La transición energética, uno de los temas de debate en la Cumbre del B20 en Italia
Se destacó el rol del gas natural -producido de forma eficiente y sustentable- en el camino hacia la descarbonización del mundo
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Entre el 7 y 8 de octubre se reunieron en Italia los representantes de las empresas más importantes del mundo en el marco de la Cumbre del B20. Así como el G20 reúne a los Jefes de Estado de las 20 economías más grandes a nivel mundial, el B20 es su equivalente del mundo empresarial. Estuvieron presentes los CEO de Enel, Amazon, Bayer, Eni, Ericsson, representantes de Gobiernos, como el Primer Ministro de Italia, miembros de su gabinete y la Secretaria del Tesoro de Estados Unidos, y los directores de organismos internacionales como OCDE, OMC, FAO, la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático y el Programa de Naciones Unidas para el Cambio Climático.
En ese marco, YPF participó como co-chair del grupo de Energía y Eficiencia de Recursos, destacándose como empresa de energía a nivel regional, ya que dentro de la mesa de liderazgo del grupo es la única empresa de petróleo y gas de América Latina.
Bajo el lema “Remodelar el futuro: incluir, compartir, actuar”, los principales temas abordados fueron la recuperación pospandemia, la descarbonización y el desarrollo sustentable; la educación, el acceso a la salud, la equidad y la integridad como motores de progreso; el comercio, la infraestructura y la transformación digital como herramientas para el crecimiento inclusivo.
El cambio climático, uno de los desafíos más grandes de nuestros tiempos y un imperativo global, contó con un apartado especial junto a la descarbonización de las economías, las transiciones energéticas y las nuevas preferencias del consumidor, con propuestas que se focalizaron en tres ejes principales: (1) acelerar las iniciativas de reducción de gases de efecto invernadero en cumplimiento con las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional y el Acuerdo de París para alcanzar la carbono-neutralidad en 2050, trabajando no solo en el mix de generación eléctrica a partir de la neutralidad tecnológica, sino también en el uso eficiente de la energía y la mejora de la infraestructura asociada; (2) fortalecer un desarrollo sostenible e inclusivo, promoviendo políticas efectivas y sostenibles de transición, que incorporen temas relevantes, como la recapacitación y el desarrollo de nuevas competencias, la equidad de género y la diversidad (en una industria donde tenemos mucho trabajo por delante), y garantizar oportunidades para las nuevas generaciones; (3) fomentar la preservación del ambiente y de la biodiversidad, así como un uso más sostenible de los recursos promoviendo la economía circular.
YPF, como representante de la Argentina y de las economías en desarrollo, enfatizó que la descarbonización debe ser acompañada por transiciones justas. Esto implica reconocer que existen múltiples caminos y velocidades hacia el objetivo común, de acuerdo con los recursos prexistentes, puntos de partida, herramientas disponibles, prioridades de desarrollo y responsabilidad de cada país en la huella de carbono global (las economías en desarrollo cuentan en gran parte con un impacto menor que los países desarrollados en las emisiones totales de gases de efecto invernadero, nuestro país contribuye con menos del 1% y América Latina con menos del 10%).
Destacamos el rol del gas natural producido de forma eficiente y sustentable como energía de transición, ya que su utilización genera menos emisiones que otros combustibles fósiles, es un socio flexible para la intermitencia de las renovables y la indisponibilidad del almacenamiento eléctrico a gran escala, y permite descarbonizar sectores difíciles de electrificar. Nuestro país posee una matriz energética predominantemente gasífera (más del 50%), que lo posiciona en un lugar privilegiado para la transición.
Asimismo, en Vaca Muerta, la Argentina cuenta con un enorme potencial gasífero que permitirá en su desarrollo pleno no solo abastecer el mercado local, sino contribuir a la descarbonización de otros países a través de exportaciones regionales y al mundo en forma de gas natural licuado. Además de otras soluciones energéticas bajas en carbono como las renovables, las baterías de litio y el hidrógeno, en las que YPF se encuentra traccionando la industria local.
En este sentido, la resiliencia al cambio climático es un eje relevante de la nueva estrategia de la compañía y de su modelo de innovación. Su hoja de ruta se construye sobre la base de cuatro pilares: (1) reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de las operaciones de petróleo y gas, para garantizar una producción eficiente y con el menor impacto ambiental, incorporando nuevas tecnologías, la digitalización y la eficiencia energética en todo lo que hacemos; (2) el desarrollo de nuevos negocios bajos en carbono, como la generación eólica y solar a través de YPF Luz, la extracción de litio y la industrialización de baterías necesarias para la electromovilidad, y evaluando los primeros proyectos de hidrógeno azul a través del consorcio H2Ar liderado por Y-TEC, nuestra compañía de I+D, apostando también a otras tecnologías que se irán consolidando como la captura, almacenamiento y uso del carbono, el hidrógeno verde y el almacenamiento a gran escala; (3) iniciativas de economía circular de nuestros productos y de compensación de emisiones, como los proyectos de forestación con los que contamos en la provincia de Neuquén, con más de 7000 hectáreas ya forestadas; (4) programas de adaptación de nuestras operaciones a los futuros escenarios y potenciales riesgos.
Otros de los temas incluidos en el B20 fueron el acceso al financiamiento para que las economías en desarrollo logren reducir emisiones de forma competitiva, la necesidad de infraestructura energética y sistemas de interconexión resilientes, la perspectiva de diversidad en la adopción de nuevas habilidades y los empleos de calidad. Todo esto enmarcado en el acceso asequible a la energía, en un mundo donde la pandemia empeoró su acceso especialmente en las poblaciones más vulnerables. Las transiciones deben ser justas e inclusivas, sin dejar a nadie atrás, asegurando los mecanismos para la creación y reconversión de empleos, el fortalecimiento de las cadenas de valor y el fomento a la industria. Enfatizamos por ende que la sostenibilidad debe de ser abordada en su triple dimensión: económica, ambiental y social.
La relevancia de estos debates a nivel mundial, donde YPF juega un rol destacado, se vincula con que las recomendaciones de todos los grupos de trabajo del B20, incluidas las de Energía y Eficiencia de Recursos, serán presentadas al G20 en la Cumbre de Jefes de Estado a fines de mes en Roma. Como la empresa líder de energía de la Argentina, estamos comprometidos con el desarrollo pleno de nuestros recursos energéticos, aprovechando la ventana de oportunidad que tenemos para poner en valor los vastos recursos de Vaca Muerta de forma eficiente y sustentable, a la vez que contribuimos a las transiciones energéticas del país a través del desarrollo de nuevas tecnologías y fuentes energéticas bajas en carbono, siempre con foco en nuestros clientes y en la creación de valor para todos los argentinos.
El autor es CEO y miembro del directorio de YPF, y co-chair del grupo de Energía y Eficiencia de Recursos del B20 2021.