¿Pueden estas elecciones afectar nuestra salud mental?

Definitivamente las elecciones del próximo domingo pueden afectar nuestra salud mental. Hace tiempo que se sabe que la incertidumbre aumenta los niveles de estrés, teniendo un efecto en el bienestar y la salud mental de las personas. Si combinamos esa incertidumbre con otro gran estresor, que es la falta de control personal sobre el resultado de la elección que realicemos, tenemos un cóctel explosivo para nuestra salud emocional.

Si bien los estudios sobre el impacto que las elecciones políticas tienen sobre la salud mental son recientes y escasos, lo cierto es que todos ellos apuntan a la misma dirección. Las elecciones pueden aumentar nuestros niveles de estrés, aumentar la sintomatología de depresión, y también de ansiedad, e incluso las hospitalizaciones por enfermedad cardiovascular.

Los primeros estudios realizados alrededor del año 2010 comenzaron por reportar el aumento de las hormonas del estrés, como el cortisol y la testosterona, en épocas electorales. Así, por ejemplo, en un estudio publicado por la Universidad de Virginia se le solicitó a un grupo de personas proporcionar muestras de saliva para medir dichas hormonas durante las elecciones presidenciales en Estados Unidos en el 2008. Un dato interesante es que el día de la elección, los niveles de ambas hormonas se vieron afectados en el grupo en general, pero en particular en aquellos votantes cuyos candidatos perdieron la elección.

Resultados similares fueron hallados por otro estudio de la Universidad de Duke, el cual mostró particularmente que los niveles de cortisol estaban elevados en aquellos votantes de John McCain y no así en aquellos que votaron a Barack Obama.

Pero no todo queda en las hormonas. Aparentemente, los votantes somos conscientes del estrés que las elecciones presidenciales nos generan. Así, un reporte de la Asociación Psicológica de los Estados Unidos afirma que el 68% de los norteamericanos consideraron que las elecciones de 2020 fueron una fuente significativa de estrés en su vida, mostrando este número un considerable aumento de los niveles reportados en las elecciones del 2016 (52%).

Existen también estudios que indican que tanto la cantidad de sueño como su eficacia disminuyen la noche previa a una elección, al igual que aumentan los niveles de consumo de alcohol y las emociones de valencia negativa.

Un estudio reciente publicado en 2022 por la revista Economics and Human Biology, evidenció que los síntomas autoinformados de ansiedad y depresión aumentaron de manera constante hasta llegado el día de la elección presidencial en Estados Unidos en el 2020, superando incluso las épocas de aislamiento obligatorio por Covid ese mismo año en ese mismo país. Dicho estudio reportó que también aumentaron las visitas a consultorios de tratamiento específico de ansiedad y depresión y las prescripciones de drogas relacionadas con condiciones asociadas a la salud mental.

Como conclusión, las elecciones presidenciales del domingo podrían afectar nuestros niveles de estrés y nuestra salud mental. El impacto parece ser mayor en aquellos que le dan más importancia a la política y en aquellos cuyo candidato no resulte vencedor. También parece ser más importante en aquellas elecciones polarizadas y que son más peleadas, cuando existen candidatos agresivos que buscan la división.

Por lo cual es importante tomarse estas elecciones con responsabilidad pero con calma. Es cierto que hay mucho en juego, y entre todo esto está nuestra salud mental.

Dra. En Psicología, Coordinadora Científica de Fundación Ineco y Directora de Ineco Organizaciones