Oh, mamá, Superman me ha besado
Superman tuvo una vida amorosa intensa: compañeras de colegio y de trabajo, amazonas, sirenas y princesas extraterrestres. Pero todas ellas eran mujeres, porque si hay algo que indiscutible en el Hombre de Acero es su heterosexualidad. Clark se casó con su amada Lois Lane y tuvieron un hijo al que llamaron Jonathan, como el abuelo. En noviembre Jonathan (a partir de acá, Jon) va a besarse con su compañero de aventuras Jay Nakamura y comenzar una relación amorosa. Esta noticia fue anunciada por DC Comics el pasado 11 de octubre, Día Nacional de Salir del Armario.
Jon se está probando la capa de su padre y -al uso de estos tiempos- es ecologista y protesta contra la deportación de refugiados. “La idea de sustituir a Clark Kent por otro salvador blanco heterosexual nos parecía una ocasión desperdiciada. Un nuevo Superman debía tener nuevas luchas y problemas del mundo real” dice Tom Taylor, guionista de la serie Superman, Son of Kal-El. El nuevo Superman tiene un poder casi infinito, pero no puede evitar que su vida sea modelada por nuestra cultura. Porque es un semidiós, pero creado a imagen y semejanza de los humanos. Alguna vez le preguntaron quién era Superman a Peter Tomasi, otro de sus escritores. Le respondió “Superman sos vos”.
Y además:
Otros superhéroes de DC han salido del closet. Tim Drake (uno de los muchos Róbines de Batman) es bisexual y Batwoman es lesbiana. También existió un héroe peruano llamado “Extraño”, de ropa colorinche que pedía que lo llamaran “Tía”. Pero eran figuras de segunda línea y esta vez se trata de un superhéroe no binario, hijo y sucesor de una de las figuras que componen la “Trinidad” fundamental de DC Comics: Superman, Batman y Wonder Woman.