Las extrañas reivindicaciones a Mauricio Macri
La urgencia por bloquear el funcionamiento del Consejo de la Magistratura obligó a Cristina Fernández de Kirchner a sabotear el intento de colocar a Mauricio Macri en el centro de la escena política que Axel Kicillof había insinuado un día antes. “Macri los cagó” dijo en un Congreso organizado por la UOM en Mar del Plata. Una advertencia encubierta al riesgo en el que habrían incurrido los trabajadores que votaron por Juntos en 2015. Pero también la primera exteriorización pública de una preocupación palpable: el oficialismo podría ser el principal garante de que esa situación vuelva a repetirse el año que viene.
Probablemente quienes temen que el desempeño del Frente de Todos en el gobierno esté contribuyendo a que eso pueda ocurrir ya estén al tanto de ciertas reivindicaciones a Macri. Algunas muy vidriosas. Como la del 7 de abril en el Ministerio de Desarrollo Social. Juan Zabaleta, su titular, y un grupo de colaboradores, se reunieron con la Unidad Piquetera encabezada por Eduardo Belliboni, en un intento por destrabar el conflicto que una semana antes derivó en el acampe sobre la Avenida 9 de Julio.
La irreductible posición oficial frente al pedido de habilitar nuevos planes sociales llevó a Belliboni a recordar que en la gestión del expresidente fueron duplicados en número pero también en el monto. El reconocimiento del líder trotskista a la aparente superioridad de Macri sobre el kirchnerismo en el terreno de la sensibilidad irritó a Pérsico. Es decir, logró el efecto deseado. En representación del Movimiento Evita, el ahora funcionario público negoció con Macri la sanción de una ley que reconoció la emergencia social y le permitió al gobierno adoptar esa medida.
Pérsico reaccionó acusando a Belliboni de arriar gente. El líder del Polo Obrero criticó a Pérsico por el silencio que impondría a sus bases. El 11 de abril, Macri fue testigo de otra muestra de este extraño fenómeno. Recibió en sus oficinas de Olivos a los diputados de Juntos en la Legislatura bonaerense. Los del Pro se sorprendieron con los elogios que le dedicó Florencia Retamoso, alineada con la candidatura presidencial de Patricia Bullrich. Algunos se lo atribuyeron al efecto del estado emotivo que le causó el encuentro con el expresidente
Menos indulgentes, otros especulan que lo hizo para poder interrogarlo después por su futuro político. Macri mantiene hermetismo sobre ese tema. Pero participa activamente en la discusión por la candidatura a gobernador en la provincia de Buenos Aires. Una disputa que comienza a cobrar forma con los aspirantes a ocupar los cargos asignados a la oposición en la administración de Kicillof.
A Bullrich y a Gerardo Millman, su delegado en la provincia, les preocupó que Macri haya propuesto a Carolina Barros Schelotto para ocupar el cargo que intentan reservarle a Marcelo “Oso” Díaz: una de los cargos adjuntos al Defensor General del Pueblo. Retamoso, Millman y Díaz animaron la estructura en el conurbano del GEN de Margarita Stolbizer, aliada de Emilio Monzó. El GEN nació como una alternativa de izquierda contra el peronismo.
Bullrich y Millman deberían aliviarse. Barros Schelotto podría integrar el directorio de Oseba, ente encargado de auditar el servicio de energía eléctrica que prestan en la provincia distribuidoras y cooperativas. Carolina es la hermana de Guillermo Barros Schelotto, técnico de la selección de fútbol de Paraguay y uno de los exjugadores de Boca Juniors de buen vínculo con Macri que podría aprovechar la ocasión para un doble propósito: las elecciones presidenciales y las de Boca Juniors el año que viene.
