El reino de los inquilinos
El modelo de crecimiento actual se fundamenta en la demanda interna motorizada por el incremento del gasto social, los subsidios, el financiamiento barato al consumo y otras transferencias de dinero a hogares de ingresos medios y bajos. Este contexto ha generado un aumento del consumo privado.
Inserta en este modelo, y ante la inexistente oferta actual de instrumentos de financiación hipotecaria, la clase media argentina ha cambiado su estilo de "inversión" sustituyendo la cuota hipotecaria por la cuota tecnológica: ladrillos por LCD, tierra por automóvil 0 km. Todos bienes de rápida depreciación en el tiempo.
El ahorro de largo plazo en bienes tangibles se ha transformado en consumo efímero y "pequeños premios": restaurante, shopping, cuota del gimnasio y vacaciones en la costa. El crédito hoy se aplica exclusivamente al consumo.
Si este "consumo hedonista" reemplaza gradualmente al "ladrillo" –destino tradicional del ahorro–, la proporción de dueños a lo largo del tiempo irá en disminución. El fenómeno está generando una lenta "inquilinización" de la familia argentina de clase media, que se repite en todos los centros urbanos del país.
Mientras el crédito hipotecario no aparezca como instrumento dinamizador, la compraventa de inmuebles seguirá siendo protagonizada sólo por unos pocos, el 5% de la población económicamente activa, los que de alguna manera están transformando en inversión inmobiliaria los flujos de una economía que muestra como única alternativa segura y confiable los activos físicos.
En este sentido, los productos de bajo margen de rentabilidad, pero de rápida realización que se han destacado son los monoambientes, pequeñas unidades ideales para soportar el flujo de nuevos inquilinos que genera este modelo.
Una suerte de cajas de seguridad con paredes de ladrillo que cumplen perfectamente los requisitos de los actuales inversores, quienes no tienen aspiraciones de márgenes superlativos: sólo pretenden preservar lo que tienen, defender sus ahorros y generar inversión en activos físicos cercanos.