La unidad nacional y la reconstrucción del país
Tras la pandemia del coronavirus el mundo y la Argentina en especial van a vivir una crisis económico-social como la de 1929. En esta situación terminal, es imprescindible desarrollar acciones para lograr una unión nacional que permita reconstruir el tejido social y generar, a través de la organización y desempeño del factor humano y la administración eficiente de los recursos materiales, un ordenamiento consensuado de los pasos a seguir y objetivos a alcanzar. Es necesario acordar cómo llegar a ello, una vez tomada la decisión de emprender generosamente un proceso de diálogo nacional que incluya a las fuerzas políticas, las organizaciones de la sociedad civil, las confesiones religiosas y el aporte de los ciudadanos expertos más reconocidos y comprometidos con el desarrollo de cada actividad.
El método de facilitación que se aplicaría en las mesas de diálogo puede ser en su forma actualizada el utilizado por el especialista Adam Kahane y su equipo en Sudáfrica en la década de los noventa, como así también en nuestro país en el Diálogo Argentino convocado en 2002 por el gobierno, la Iglesia Católica y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Consta de varias etapas:
- El presidente de la Nación, con el.apoyo de los jefes de los partidos políticos con representación parlamentaria, deciden realizar el proceso de diálogo nacional
- Un grupo de organizaciones de la sociedad civil (OSC) se reúne para identificar y consensuar quiénes pueden ser los 25 ciudadanos ejemplares que representen a la sociedad civil en una mesa de diálogo nacional, junto con un grupo de dirigentes políticos que no excederán el número de 5. Se constituirá así la mesa superior del diálogo nacional para la planificación de un escenario futuro a 5 años. Este foro se encuentra en el ápice de la pirámide a conformar. Sugiero que las confesiones religiosas más representativas sean invitadas a participar o actuar como partes o como observadoras. Su actuación puede concretarse proponiendo temas, así como a través de veedores que actúen en las mesas temáticas.
- En esta mesa superior se acuerdan los temas básicos a ser tratados en las mesas temáticas especiales, integradas por los mejores expertos del país en cada uno de los items comprendidos en dichos temas.
- La mesa superior decide cómo las mesas temáticas aplicarán la metodología mencionada.
- En cada mesa temática se analiza el pasado, el presente y las distintas soluciones a afrontar en cuanto al tema tratado en un período no inferior a cinco años.
- Temas que se sugiere tratar en las mesas temáticas: proyectos económicos a desarrollar durante 5 años en cada actividad; inflación y precios a alcanzar; un ambicioso plan de exportaciones complementario del anterior;decisiones monetarias, cambiarias, laborales e impositivas a establecer, acordes para posibilitar el cumplimiento de las metas que se establezcan.
- La mesa superior elige un comité ejecutivo que supervisa el funcionamiento efectivo de la labor a desarrollar en las mesas temáticas.
- Se crean comités particulares que informan en cada actividad el cumplimiento de las metas definidas en cada mesa temática.
- Todo el proceso de diálogo no debe exceder los dos meses.
- Se aclara que el llamado a la unidad nacional sería decidido por el gobierno nacional y que la participación de la sociedad civil, la de los expertos y las confesiones religiosas es la forma más adecuada para contribuir eficientemente en este ambicioso y necesario proyecto.
Asimismo, creo que nada impide que las mesas del diálogo nacional se constituyan durante los próximos meses, aun cuando los efectos nocivos de la pandemia no hayan concluido.
Abogado, representante de Organizaciones de la Sociedad Civil y ex presidente de la Mesa de Justicia del Dialogo Argentino (2002-2003)
Por Teodoro Kreckler
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