Junto a Daniel Angelici, Macri trabaja en unir a toda la oposición para enfrentar a Juan Román Riquelme, sostenido solo por Roberto Somi, un empresario gastronómico al que se vincula con Enrique “Coti” Nosiglia. El apellido Barros Schelotto se menciona casi en simultáneo al lanzamiento de esta tarde en Lobos de Hacemos Juntos. El experimento con el que Néstor Grindetti y Julio Garro desafían la candidatura a gobernador de Diego Santilli.
Los intendentes de Lanús y de La Plata no objetarían la llegada de Bruno Screnci al directorio del Bapro. Sería el primer reconocimiento del Pro al triunfo de Santilli en las elecciones. Lo más parecido a una victoria que logra recoger después del 14 de noviembre. En simultáneo al lanzamiento en Lobos, se presentará en Navarro la precandidatura a gobernador de Álvaro de Lamadrid, el menos conocido de los participantes en la campaña de la interna de la UCR bonaerense en la que Maxi Abad se impuso a Gustavo Posse.
Astuto, De Lamadrid se presenta como el único candidato radical. Aunque no está claro que lo sea del radicalismo, donde se debate la conveniencia de postular a Joaquín De La Torre para neutralizar la aparente simpatía despertada por Santilli entre los intendentes del PJ en el conurbano. La región donde el candidato del Pro hizo la diferencia para vencer a Facundo Manes en las PASO. Abad fue el anfitrión del asado que la noche del martes convocó a dirigentes de la UCR en el comité Provincia de La Plata.
Manes, Ernesto Sanz, Carolina Losada y Gerardo Morales entre ellos. El gobernador de Jujuy tuvo dificultades para explicar las demoras en las gestiones que se le delegaron a fin de año para que Evolución de Martin Lousteau sume sus diputados al interbloque de Juntos. Los convencionales de Lousteau conforman de momento el grupo minoritario que resiste votar en mayo a Gastón Manes como presidente de la Convención Nacional.
Alguna supuesta vaga referencia efectuada por Morales a los peronistas que convocó Monzó en una cena de hace dos semanas en San Isidro hizo especular con su acercamiento a Horacio Rodríguez Larreta. Ese grupo de comensales que integran entre otros Graciela Camaño y Florencio Randazzo, optarían por Manes si el jefe del Gobierno porteño ve relegada su candidatura por la de alguien respaldado por Macri. ¿O tal vez por él mismo?
Macri llamó uno por uno a los 12 miembros de la comisión directiva del Movimiento Empresarial Anti Bloqueo que reúne a un centenar de pymes y los felicitó por su tarea. Esa entidad ganó visibilidad con la detención de Maximiliano Cabaleyro y Emiliano Espíndola, dos dirigentes camioneros de San Nicolás por extorsionar a una empresa de San Pedro bajo la amenaza de evitar que distribuya productos alimenticios.
La jueza María Eugenia Maiztegui no solo dispuso su detención si no que ordenó a la DDI de San Nicolás de hacer lo mismo con cualquiera que intente obstruir los accesos a San Nicolás. Hugo Moyano pareció al tanto de esa decisión. Junto al grupo de camioneros que lo acompañó, se cuidó de no interferir el tránsito. Protestaron a la vera de esos caminos. El Movimiento Antibloqueo es asesorado por Florencia Arietto, muy popular en el penal de San Nicolás.
Desde la detención de Cabaleyro y Espíndola, recibe mensajes de agradecimientos de su población carcelaria. Arietto también asesora a la empresa que los denunció. Gracias a eso tienen colchones nuevos y una mejora sustancial en su dieta alimentaria. ¿Una contribución desinteresada del sindicato de Camioneros? Patrañas, sin dudas. Macri agradeció al Movimiento Antibloqueo hacer lo que él no pudo.
En la reunión con los legisladores de Juntos aseguró que la dificultad del Pro no está en los libertarios de Javier Milei si no en su capacidad de recobrar el impulso original. Probablemente la razón por la que interrogue a sus candidatos sobre la vocación para enfrentar situaciones como las que encarna Moyano.