Reseña: Novísimos, de Juana Bignozzi
"El día que dejes de hablarme de manera irónica/ seca y un poco desatendida/ sabré que me estoy muriendo", escribió Juana Bignozzi (Buenos Aires, 1937-2015) en un poema de si alguien tiene que ser después (2010). Esos versos, como tantos otros de ella, podrían figurar en Novísimos, colección de inéditos que –según revela Mercedes Halfon en el prólogo a la edición– no es una simple acumulación de papeles dispersos, sino un libro "casi listo", al que le faltaban apenas algunas correcciones.
Siempre existe la tentación, cuando se trata de los finales de una obra, de buscarle al autor un estilo tardío, esa "suerte de exilio autoimpuesto" –como definía Edward Said en la estela de T. W. Adorno– en que el creador traspasaría los límites de su época. Bignozzi, en todo caso, fue tardía de manera prematura (desde Mujer de cierto orden, en 1967, al menos) y no perdió nunca su manera irónica, seca, que se hace pasar por desatendida. Tampoco en los poemas de Novísimos, que tensan –si se quiere buscar notas distintivas– una causticidad crepuscular, la sorprendente certeza de que, más pronto o más tarde, habrá una despedida: "nuestros almuerzos de juventud/ han terminado/ en escribir las necrológicas unas de otras". El tono no es, contra todo, funerario (a diferencia, por ejemplo, de Diario de muerte, del chileno Enrique Lihn). La tristeza por el marido fallecido, las dudas por el regreso al país natal (Bignozzi vivió muchos años en España) se compensan con sus amistades en la comunidad de poetas más jóvenes: "la lucidez nos ha llevado a no tener hijos […]/ ¿La lucidez termina en un testamento para extraños? Pienso todo el día en mi albacea".
Los versos sin puntuación, con virajes abruptos, con la primera persona firme y al mismo tiempo volátil (como un pájaro que no se deja atrapar en vuelo) replican su estilo característico. Bignozzi es una de las poetas argentinas que –salida de los años 60– mejor hizo de su voz una compacta aleación de experiencia personal, alusiones culturales sin énfasis y, también, de política. "Prosapia argentina" recuerda esa filigrana ("toda la militancia de mi familia") que recorre su obra con lealtad, sin estridencias de megáfono. Novísimos podría haber sido el apéndice de una poesía completa, como anota Halfon, pero la edición autónoma le da la identidad que por suerte lo vuelve insoslayable.
NOVÍSIMOS
Por Juana Bignozzi
Adriana Hidalgo. 134 páginas, $ 590