Proyecto de aborto. Un fracaso del Estado y para toda la sociedad
¿Qué país queremos? Sin dudas que una gran mayoría de argentinos venció el miedo y días atrás salió en más de 500 ciudades para decir que no quiere un país que recurra al aborto como una solución a los embarazos no planificados. Una gran mayoría de los argentinos no quiere ese fracaso para la Argentina.
Si hay una deuda con las mujeres de nuestro país no tiene que ver con el aborto legal, porque no soluciona nada terminar con una vida en gestación. El aborto no va a frenar el crecimiento de estadísticas de mujeres que se quedan embarazadas inintencionalmente. Y esta problemática va a seguir existiendo en tanto y en cuanto no haya educación sexual reproductiva y métodos anticonceptivos para ellas, pero sobre todo para ellos. El embarazo no es el problema. Ahí el Estado ya llega tarde. El problema está en la falta de interés en este Gobierno, y en mayor o medida también en los anteriores, de trabajar sobre el verdadero problema: la falta de proyecto de vida y de planificación de nuestros jóvenes.
Este proyecto plantea un fracaso no solo para el Estado, que reconocería que está llegando tarde en la prevención de embarazos no intencionales, sino que es un fracaso para la sociedad en general, que acepta el descarte de sus seres más indefensos al priorizar el "derecho" a decidir de la mujer por sobre el derecho a la vida del niño por nacer.
Además, este proyecto llega en el momento más inoportuno de todos. Si bien debatir sobre la vida, en mi criterio, siempre es inoportuno, este año tuvimos a todo el personal de salud y a toda la población cumpliendo los protocolos para tratar de salvar vidas y, como cierre de un año difícil, el oficialismo presenta este proyecto de aborto. Se nos dijo hace unos meses que entre la economía y la vida, había que priorizar la vida, pero no se usa ese mismo paralelismo cuando hablamos del aborto.
Después del rechazo del 2018, se presentaron más de 50 proyectos para trabajar sobre la problemática y no fue tratado ninguno de ellos. Los proyectos salieron de despachos oficialistas y opositores, pero no hubo la voluntad política de trabajarlos para encontrar soluciones alternativas a la legalización del aborto
Una de las cosas más difíciles que tiene este proyecto es que contempla la posibilidad de acceder a un aborto hasta la semana 39, al dejar abierto a las causales de salud según lo entiende la OMS. Los que nos interiorizamos sobre el tema sabemos que los abortos en etapa gestacional tan avanzada son peligrosos tanto para el bebé como para el útero de la mujer. Días atrás, uno de los expositores a favor de este proyecto explicó como se produce un aborto en la semana 30, por ejemplo, y paralizó a miles de personas que estaban siguiendo el plenario.
En este proyecto se busca "aborto seguro", pero se ha eliminado la agravante por muerte de la mujer en ocasión de aborto consentido… incluso si ese aborto es clandestino. Se ha eliminado la necesidad de que intervenga un médico y se persigue al objetor de conciencia. Este proyecto lejos de bajar su tono, lo acentuó haciendo un texto mucho más duro y cargado de contenido ideológico, lejos de los argumentos jurídicos, científicos o médicos.
Después del rechazo del 2018, se presentaron más de 50 proyectos para trabajar sobre la problemática y no fue tratado ninguno de ellos. Los proyectos salieron de despachos oficialistas y opositores, pero no hubo la voluntad política de trabajarlos para encontrar soluciones alternativas a la legalización del aborto.
Hoy comienza la discusión del tema en la sesión de la Cámara de Diputados. Espero que todos podamos encarar este debate desde un lugar de respeto por el que piensa distinto, sin chicanas ni bajezas. Ojalá que en esta oportunidad se frene este avance y que después podamos sentarnos los diputados de todos los sectores a trabajar sobre la verdadera problemática detrás del aborto: la prevención.
Vivimos días en los que las prioridades son otras: la vuelta a la normalidad, la reactivación económica, la generación de empleos, la educación, la seguridad. No podemos votar una ley tan irrazonable y arbitraria como el aborto. No nos olvidemos que los diputados de la Nación fuimos elegidos para representar al pueblo de nuestras provincias que, en una gran mayoría, expresó que está en contra del aborto. Esa Argentina pide ser escuchada y representada.
Diputada Nacional (Pro)