Reseña: Ixión, de Jorge Torres Zabaleta
Ixión y otros cuentos fantásticos es una recopilación de todas las páginas que, entre 1968 y 1981, Jorge Torres Zavaleta (Buenos Aires, 1951) le dedicó a un género literario cuya versión moderna encontró su primera forma en la narrativa gótica. Aquellas ficciones de terror y erotismo larvado fueron una consecuencia cultural del orden clásico y la razón iluminista del último tercio del siglo XVIII.
El conjunto de los 37 relatos de Ixión… –de calidad diversa– pone en funcionamiento buena parte de los fenómenos que habitualmente participan del género fantástico. No falta, por ejemplo, aquel en que un objeto trasciende su inofensiva materialidad e interviene sobre el destino de los humanos. Un traje, un reloj, una tetera o unos anteojos pueden trastocar el orden de la vida cotidiana y resultar fatales para sus dueños.
Las fronteras que separan las especies se desdibujan. Los animales pueden humanizarse y organizarse para atacar, como sucede en “Las liebres”. O al revés: los hombres pueden adoptar conductas animales, como en “El tío Ernesto”. En el relato que bautiza el libro, el fenómeno se instala a mitad de camino: los centauros se reproducen como los conejos de “Carta a una señorita en París”, de Julio Cortázar. También el mundo vegetal puede dar el salto hacia la conciencia: “La astucia de los cardos era incalculable”, asegura el narrador de “Los cardos”.
La casa, rodeada de un jardín, un parque o hectáreas de campo, es el ámbito privilegiado para alojar a los protagonistas y el fenómeno que los afecta. Son varios los cuentos en que un grupo de niños o adolescentes, casi innominado o poco diferenciado, queda enfrentado a un personaje singular, que puede ser una tía, un tío, una vieja amiga de la familia o una niñera. La decadencia de la oligarquía estanciera argentina resulta un estadio ideal para el fantasy. Los personajes arrastran tiempos que se han vuelto espectrales: Agustina era “la sobreviviente de un pasado ya muerto”, señala el narrador de “Absorción”.
Varios de los relatos, por su extensión y porque representan un fenómeno sobrenatural que no da lugar a la vacilación del lector, recuerdan algunos de los relatos de Cuentos breves y extraordinarios que reunieron Borges y Bioy Casares a principios de la década de 1950. En la “Nota preliminar”, los antólogos destacaban “el agrado de lo narrativo” como uno de los placeres que podían deparar al lector las piezas seleccionadas. La constante intención de entretener mediante la narración es quizá la principal virtud del libro de Torres Zavaleta.
IIXIÓN
Jorge Torres Zavaleta
GEL
218 páginas
$ 280