemana de industria 4.0, con el objetivo de acercar el mundo de la automatización, ante todo, a la pequeña y mediana industria.
También queremos ayudar a promover la creatividad y las ideas de los impresionantes jóvenes en la Argentina. Se lo merecen, y la Argentina los necesita. Mediante la inclusión concreta de escuelas y empresas argentinas, deseamos avanzar más aún con la bilateralización de la llamada “formación profesional dual”, en la cual, ante todo, los empresarios en su propio interés se ocupan confiablemente de la capacitación de personas jóvenes en profesiones técnicas. Ya estamos llevando a cabo conversaciones fructíferas con los actores pertinentes.
La Argentina es una plaza económica prometedora para empresas innovadoras de alta tecnología y para startups. Es nuestra intención construir así un puente entre Alemania y la Argentina para startups, y contribuir de este modo a la promoción de un empresariado joven dispuesto a correr riesgos.
En el campo de la energía deseamos construir una alianza energética. La Argentina ofrece un potencial enorme e ilimitado en lo referente a las energías renovables. El objetivo de esta alianza es desarrollar estas energías y facilitar su acceso al mercado. Vemos en la Argentina un socio importante, en particular por su enorme potencial para la pronta producción de hidrógeno verde. En el futuro, Alemania puede ser para la Argentina uno de los mayores mercados compradores en el mundo.
Este plan sólido es nuestro ofrecimiento para intensificar nuestra cooperación y profundizar nuestras relaciones para salir de la crisis en los próximos años. Algunos proyectos ya están encaminados, otros van a depender de la voluntad y de los compromisos de los demás involucrados. Como se dice en todo el mundo: hacen falta dos para bailar un tango.
Sabemos que son grandes tareas: salir de la crisis y entrar a la era digital, diseñar la próxima transformación industrial en forma inteligente, y acordar una actitud digna con respecto a la naturaleza. Pero seamos optimistas, juntos podremos enfrentarlas mejor. ¿Acaso desde el fin del mundo uno no puede ubicarse también en el centro del mundo?
Embajador de la República Federal de Alemania